El viernes 8 de Marzo es el día mundial de la
mujer, aunque su presencia debemos celebrarla no una vez al año, sino cada día,
cada hora, cada segundo; hoy quiero rescatar desde el sitio más especial de mis
archivos, una notica que le escribí hace 3 anos.
Demasiado grande el paraíso, profundo el
silencio en el Edén, el primer hombre rumiando su soledad; que podía sucederle
a quien había sido creado a la imagen y semejanza de Dios?, no era suficiente
con su gracia?. El diagnóstico del padre fue certero le faltaba compañía, un
complemento a su especie, y ese algo tenía que ser especial, como todo lo
concebido por la divinidad celestial y retirando una costilla del hombre,
esculpió una estrella con forma humana, un ángel sin alas, la primera mujer, a
quien llamo Eva, nombre que en hebreo significa “madre de los vivientes” o
“dadora de vida”, y esa ha sido desde entonces su misión, dar vida que encierra
al amor como instrumento. Dios nos retiró la costilla pero nos dejó los nervios
que nos unen, por eso la mujer es imprescindible, es parte de nosotros mismos,
quererla es una necesidad fisiológica como el comer, porque alimenta el
espíritu, o respirar porque son parte de la
vida misma.
La mujer es expresión de amor y sacrificio,
tolera estoicamente el castigo que le originó comer y dar a su pareja del fruto prohibido, porque sabe que está
cumpliendo de esa forma la orden del creador de
“fructificar, multiplicarse, llenar la tierra y gobernarla”; y aunque lo
haga con dolor fisiológico, el amor acumulado por nueve meses le sirve de
analgésico. Poco a poco esta creando vida, formando sangre de su sangre, y huesos de sus huesos, no olvida que aunque
le digan María, Juana, Mirian o como sea, su verdadero nombre seguirá siendo
Eva, porque nació para ser madre y dar vida. Es el corazón de nuestra
particular Eva el primer sonido que escuchamos,
es el flujo lácteo de sus senos nuestro primer alimento y aunque al
nacer nos corten el cordón y nos separen, seguimos conectados de por vida a
través de sentimientos heredados y formados a la par que nuestro cuerpo. Es
imposible no querer a la mujer que dio la vida.
Entramos a las sendas de la vida y comenzamos
a crecer y a experimentar nuevos sueños
y deseos, pero como hombres al igual que Adán en el paraíso, sentimos la
necesidad de la faltante costilla. Se establece la conexión y miramos las
estrellas en sus femeninos ojos, en su olor y en su presencia se enciende
nuestra máquina hormonal y el sentimiento más bello fluye por su causa. La
orden está escrita en nuestros genes, no podemos ser Adán sin Eva. El bello
complemento, lo cóncavo que le falta a lo convexo llega a nuestra vida sin
pensarlo, es una consecuencia de estar vivo, nacemos sin saberlo como seres
necesarios en pareja; y decimos mi mujer, no porque consideremos ser su dueño,
sino porque son parte de nuestro propio ser, es como decir mi corazón, mi
cerebro. Allí está ese bello ser que una vez me acompañó en el paraíso y que
vino a devolverme mi costilla.
No se puede concebir la vida sin la natural
presencia femenina, son esenciales en cada una de las etapas de la vida, solo
cambian de apariencia y situaciones. Decir madre, hermana, esposa e hija es
decir mujer, es nuestra obligación respetarlas por igual, amarlas por igual,
con sus bemoles por supuesto, todas Evas, mi madre, la madre de mis hijos, la
madre de mis nietos. Lo más hermoso de la creación es la mujer, importante en
lo social, en lo político, en lo económico, nació para dar amor y es nuestra
responsabilidad que lo reciba a cambio. Siempre estará en el camino, en lo
bueno y hasta en lo malo. Por tal razón estoy completamente de acuerdo con el
final de la canción, “No queda otro camino que adorarlas.”
PILDORAS DE TU MEDICO
• Acepto
que hable mal de las mujeres quien pueda olvidarse de haber tenido una madre.
Ugo Foscolo
• La
mujer es el verdadero principio de continuidad de un pueblo, el arca de sus más
preciadas y más profundas tradiciones. Miguel de Unamuno
• La
mujer posee un silencioso lenguaje con su modo de vestir: puede hablar a los
sentidos o al alma de quien la observa. Autor desconocido
• Puede
juzgarse el grado de civilización de un pueblo por la posición social de la
mujer. Domingo Sarmiento
• Sentir,
amar, sufrir y sacrificarse, será siempre el texto de la vida de las mujeres.
Honoré de Baizac
• Una
mujer hermosa agrada a la vista, una mujer buena agrada al corazón; la primera
es una joya, la segunda un tesoro. Napoleón
• Dicen
que el hombre no es hombre mientras no oye su nombre de labios de una mujer.
Antonio Machado
• En
todo momento de mi vida hay una mujer que me lleva de la mano en las tinieblas
de una realidad que las mujeres conocen mejor que los hombres y en las cuales
se orientan mejor con menos luces. Gabriel García Márquez
VACUNA CONTRA EL ESTRÉS
Una señora le dice a su esposo:
- ¡Oye mi amor, cómprame unos zapatos!
Y el señor le responde:
- ¿A cuánto los vendes?
A lo
que la mujer contesta:
- No seas payaso, cómpramelos porque los
necesito mucho.
Y el señor contesta:
- Si los necesitas tanto, ¿para qué me los
vendes?
Aquélla ama de casa tenía tan mal carácter
que ninguna muchacha le duraba. La última que tuvo se marchó indignada no sin
antes decirle a su patrona que se hallaba en la dulce espera:
- Le deseo que nazca bien el varoncito.
- ¿Y cómo sabe que será niño?, pregunta
sorprendida.
- Porque a usted, no hay mujer que la aguante
nueve meses.
Hasta nuestro próximo contacto.
*Medico. Magíster en Salud Pública.
E. mail basantac@cantv.net
www.drcarlosbasanta.es.tlENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA,CONTENIDO NOTICIOSO,
Sr. Basanta, le agradezco tan hermoso reconocimiento a la mujer y los chistes dos buenos ejemplos del lado oscuro de la luna. Gracias nuevamente.
ResponderEliminar