Hace unos días, una persona muy querida,
replicaba a mis comentarios acerca de nuestro compromiso en esta hora menguada,
que mis responsabilidades no eran las mismas que las suyas, yo no tenía jefe,
ni hijos que tuviera que cuidar.
Afirmación que creo necesaria contestar
porque a todos nos toca, de una u otra forma.
Los que me conocen saben de mi gusto por
viajar, una playa, un invento. Saben que me gusta un Restaurant o disfrutar
frente a una copa la reparación de la humanidad o simplemente la contemplación
de momentos pasados y la aventura que representaran los momentos futuros.
Disfruto de mis amigos, ver a la familia en
Valencia y disfrutar de mis sobrinas y sobrinos cada vez que puedo.
Saben que me encanta un dominó con una cuba
libre o un domingo recostado simplemente viendo televisión.
Quien me conoce sabe que siempre he
manifestado mi posición, como ciudadano responsable, conocedor de mis deberes y
de mis derechos.
He firmado y reafirmado, votado, me han
disparado, amenazado, gaseado, escapado, corrido, enlistado, escondido y
marchado por lo que creo.
He manifestado en persona a individuales,
grupos, opositores, chavistas, maduristas, mis opiniones cuando me las han
solicitado. De igual forma las he twitteado, bloggeado, instagrameado,
whatsappeado, messengeado y SMSeado.
Marché el 12 de Febrero del 2014 con la
Juventud Venezolana y una vez más nos atacaron… como muchas veces me han
escuchado decir, no me lo contaron… Ivin y yo estuvimos ahí.
Desde ese preciso momento, hemos acompañado
al movimiento que ha nacido cuando nuestra realidad se ha quebrado.
En realidad nunca he esperado que hagas algo,
los seres humanos son como son y faltan muchísimas generaciones para
cambiarnos.
Sin Ovejas no existirían Pastores, ni pastores sin lobos y no todo
el mundo es capaz de actuar por iniciativa propia. No a todos les gusta pensar,
de ahí el éxito de la publicidad y la propaganda, es fácil manejar pensamientos
enlatados.
Ni todos pueden ser líderes, ni todos
empleados. No todos saben administrar y muchos ni siquiera lo saben hacer en su
hogar.
Si a alguien le suena grosero mi comentario
lo lamento en el corazón, porque no es mi intención, tan solo hago uso a mi
derecho de manifestar mis sentimientos y pensamientos, en mi muro, de mi
Facebook al cual puedes acceder porque yo te he dado el permiso de hacerlo y te
he dado la libertad de que comentes lo que tú quieras, porque considero que es
tu derecho sagrado.
Mi lucha no es por un cargo, porque desde mi
primer trabajo formal, a principio de los 80, los únicos que me ayudaron en los
malos momentos fueron mis padres y mis suegros, nunca dependí del estado porque
ni el Paro forzoso me pagó cuando lo necesité y solicité.
Es verdad, no tengo jefe, y no lo tengo
porque cansado de buscar trabajo, decidí reinventarme y cual Fenix surgí de mis
cenizas, lamentos y miserias, para crear mi propia empresa, la cual hoy día
mantiene a más de uno. Y curiosamente, no tengo hijos pero los hijos de mis
empleados dependen de mí.
Mi lucha es porque mis sobrinas y sobrinos nunca tengan que pelear mis peleas. Porque crezcan bien nutridas, felices y bien educadas. Para que su pensamiento e ideas nunca se vean limitados y puedan hacer realidad sus sueños más descabellados.
Mi lucha es porque mis padres puedan descansar, disfrutar los muchos o pocos años de vida que le queden en forma digna, pudiendo elegir, disfrutar y vivir lo que tanto han trabajado.
Mi lucha es por una Venezuela sin colas, de buenos servicios cuyas calles tengan más flores y menos balas.
Mi lucha es porque pueda volver a disfrutar un fin de semana y la cola sea esperando la lancha en Tucacas en lugar de pasarla frente a un supermercado para comprar papel toilette, leche, café o harina.
Mi lucha es para caminar a las 8 de la noche por cualquier calle de mi país, de la mano con mi esposa y llegar vivo a mi casa. Me encantaría tener la ventana del carro abierta en la cola, salir del cine en la noche y no huir asustado a ocultarme en mi casa.
Mi lucha es por protestar contra el recalentamiento global y no por comida, trancar la panamericana para proteger a las perezas y no porque matan impunemente a una mujer embarazada. En otras palabras ansío el día en que tenga tiempo de protestar por pendejadas.
Mi lucha es porque me pueda atender un hospital y no tenga esta desesperación tan grande cada vez que me llegue la prima de la póliza de HCM
Mi lucha es por mi manía de leer, ver, escuchar lo que quiera y no lo que otros consideren que debo leer, ver y escuchar.Mi lucha no es por ti, es para ti y para los que amo, inclusive los que aún no sé que amo porque no les conozco.
Los que luchamos, ya no te pedimos que
luches, simplemente no estorbes, no luchamos por parcelas, porque lo que
ganemos lo ganaremos para todos.
Tú sigue con TUS RESPONSABILIDADES.
Porque si no vuelve a saber de mí, es porque
me fui detrás de una RESPONSABILIDAD mayor a las mías, me fui detrás de
VENEZUELA…
Reinaldo
Poleo
rpoleo@gmail.com
@rpoleo
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