UN NUEVO PARADIGMA DE DIPUTADO, UTOPÍAS Y LÓGICAS, JUAN DE DIOS RIVAS.

Si los líderes –políticos, diputados, magistrados, autoridades civiles, militares, religiosos, gremiales, empresariales y sociales– en Venezuela no asumimos una total coherencia con lo que pensamos, decimos y hacemos, jamás seremos los pedagogos fundamentales del país y buenos ejemplos a seguir para el pueblo; la coherencia es una de las condiciones indispensable para quienes dirigen o aspiran gobernar a Venezuela.

Hay una crisis moral y ética en el actuar publico,

administrativo, educativo, empresarial, social (comunal, condominios y vecinal) y sindical, de los lideres mas visibles del país. Las razones son muchas y ha sido un proceso de desviaciones morales y éticas; acentuado en las décadas de los 80´s y 90´s, y con notorio desborde y derrape en los últimos 12 años; lo que más nota la gente, es que los máximos dirigentes son persistentes en malos ejemplos, son groseros, ofensivos, mentirosos y cómplices o coautores de corruptelas e ineficacias. La necesidad de tener moral y ética, con apego a valores humanistas o cristianos básicos, es fundamental, para salvar a Venezuela y enrrumbar bien el Estado y la Nación, al cual aspiramos como paradigma del deber ser.

Para superar la crisis moral en la cual estamos naufragando…y que es la impulsora de las demás crisis…, se necesita voluntad política y moral, para que haya obligación y responsabilidad en el comportamiento y con el compromiso asumido de implantar un perfil moral y ético en todo el actuar Republicano; al igual que en el desempeño de cargos de representación popular; los representantes del pueblo no están ahí para servirse, deben estar para servir al bien común y al pueblo. Hoy más que ayer (lo cual es censurable) los políticos, los líderes comunales, gremiales, religiosos y empresariales que actúan en el entorno del gobierno rojito, se dedican más a negociados, tracalerías y corrupciones, que hacer el bien, servir y actuar con honestidad, y desgraciadamente también hay “líderes opositores que caen en tentaciones y desviaciones éticas”; el funcionario público que está más pendiente de servirse o servir al mejor negociador o corruptor, es una persona indigna y traidor (pecador) a los preceptos cristianos. Todo corrupto es enemigo del pueblo, y al apropiarse del dinero de los ciudadanos, le está haciendo al futuro de “todo” un daño y un perjuicio, que afecta nuestra calidad de vida.

Los humanistas cristianos por convicción y práctica, estamos convencidos de que la política es para servir y trabajar por el bien común y la justicia social. La oportunidad que hoy tenemos “por ser candidato a diputado unitario por Caracas en la lista”, nos permite utilizar la campaña para concientizar sobre aspectos fundamentales, que posibiliten un mejor servir a la gente y darle cabida a la representación popular de calidad y al mismo tiempo construir paradigmas nuevos. Lo primero “para mí” es que un diputado tiene que ser ‘útil’ al ciudadano y sus electores, y para ser útil debemos (se debe) atender, dedicarse permanentemente y actuar sobre la base de:

1) Promover leyes que ‘mejoren la calidad de vida del venezolano’, cuyas leyes deben estar en sintonía con lo que piensa y quiere la gente;

2) Asumir un nuevo “estilo, modo y organización para representar a los ciudadanos que no militan en partidos políticos” que permita al (los) diputado (s) de la Asamblea Nacional estar en contacto directo y diario con sus electores y ciudadanos de su circunscripción electoral; lo cual implica, se ocupen directa e indirectamente en atender, tramitar y resolver los pedimentos, necesidades y problemática que tengan los ciudadanos y sus comunidades. Debiendo también ocuparse de las actividades y funciones de la Asamblea Nacional ‘AN’; el diputado también debe cumplir cabalmente con su obligación y hacer rendición de cuentas transparentes a sus electores y ciudadanos: como le hizo seguimiento a los poderes públicos, en cuantas investigaciones a la administración pública participo; cuantos casos atendió y resolvió, de ciudadanos que requirieron su servicio publico. Para hacer viable este compromiso y vigilar lo mejor posible, estamos impulsando la integración voluntaria de una RED DE DIPUTADOS CIUDADANOS, quienes serán investidos de representatividad “delegada por el diputado de la Asamblea Nacional”, con el fin de que se avoquen y se conviertan en veedores, contralores y proponentes –preparar- de leyes de interés social y a gestionar las soluciones de los problemas de sus comunidades. Los ciudadanos que quieran integrar esta RED DE DIPUTADOS CIUDADANOS lo podrán hacer por el correo diputadosciudadanosunidad@gmail.com;

3) Ser como Diputado un contralor político y social responsable; atendiendo a la RED DE DIPUTADOS CIUDADANOS, y estimulando en ellos su actuar con métodos trasparentes, apegados al pluralismo social y político, para lo cual deberemos entrenar a los Diputados Ciudadanos para ser aptos y cabales en el cumplimiento de tan noble y vital cometido social.

4) Asumir el programa legislativo de la Unidad Democrática, como referencia y prioridad de acción y presentar tres proyectos de leyes “Ley de Calidad de Vida; Ley de Seguridad Social Integral; Ley de Carrera y Servicio Público”.

Hemos preparado un conjunto de planes y proyectos para apuntalar y desarrollar la RED DE DIPUTADOS CIUDADANOS con el fin de acabar, erradicar y evitar que los representantes del pueblo (diputados) vayan a los cargos sólo a servirse ellos mismos o servir a intereses distintos a los que se comprometieron. Y así construir un nuevo Paradigma de Diputado.

rvjuandedios@gmail.com

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