A este gobierno lo deberíamos apodar "el
Challenger", porque tiene pretensiones de ir al espacio, pero no sabemos
cuándo va a explotar en mil pedazos. Mientras observo conmovida el enorme
infierno de Amuay que enluta nuevamente a Venezuela, también leo como en apenas
10 meses han explotado las subestaciones eléctricas de Apure, Aragua,
Anzoátegui, Barinas, Falcón, Guayana, Portuguesa, Miranda, Monagas, Táchira, Trujillo,
Zulia, Caracas y pare usted de contar. No es que explotó una estación
eléctrica, es que están explotando todas. No es que explota un transformador,
es que desde Chacao hasta Guacara lo hacen en efecto dominó. No es solo Amuay,
es que antes fue Cardón, luego El Palito, Petrocedeño y también Jusepín y su
catástrofe natural, sin contar los pozos y taladros que volaron por los aires
en Monagas y Zulia.
Y es que vivimos en Macondo. Porque mientras
el Instituto Tecnológico de Massachussets designa a un ingeniero eléctrico
venezolano como presidente, o la NASA contrata a otro ingeniero eléctrico
venezolano como su jefe de Laboratorio Avanzado de Instrumentación Electrónica,
Venezuela contrata mil millonariamente como experto eléctrico al comandante
cubano Ramiro Valdés (a los curiosos les invito a leer la historia de este
personaje). Lo cumbre es que el presidente haga un llamado a no ser
irresponsables en el manejo de las crisis mientras su gente se escuda en el
"sabotaje" opositor, o nos advierten que "en los planes
desestabilizadores imperialistas estadounidenses el sabotaje eléctrico es una
de las cartas en juego".
Luego, cuando el presidente Chávez se da la
vuelta, los responsables nos informan sobre la verdad. La primera explosión:
"producto de un animal felino que se introdujo por una de las ranuras del
interruptor", en el segundo no fue un Dipsosaurus o un Ctenosauro tejano, (forma científica en la
que los imperialistas llaman a sus especies de iguana) el causante de la
explosión en Anzoátegui, sino una iguana local (llamada científicamente
iguana). Sí bien al segundo gran apagón en Guayana se trató de culpar a una
zarigüeya de Virginia por su extraordinario parecido con el rabipelado local,
pronto fue descartado por su pelaje poco adaptado a la nieve. Y con respecto al
apagón en el sureste de Caracas los investigadores descubrieron que no había
sido un Águila Calva, sino un zamuro local el que causó el nefasto apagón.
Pero aunque esto parezca una broma, no lo es.
En Venezuela está explotando todo y sin vergüenza alguna los responsables
admiten que "Don Gato y su
pandilla" son los culpables en coordinación con los rayos, el viento y el
hurto de cables y transformadores o hasta los turistas que sobrecargan con su
demanda vacacional las modernas estaciones instaladas por Ramiro Valdés. Pero
la cosa amigo lector es como diría Arjona en una de sus canciones, el problema
no es que mientan, el problema es que les creen. Porque al final, los chavistas
(y esto incluye a los altos funcionarios) se creen que todo está explotando
porque la "Liga de la Justicia Animal" está confabulada contra la
revolución.
Basta con que el Presidente lea las
explicaciones de su propia gente que están publicadas, para que tomen cartas en
el asunto contra la mediocridad o se sumen al clamor (incluso de los
comunistas) que exigen una explicación de la fortuna supuestamente invertida.
Pero prefieren culpar a la oposición por explosiones y fallas que pudieron ser
simplemente evitadas con mecanismos preventivos que existen desde hace muchos
años y avalar la mediocridad de los suyos, sin siquiera tomar en cuenta
que la "iguana" causó el
apagón concretamente en la zona del alcalde opositor, mientras que el zamuro
causó otro únicamente en la mayor zona opositora caraqueña y así los supuestos
rayos han caído en la opositora Táchira
o los incendios en la zona opositora del Zulia y si han atacado a tiros alguna
central eléctrica eso ha ocurrido en la también opositora Chacao.
Pero los irresponsables y mediocres (y muchos
corruptos) han aprendido que cayéndole a embustes al Gobierno, se salvan. Y así
explican en los medios el plan desestabilizador imperialista en el que un
marine enviado por la CIA, ayuda a la oposición a adiestrar a la fauna local,
para que se suicide mordiendo cables eléctricos. De esta forma todos los ven en
los restaurantes más caros, con sus whiskeys 18 años en mano riéndose y
vociferando "qué vacilón es esta revolución".
@thayspenalver
tpenalver@me.com
EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA,CONTENIDO NOTICIOSO,
No hay comentarios :
Publicar un comentario
Comentario: Firmar con su correo electrónico debajo del texto de su comentario para mantener contacto con usted. Los anónimos no serán aceptados. Serán borrados los comentarios que escondan publicidad spam. Los comentarios que no firmen autoría serán borrados.