BIENVENIDOS AMIGOS PUES OTRA VENEZUELA ES POSIBLE. LUCHEMOS POR LA DEMOCRACIA LIBERAL

LA LIBERTAD, SANCHO, ES UNO DE LOS MÁS PRECIOSOS DONES QUE A LOS HOMBRES DIERON LOS CIELOS; CON ELLA NO PUEDEN IGUALARSE LOS TESOROS QUE ENCIERRAN LA TIERRA Y EL MAR: POR LA LIBERTAD, ASÍ COMO POR LA HONRA, SE PUEDE Y DEBE AVENTURAR LA VIDA. (MIGUEL DE CERVANTES SAAVEDRA) ¡VENEZUELA SOMOS TODOS! NO DEFENDEMOS POSICIONES PARTIDISTAS. ESTAMOS CON LA AUTENTICA UNIDAD DE LA ALTERNATIVA DEMOCRATICA

sábado, 28 de junio de 2014

JESÚS GONZÁLEZ BRICEÑO, RÓMULO Y RAMÓN J. VELÁSQUEZ: DOS ÍCONOS INDISCUTIBLES DE LA DEMOCRÁCIA Y EL CIVILISMO.

Pretender borrar la memoria histórica del país es propio de la barbarie del régimen actual.
Se nos fue  otro de los símbolos  de nuestra esencia histórica  republicana, como  también Rómulo , Leóni, Gonzalo Barrios, Pérez Alfonzo, Uslar, Briceño Irragory, Picón Salas, Andrés  Eloy Y Blanco, Consalvi, Convit... forjadores de la democracia,  la cultura, el civilismo y la ciencia , así como en los albores de la República, José María Vargas, iniciador muy breve del gobierno civilista y antimilitarista , en 1935-36, increpado por  Pedro Carujo a dejar su mandato  “ que es de los valientes”, con lo cual  se inicia una tradición caudillista-militarista en nuestro país que, con excepción de algunas experiencias democráticas, ahora cobija el ejercicio del poder arbitrario , abusivo y castrense desde 1999. 
Por ello es necesario  en el preciso momento de la desaparición física de un gran tachirense, el expresidente VELÁSQUEZ, es pertinente,  rememorar nuestro relevante acervo político, cultural, ideológico y  social  de hombres que dejaron una impronta que actualmente se pretende   borrar echándola  al cesto de la basura para instaurar, mediante la fuerza y el oprobio  de LOS PODERES DEL ESTADO,  la nueva historia del CHAVISMO. En esta ocasión,  junto a la figura descollante de un venezolano cabal y patriota, apenas fallecido, nos toca hacer un paralelismo breve pero incisivo de  otro hombre que luchó sin paz ni sosiego, en  el siglo pasado, contra la tiranía individual y feudal de casi tres décadas   que abatía la  republica,  Don Rómulo Betancourt.
Él, aunque tildado de  golpista en 1945, nos demostró a través de su conducta como ciudadano, intelectual, activista político y gobernante, que el tiempo le ha dado la razón al combatir desde su temprana edad, contra la el totalitarismo personal y caudillista  de J.V. GÓMEZ,   contra el gobierno timorato y la crisis institucional de Medina Angarita, contra la década represiva de PÉREZ JIMÉNEZ,  y, más aún, contra los desmanes y el terrorismo del castrismo y de sus acólitos nacionales del comunismo vernáculo que al tratar de  deponerlo y asesinarlo,  con un odio feroz de sus corazones y de las armas importadas desde Cuba, China y URSS, fueron derrotados en defensa propia. Pero que han  tomado  su revancha con el seudo-pacifismo de Caldera y que hoy  constituye un peligro absoluto para la convivencia civil y democrática de la nación venezolana.
Muy pronto se desmarcó del  izquierdismo radical  marxista del  PRV y asume una doctrina y praxis del socialismo democrático latinoamericano bajo las influencias chilenas y peruanas, y  tras la desaparición de Gómez en el 1935, no se contenta con las migajas reformistas de Lopecismo y Medinismo para  formar su primer del trienio 1945-48, que consolida  mucho más tarde, 1959, con su elección como primer magistrado nacional,  después de haber confrontado la desventura  dictatorial de 1948-1958, dando pruebas fehacientes de su vocación democrática , después de sufrir cárceles, exilio, clandestinidad y atentados contra su propia vida y la de sus compañeros. Las amenazas extremistas del trasnochado militarismo tradicional y de los diversos frentes marxistas-castrista de 1959-64, le  deterioraron su salud mas no su empeño por construir una democracia, dejando que sus sucesores   terminaran de construirla, no sin dejar constancia de que  el caudillismo y militarismo, no debería ser el futuro de  la  institucionalidad constitucional y del estado derecho.
