Al
Padre R. Carias, SJ.
Mi
excelente amigo, impecable maestro, el Padre
Rafael Carias, sacerdote
impoluto, dedicado el tiempo, más de la cuenta, a estudiar al venezolano, quizá
con tanto amor como el que dedicaba a la
germanística, del primer esfuerzo quedó
una bella obra, “quienes somos los venezolanos”
y muchos textos `sueltos` sobre el mismo tema. La revista SIC recogió
muchos de ellos. De la germanística, su
dominio excelso del alemán fue un gran
placer y para jamás olvidar, nuca
perderlo, leía a diario la Luther Bible,
y el Fausto de Goethe y cuando sobraba
de su tiempo, Kafka, Hoelderling, Schiller, especie de sus amigos íntimos. Le vi sonreír también cuando leía el debate
de Erasmo con Luther sobre La Reforma; indagaba la revista Der Spiegel y
para lo cotidianidad, solía ojear a Das Bild, diario sui géneris, cerca de lo
sexo pornógrafo. Sacerdote conocedor de
lo sacro y lo mundano, párroco de la iglesia donde bautizaron a Bolívar, y mas
y más era, jesuita, no se si todo el
tiempo. Como todo jesuita era
muy estudioso, como sacerdote
amigo del común y si bien no toleraba
los pecados capitales sabía comprender a
cabalidad al pecador, sin importar el tipo o naturaleza de sus actos veniales o
satánicos. Vivió largo tiempo con un cáncer, pero, jamás éste pudo quitarle su sonrisa
donde sin masoquismo pero con mucha fe, escondía su dolor que solo él, en silencio vivía; sabio, jamás quiso dar
lástima y menos jugaba a dar consejos,
solo el debate era su privilegio de consenso.
Sabía, por confesión, de la pérdida de voluntad del aconsejado, del
dominio absoluto del consejero sobre su víctima
y podía dar testimonios de cómo
el consejero cobraba en especies, si su aconsejada era una dama, mediante
relaciones dionisiacas, nunca apolíneas y, en todos los casos, precisaba el teólogo, el consejero se solaza en su sadismo
por controlar la voluntad de su aconsejado. Me honró con revisar mis
atrevimientos en dos de mis tres cuentos en alemán, De Prediger, (tema este común en la cultura
alemana) Die Beide Ann, traducidos ya al castellano y editado el
primero en El Republicano Liberal y el
segundo en Analítica y en Haifa, por el
poeta José Pivin.
Pues bien, para el padre Carías, aquí
suceden cosas que en otras partes no
ocurren. En ello hallaba un modo de ser único. Admitía
que no estaba seguro de quien dibujó estas sentencias, pero se que muchas bien pudieron ser suyas. Anotaba, en Venezuela, los socialdemócratas son de derecha, los
jesuitas son revolucionarios, se bebe
mas pepsi que coca y los
militares para llenar sus vacío, sus fracasos, sus carencias de actos heroicos,
secuestraron e hicieron suya sin
soltarla, la declaración de la independencia, el mas civil de todos nuestros
actos políticos. Llamamos revolución a todo aquello que destruye, pedimos y
echamos la bendición y en el confesonario se miente más que fuera de él, como si engañando al confesor se engañara
a Dios. Y, observaba que en esto no somos tan originales, pero aquí se magnifica el hecho. Como un gran
mérito se asume que político que no robe
es deshonesto. Funcionario del gobierno que no sea corrupto no es eficiente y
carece de méritos para su reelección. Y
seguía verificando con sus trabajos de campo o en el confesionario, comentaba
siempre, prueba en manos, que la estadísticas
del gobierno son las mas fiables porque sus mentiras son verdaderas.
Como quien dice ni una sola de sus
mentiras es falsa. Y ni una sola verdad
es veredera.
No llegó el padre Carías a seguir
cotejando tales hechos, pero siempre reiteró su fe en lo que llamaba lo universal del venezolano,
que en medio de tanta obscurona se
erguían voces de venezolanos que no sólo
se zafan de eso, sino que su palabra y obra pertenecen al mundo.
Son venezolanos que lucharon y quienes luchan por zafarse de esta terrible verdad, que lo han logrado y,
satisfecho, nos cubría de ejemplos. Bello, Bolívar, Vargas, sus músicos, sus pintores, sus poetas excelsos, y jamás dejó fuera a nuestros productores,
sine nomine de la ciudad y el campo sobre
cuyos hombros descansa la dignidad y
producción de Venezuela.
