A la
vista de todo el país, de America y el
mundo occidental, está allí como vivimos los venezolanos en medio de un caos espantoso que abate miserablemente a los venezolanos, que no es
más que el epilogo trágico y la consecuencia dolorosa de los
perversos resultados de la continuación
durante estos diez y siete meses de gobierno del protempore presidente Maduro, y de lo que
él llama su régimen
cívico-militar.
Luego de recibir y tratar de ocultar a los venezolanos y al
mundo la verdadera trágica realidad nacional, tras los
doce años de anarquía y oprobio que dejo Chávez. Un país sencillamente desmantelado institucionalmente, destruido su
aparato productivo, su agricultura e industria, desabastecidos de alimentos y
de otras necesidades básicas, abatito por el crimen organizado y la impunidad,
corrompidos grotescamente sus altos y
medianos funcionarios, plagado de toda clase de inmoralidades y en bancarrota
fiscal. Que fue el resultado real del desastre
de proporciones históricas de
como Hugo Chávez manejo este país, amparado en
el invento de los tiranos Castro
bajo la llamada “Revolución
bolivariana del siglo XXI,” que
fue la formula política que le al régimen castrista apoderarse de la riqueza del país, saquear
sus recursos fiscales, una vez que
pisotearon la soberanía nacional, ante
la actitud pasiva y cooperadora de
quienes tenían que salirle a paso y detener tan demoledora acción.
Así dejo a Venezuela el difunto de la Habana
y así continua hacia su despeñadero final en forma irreversible, es cuestión de
tiempo . En medio de un escenario
dantesco luego de recibir sin esfuerzo
alguno la monstruosa cifra de U.S. $ 1
billón 295.000 en la etapa de mayor bonanza
petrolera, que ha existido en época alguna. Que según cifras aparecidas en un excelente
diagnostico hecho por un grupo de especialistas y técnicos venezolanos, aparecen en la compilación hecha
por Jose Curiel: “Del Pato de Punto Fijo al Pacto de la Habana”. Reflejan lo
que estos malhechores de la Republica le hicieron a los venezolanos, y lo más
doloroso, es que contaron con el contubernio falaz y la cooperación traidora, entre otros
factores, de una llamada oposición, que para lograr sus perversos fines de
ambiciones personales, mercantiles y
partidistas se escudaron
tras un parapeto político
inventado por el régimen, y al que
denominaron LA MUD, C.A, hoy desaparecida como tenía que ser, luego de
haber cumplido con sus macabros y anti
venezolanos objetivos. Allí quedo para
la historia.
En
medio de este caos sin precedentes en nuestra vida republicana, nos encontramos
a la deriva y sin gobierno, quebrados ,
en bancarrota y sin recursos fiscales, con una clase política en el poder que remata lo que queda, sin un
liderazgo opositor creíble y destruida
la infraestructura física del país: Sus
industrias básicas PDVSA y las Industrias de Guayana, lleno de miserias de todo
género, azotados por el crimen
organizado y la impunidad y sin vislumbrarse una salida que haga posible
comenzar a regenerar el país. Esa es la verdadera tragedia de Venezuela. Alea
jacta est
Jose
Eduardo Guzman Perez
guarauno2000@gmail.com
@guzmanperez1
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