La AFIP cerró las puertas del corralito
cambiario. No hay dólares para particulares ni empresas. Del control de cambios
se pasó al control de la conducta de los ciudadanos. Si alguien no lo entiende
ponga en el traductor de Google: Traducir del K al Español y le saldrá en la
traducción: "profundización del modelo".
Hasta el viernes pasado, el organismo de
recaudación venía aflojando con sus severas restricciones. Pero,
imprevistamente, el jueves estableció un nuevo cerrojo y casi todos los pedidos
de autorización de compra de monedas fueron rechazados. "Debe haber un
error", dijo un medianamente conocido kirchnerista de la segunda hora y
pulsó frenético su celular, su rostro fue ensombreciéndose a medida que
escuchaba la mala noticia de parte – se supone – de alguno de la primera hora a
quien sí le habían avisado. "Es algo pasajero", dijo con una mueca
que nunca llegó a sonrisa y quienes lo conocen se sobresaltaron aún más, porque
eso quería decir que no era "algo pasajero" y que un horizonte de
nubarrones se acerca.
Hay quienes sin ser del palo, por una razón u
otra, disponen de información calificada. Hay, también, zorros viejos que casi
no precisan información, lo intuyen, lo huelen, lo ven venir. Esos, como
siempre, zafaron. Tomando café vieron como colegas más jóvenes, más crédulos,
más tiernos, o parte del 54% pero sin acceso a alertas tempranas como el antes
mencionado, estrellaban sus "ñatas contra el blindex".
Es que el martes, había comenzado a notarse
un recrudecimiento en las restricciones a la compra de moneda extranjera en
bancos y casas de cambio. El "blue" comenzó a subir hasta tocar los 5
pesos. "Give me five", dijo por lo bajo un operador. Pero luego los
pasó hasta 5,11. El blue, para el lector neófito, no es sino el dólar paralelo,
que unos imaginarían negro por pertenecer al mercado de ese color, pero ahora
todo cambia, se eufemiza, y al igual que los court de tennis madrileños, el
dólar paralelo se ha vuelto azul.
Pero eso no fue todo: en forma paralela –
igual que el mercado – se pudo ver una invasión de inspectores de la AFIP, que
con su presencia disuasoria trataban de restringir las operaciones en ese
mercado.
La cuestión no era algo que sólo afectara las
áreas financiera o empresarial, también sueldos top en blanco, que antes del miércoles
contaban con una autorización para comprar hasta u$s16.000, habían bajado a
apenas u$s1.000.
Son las necesidades de divisas del sector
público las que desplazan poco a poco a los requerimientos privados poniendo al
mercado cambiario en una encrucijada. La presión por hacerse de dólares sigue
creciendo a diario, pero los controles son muy fuertes y cada vez hay menos
posibilidades de conseguirlos en la plaza oficial.
Hay quienes tienen visiones distintas de esta
opereta financiera. Unos creen que el gobierno ha encontrado una forma de
controlar el blue y la salida de divisas del país; en cambio para otros todo es
producto de un temor profundo por una inestabilidad que no se sabe cómo
controlar. Por otra parte no se entiende cómo, si se sabía que se iban a
necesitar divisas, se lanzó la operación YPF sabiendo que provocaría lo que
provocó, una suba inmediata del dólar.
Un dólar, paralelo o blue, como más le guste,
parece haber encontrado su nivel momentáneo a $5,10. Quienes necesiten comprar
dólares y tengan con qué, deberán estar pendientes de una nueva apertura que
los autorice y hacerlo inmediatamente. Otra vez más parece que los argentinos
deberemos estar a la espera de que el buen humor oficial nos abra la puerta
para ir a jugar.
Es increíble cómo, poco a poco, las fronteras
se volatilizan y estamos cada vez más cerca de Venezuela.
http://www.diariocastellanos.net/1417-Venezuela-alla-vamos%c2%85.note.aspx
editorial@diariocastellanos.net
EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA
No hay comentarios :
Publicar un comentario
Comentario: Firmar con su correo electrónico debajo del texto de su comentario para mantener contacto con usted. Los anónimos no serán aceptados. Serán borrados los comentarios que escondan publicidad spam. Los comentarios que no firmen autoría serán borrados.