Son
los venezolanos buenos, superiores, para
quienes el poder no fue su meta, en cambio su gloria está en la verdad de la
palabra, en la moral, en sus hechos como entrega por la libertad y, en dos
palabras, son su modo se de ser y hacer ética.
Y, ponderaba siempre la sin par
capacidad de entrega en la solidaridad con el otro venido de fuera, sin
importar si su nombre correspondía a su
identidad, bastaba su presencia y ya!,
la puerta de su casa estaba abierta y sin otra pregunta se tendía
la mesa.
Carías
no pudo rastrear lo que vendría, tal vez
dispuso Dios que no se asqueara de lo que a sus ojos llegaría, lo nunca antes conocido en esas tierras, que
hubiese un régimen tal que convirtiera en virtudes su vileza, que abjurara de la verdad y convierta la mentira en su refugio, que el
odio sustituyera el amor, la traición a la amistad, haber hecho de la corrupción su modo de
gobernar, de la miseria su modo de ser,
de la calumnia el modo de
existir. Del miedo, la forma de
integrar a la sociedad con el terrorismo de estado como su modo de
ser, perpetrarse, delinquir… para
perpetuarse.
Carias
habría creado alguna fina sentencia para resumir esto que hoy nos pasa. Pero
no alcanzó a ver ni predecir,
quizá por vez primera, la manera muy
original que un importante grupo de venezolanos descubrió que para ganarle al
gobierno, para superar al régimen, para
lograr La Salida, lo `primero` que tiene
que hacerse es extinguirse a los otros
opositores al régimen que no obedecieran sus mandatos, que no se inclinen a sus
disposiciones. Dicho de manera más
simple y quizá más visible, asumen como
su credo que para que haya mas vírgenes hay que multiplicar la prostitución,
para que haya más amor, multiplicar el odio, para encontrar la verdad,
falsearla, para unir, dividir. Para
derrotar al enemigo, exterminar a
quienes lo adversan o quieran salir de él si no están bajo su imperio.
Aquí,
pues, la irracionalidad tiene su propia lógica.
(Tal vez esta afirmación sea única también, la lógica es la
irracionalidad, la ética es inmoralidad).
Hace algún tiempo en macabra ironía, escuché de un chavista genuino que
para crear el hombre socialista, nuevo, había que exterminar al antecesor. (Giordani, el bueno)
Que para hacer florecer la economía, hay que controlar precios, mantener el control de cambio, porque en ello
estaba la seguridad financiera del
proceso, evitando así que los ricos se roben las divisas y así garantizar el
poder de la revolución, lo que es el
primer deber, superior, de todo
revolucionario (Aristóbulo) y, en esa línea,
me explicaba mi amigo chavista
que la mejor forma de acabar con
la violencia es multiplicarla, pues,
no tendiendo mas a quien asesinar, robar, estafar… entonces no habrá nunca mas
delitos ni crímenes. Concluía, pobre no roba a pobre y no se puede
robar a quien no tiene.
Dentro
de esta maravilla descrita a pinceladas se inscribe el MID. María Corina, Leopoldo, Antonio, (Mari, Leo, Toño mas coloquialmente)
descubrieron que si defenestraban a Ramón Guillermo Aveledo, y descuartizaban,
desguañangaban y hacían añicos y exterminaban a la MUD, todo estará resuelto. El pueblo los aclamará, los muertos
resucitaran para seguirlos, los que queden vivos de la MUD se arrodillarán ante
ellos y los adorarán y del Congreso
Ciudadano saldrá ese Napoleón, uno mejor que este, que coronado,
restaurará la república, y así como el
Corzo aquel destruyó las posibilidades de la
revolución, se coronó emperador y siguió…
Pero,
siempre hay un pero. A Napoleón se le
olvidó un detalle sencillo, desconocer,
dada su egolatría, la soberbia
inglesa. Se entregó a ellos y lo
enviaron a Santa Elena. Aquí también tenemos nuestra santa Elena, la de Uairén y no
está tan lejos como la isla aquella. Empero, Napo coloquial, se quedó Napoleón
en el prologo a El Príncipe.
El primer asalto del MID es su
logo, sustituyeron la U de la MUD y
asunto listo. Si se quita el nombre se
mata al portador, así piensan como los
nominalistas y realistas de la Edad Media, solo que sin reflexión. Pero, su lógica es maravillosa. Su movimiento de integración, además de partir de la
desintegración, del desgajamiento de la MUD,
de volverla añicos, de secuestrarle su identidad, en ello está su primer triunfo en su heroica batalla,
porque piensan como los sanitaristas sin teoría médica, si se mata al perro se acaba la rabia. Piense
como elector que a usted le tocasen dos tarjetones, MUD – MID, cuanta pureza democrática. Cuanta moral
política. Cuanta hidalguía ejemplar de contraejemplo.
