SUSANA MORFFE, APUNTAR A LA PAZ DEBILITA LA GUERRA, ENTRE CIELO Y TIERRA

Nos roban el petróleo, pero la vida no. Así debe ser la perspectiva del venezolano que está luchando en la calle por libertad, rechazando la opresión y el asesinato por parte de entrenados perros de guerra, a los que no les duele ni los estudiantes, ni las mujeres y mucho menos nuestra patria.

La paz es una condición de pueblos sanos y con dominio de sus derechos. Venezuela no ha sido propulsora de guerras civiles porque en medio de las situaciones que ha debido enfrentar a lo largo de su historia democrática, se ha impuesto la razón antes que la pasión. La vida como la paz son valores que no podemos abandonar, menos en estos momentos de tanta presión política colectiva cuando las protestas se han extendido en el mundo.

Si esta gente del régimen es tan bolivariana como han predicado, es urgentemente necesario recordar que en época de Simón Bolívar el pueblo estaba hundido en la ignorancia y diferencias sociales; sin embargo, Bolívar creía fuertemente en el sistema democrático pero dejando atrás la esclavitud y la dependencia, y luchando por la estabilidad política. “En la unión está la fuerza”, era su norte. Pues ahora urge levantar la bandera de la paz para lograr el ideal bolivariano de la unión y en férrea defensa de la libertad, sin guerra ni muertes.

Venezuela en este siglo ha perdido frágiles vidas humanas como el caso de jóvenes mujeres, Geraldine y antes Génesis, pero así como ellas otros estudiantes y dirigentes maltratados, violados, heridos y condenados al cautiverio. Alguien debe detener esta barbarie que va tomando dimensiones  de masacre. En ningún país arremeten contra los estudiantes, solo con dictadores.

Es hora de levantar la bandera de la paz y deponer la ambición de poder que nos ha llevado a esta lamentable situación. Debe imponerse la soberanía, somos los venezolanos los que debemos buscar nuestro camino, sin intervención maligna de otros países por apropiarse de nuestros recursos y sin que les duela la sangre que corre por nuestras venas. Hay muchas familias devastadas por el dolor de la sangre derramada y la violación de nuestros derechos.

Necesitamos valor y  fuerza para superar los  obstáculos y llegar a la meta que debilita la guerra con la paz para encontrar el camino de la libertad.

Susana Morffe

@susanamorffe

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