Por primera vez en la historia nacional, Betancourt, entre 1945 y 1964, reivindicó el voto popular de los mayoría analfabeta de cualquier género, incorporando  la clase  popular deprimida a la vida nacional, los CHOLÚOS como decían en el oriente venezolano; un gobierno, probo y pulcro anticorrupción y honesto, el desarrollo de una economía petrolera como pilar del desarrollo nacionalista con la creación de la CVP ( Corporación Venezolana de PETRÓLEO ) y  la OPEP, en 1960; practicando la descentralización urbanística e industrial con la  fundación de Ciudad Guayana; impulsando el desarrollo físico y estructural de los  servicios básicos ( agua, luz, electricidad y telefonía) y el sistema educativo en todos sus niveles y regiones; pero sobre todo trató de fomentar el civilismo, el desarrollo de la comunidad y municipal, y la cultura como medios de redención de la apatía  ciudadana y  del alto índice de analfabetismo, con lo cual le mostró a los venezolanos que  su acción gubernamental y conducta personal fueron productos de la dedicación de toda su vida a una causa llamada VENEZUELA, al conocimiento de su  idiosincrasia y a las realidades internacionales, que  como estadista, excelente orador, y hombre probo y honesto le granjeó la designación de PADRE DE LA DEMOCRÁCIA VENEZOLANA.
El otro, Ramón J Velásquez, fue un factor  coadyuvante por casi un siglo de vida,  como legislador, catedrático de la ULA;  como agente  significativo de la descentralización para que la provincia olvidada despertara de su letargo en todos los órdenes de la cotidianidad y de la participación, presidiendo la COPRE, ( Comisión de Reforma del Estado), promoviendo el pluralismo político e ideológico como forma de convivencia  y tolerancia ciudadanas, en particular se erigió con tesón y dedicación franciscana en el rescate de  la memoria histórica y documental  nacional:   pero lo que más distinguió a esta personaje  fue su facilidad  y comprensión los  momentos traumáticos  decimonónicos del país en que la  barca de la democracia estuvo a punto de naufragar con los ataques terroristas radicales contra la democracia en los gobiernos de Betancourt, en las asonadas militares de 1992, y al momento de  ser designado presidente de la Republica con la destitución aciaga de Carlos  Andrés Pérez, junio de 1993 a febrero de 1994.Así la califico porque nunca se pensó que tras la pacificación calderista de los insurgentes , en su primer y posteriormente en su segundo mandato, se le estaba dando créditos al castrismo y se abría la compuerta al  TOTALITARISMO en  Venezuela.
El breve pero trascendental  gobierno de RAMÓN J, logró atemperar las pasiones desbordadas en los partidos y liderazgos nacionales, en este corto pero traumático lapso que se cernía como una hecatombe nacional, para imponer la paz conciliación entre tirios y troyanos, a sabiendas que  él había sido amigo y fiel acompañante del status desempeñando labores trascendentales.
La vida de RAMÓN J, junto a la de Rómulo, un poco mayor que él, y sus  sucesores... transcurrió en una  conjunción no entreguista y con sus propios criterios de las coyunturas y episodios  de este largo proceso histórico de seis  décadas, pero los unía un fe inquebrantable por la honradez y mesura, la convivencia, el pluralismo político, la libertad de expresión, la administración de  justicia y la alternabilidad del los poderes, en fin del Estado de Derecho consagrado  tanto en  la Constitución de 1961 como la de 1999.
El rescate de nuestros valores institucionales, sociales, políticos, ideológicos, castrenses, artísticos, deportivos y de convivencia dentro del pluralismo, es una misión que debemos iniciar sin pérdida de tiempos para  la supervivencia y reforzamiento de nuestra institucionalidad democrática , ante la avalancha devastadora de un  régimen que pretende  sustituirla con la farsa pasada y actual de un fracasado modelo castrista-militar, con el ejemplo y acción de Rómulo y de Ramón J, que   antes de marcharse de esta vida terrenal logró resumir  la tragedia nacional en estos términos:
“Tenemos que encontrar el camino que nos una a todos los venezolanos, tenemos que construir el camino de la república y el camino de la democracia que realmente dignifique  y engrandezca  al pueblo de Venezuela  ante tantas ideas totalitarias  y desacuerdos  que se presentan en este momento”.( Ramón J. Velásquez, El tachirense  que  permitió  la continuidad democrática, Ana Alejandra Laya, Diario Los Andes, 25/6/2014).
Jesús Rafael González Briceño
jesusrafael768@gmail.com
@jesusgonzalezbr

EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, ACTUALIDAD INTERNACIONAL, OPINIÓN, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, REPUBLICANISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA,ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA,CONTENIDO NOTICIOSO,

No hay comentarios :

Publicar un comentario

Comentario: Firmar con su correo electrónico debajo del texto de su comentario para mantener contacto con usted. Los anónimos no serán aceptados. Serán borrados los comentarios que escondan publicidad spam. Los comentarios que no firmen autoría serán borrados.