Pero hay algo mas especial
de esta opera magna Mari, Leo, Toño, devienen en nuestros tres mosqueteros, pero
por nuestro modo ser venezolano, sacamos a un mosquetero e incorporamos a una
mosquetera, muy bella por demás, émula de Ana María Campos y de Juana de
Arco, tal su temple, talante,
valor. La tragedia de sus émulas no es
el destino de Mari, para ella anhelo glorias en el disfrute de la cosecha de
sus siembra. Y en el camino de ese ser como somos, D’Artagnan es sustituido por
N’ Maduro, en adelante Nicodan.
¿Qué parece imposible? ¿Qué esta
afirmación, es parte de la tradicional
difamación? ¿De ese modo feo, asaz perverso de esa parte del ser
venezolano? Toca a cada lector su verificación.
Pero asomémonos al juego. Durante años se buscó producir un acuerdo político
que, Constitución en mano, superara el
modo de gobernar del chavismo, cuyas
características dominantes son la
imposición del terrorismo de estado, para provocar miedo, luego abulia, finalmente ataraxia a
los venezolanos, el apartheid fue una de sus formas, lista Tascón, asalto a PDVSA, la empresa y
propiedad privada, etc. y en el plano
legal la arbitrariedad, el autoritarismo, la destrucción de los poderes. Ese
acuerdo político, ese esfuerzo tuvo sus primeros resultados.
La candidatura de Rosales, abrió
un camino que concluye en la candidatura de
Capriles y en su importantísima decisión de ser el candidato contra Dios-Chávez,
Maduro- médium y todos los medios
del poder del estado y del gobierno para imponer su triunfo.
Hubo
en ello un avance pero un error de principios, de fundamentos: no se tuvo
capacidad de articular un discurso mediamente teórico que hiciera crecer la consciencia social, más allá de
restablecer la formalidad democrática.
El documento de la MUD para
resolver los problemas sustantivos del país, en la campaña Capriles, bueno, excelente, pero se echó al olvido,
digo mejor, nunca fue el tema de la sociedad toda. Las derrotas sufridas, desde
luego, provocaron severas frustraciones, despechos, abandonos…pero quedó el
país divido en bloques más o menos de la misma dimensión.
Pero, en todo ese tiempo, vivo Chávez o
reencarnado mediante su pajarito en el
cuerpo de Maduro, todo el empeño del gobierno, psuv, etc.…fue y es aniquilar a
Capriles, destruir a la MUD. Mezquino es
desconocer que ese empeño no sigue ni
cesa. Pero, Chávez no lo logró, Maduro no ha podido, Jagua el medio canciller
y medio gobernador a la fuerza de
Miranda no ha podido, en enfrentamiento a Ledesma es light… Pero, llegó
el milagro de lo absurdo, Toño, Mari, Leo y Nicodan
provocaron y, tal vez lo lograron, lo
que Chávez no pudo, lo que Maduro
no pudo, lo que el terrorismo de estado aun no
ha podido, destrozar la
posibilidad de superar al régimen. Salir
de él, y ello es mas que salir de Chávez- dios, Maduro- médium.
Y lo hicieron sin mas: ni una idea, ni
un concepto, ni una ilusión que una,
sino una praxis para eso que llamo CAP el auto-suicidio. Porque el suicidio de
la división quedaba muy pequeño.
Una nota es prudente. No me une a
Capriles, ni a la MUD nada más que mi discurso crítico. Seis cartas públicas hice a RGA para que la MESA permitiera que todos llevásemos “comida” y no
comer de ella y en ella pudiera comer
toda Venezuela, y ello se lograría, si y
solo si superábamos las aberraciones de la democracia, a saber, convertirla en
mito, en absoluto, hacer del voto la única arma para “comerla”, hacer de la exclusión y la ausencia de crítica, de
arte y ciencia su modo de existir.
Una
vez conversé con Capriles, una, le advertí, “si gana y quiere superar la crisis
de la universidad, por misericordia no
dé a los rectores ni ex-rectores de esas instituciones las riendas para
transformarla. Ellos son los primeros responsables de su destrucción. De su
“auto-suicidio”, solo que ellos, en su
mayoría, devinieron en inmortales”.
Americo
Dario Gollo Chávez
americod@gmail.com
@americogollo
EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, ACTUALIDAD INTERNACIONAL, OPINIÓN, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, REPUBLICANISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA,ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA,CONTENIDO NOTICIOSO,