¿Qué sentido tiene seguir entonces derramando la sangre de inocentes venezolanos por un proyecto socialista-comunista fracasado y demencial?
Los
venezolanos tenemos un derecho que no se puede cuestionar y es el de gozar de
una vida tranquila sin la necesidad diaria de administrar bien los miedos, los
temores y la violencia. Debemos adoptar el compromiso y el desafío de impulsar
estrategias novedosas que nos permitan el ejercicio pleno de una Venezuela en
paz y tolerante, en la que podamos salir a caminar por las noches, avanzar y
crecer para tener un país habitable, amistoso y siempre sonriente que nos
permita soñar sin pesadillas.
Iniciamos
este año con una unidad dialogada entre los partidos de la oposición y los
independientes para escoger el candidato único de las primarias, negociada
entre todos los miembros de la Mesa de la Unidad Nacional, donde el dialogo
directo y franco fue el común denominador. Después de algún tiempo de
experiencias fallidas, se encontró el camino de la lógica y del sentido común,
entre varios bandos siempre antagónicos que en esta oportunidad mostraron
madurez y muchas ganas de hacer bien la tarea.
Además, ello
ha permitido una paz política sólida que les ha permitido a los precandidatos
una amplia capacidad para sacar adelante los proyectos e iniciativas que han presentado ante los medios de
comunicación y en sus recorridos por ciudades y pueblos venezolanos con
relativa facilidad.
Sin embargo,
el desempleo, el trabajo digno, la pobreza y la desigualdad, están mostrando
que todavía, estamos lejos de conseguir el equilibrio necesario para tener una
verdadera paz social. Hoy, nos falta la parte más importante para completar la
torta: la solución a la violencia, a la delincuencia y a la corrupción.
No ha habido
una verdadera política anti delictiva y anticorrupción que haga disminuir el
alto costo en víctimas y recursos, ni alcanzado la verdadera paz que se traduce
en el sacrificio diario de las prioridades sociales y nos ubica en los últimos
lugares de los países violentos en el mundo, donde la cultura de la muerte y de
la insensibilidad nos estigmatizan como “un país de violencia y de alta
inflación”.
¡Pero pienso
amigos lectores, que es tiempo de cambiar! Después de trece años de gobierno donde resaltan los
asesinatos y la violencia, ya estamos saturados de la sangre derramada en
nuestros pueblos y ciudades en una violencia absurda, inútil y sin sentido
donde la delincuencia está masacrando y destruyendo al pueblo. Estos
politiqueros rojos-rojitos, vendedores de ilusiones y fantasías solo dejan como
saldo un mensaje de frustración enorme cargado de pobreza y de miseria.
Todos
tenemos el compromiso de aportar más que granos de arena para acabar con esta
lluvia de balas, cerrando heridas y sepultando rencores. ¡No es una misión imposible!
¡Ya basta, no más violencia! Llegó el momento de coleccionar esfuerzos en la
búsqueda de una paz duradera, digna y civilizada.
Nuestros
hijos, nuestros nietos y las nuevas generaciones exigen de nosotros la
oportunidad de vivir en paz, en un Estado de Derecho lleno de esperanzas y en
una sociedad democrática libre de violencia, delincuencia y corrupción ¡La
prioridad es la paz y la unidad es la salida!
Deberíamos
hacer el ejercicio de visualización creativa
¿cómo sería vivir en nuestro país en paz, libre de tristezas y
reconciliado con el optimismo?. Estoy
segura que sería un sueño maravilloso y reparador. ¡El momento de ser feliz, es
ahora! El país necesita concentrarse en lograr que el buen manejo y crecimiento
de nuestra economía se refleje en la reducción de los índices de pobreza,
miseria, desempleo y desigualdad y no solo en defenderse de las supuestas
amenazas del imperio yanqui.
Los
insurgentes saben muy bien que la democracia, con sus virtudes y defectos,
termina por imponerse. Esperamos de los violentos un “adiós a las armas y a la
intimidación”. ¿Qué sentido tiene seguir entonces derramando la sangre de
inocentes venezolanos por un proyecto socialista-comunista fracasado y
demencial? ¿Cree usted que eso vale la pena?
EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA