*LA SOCIEDAD DEMOCRÁTICA VENEZOLANA SOLICITA LA RENUNCIA DEL ACTUAL MANDATARIO DE NUESTRO PAÍS
Ante la permisiva actitud de nuestros actuales gobernantes para la acción en Venezuela de los grupos narco-terroristas colombianos y ante la planificada invasión de cubanos castristas en la administración de cuanta dependencia publica existe en nuestro país, no nos queda a los venezolanos sino establecer la más definitiva protesta ante tales y condenables hechos.
Se suma a esos sucesos la circunstancia de diversas facciones extranjeras de marcada tendencia radical y fundamentalista dedicadas al usufructo de nuestras riquezas naturales tales como el oro, el uranio y el petróleo. Riquezas que nos pertenece a todos los venezolanos y que estamos muy lejos de disfrutar ante la inmoral e incontenible entrega e ineficiencia administrativa del actual gobierno.
Ante la permisiva actitud de nuestros actuales gobernantes para la acción en Venezuela de los grupos narco-terroristas colombianos y ante la planificada invasión de cubanos castristas en la administración de cuanta dependencia publica existe en nuestro país, no nos queda a los venezolanos sino establecer la más definitiva protesta ante tales y condenables hechos.
Se suma a esos sucesos la circunstancia de diversas facciones extranjeras de marcada tendencia radical y fundamentalista dedicadas al usufructo de nuestras riquezas naturales tales como el oro, el uranio y el petróleo. Riquezas que nos pertenece a todos los venezolanos y que estamos muy lejos de disfrutar ante la inmoral e incontenible entrega e ineficiencia administrativa del actual gobierno.
A estos dos señalamientos se agrega una insostenible improductividad nacional que nos tiene al borde de una colapso de desabastecimiento, producto de la inconveniente política gubernamental de expropiaciones de industrias manufactureras y empresas agroindustriales que son entregadas irresponsablemente a quienes no tienen ningún conocimiento ni experiencia real para manejar productivamente dichas actividades lo que ha traído como consecuencia una insostenible economía de puertos atendida incipientemente por una política cambiaria manejada a capricho y dedo de quien tiene la responsabilidad de suministrar las divisas para la necesaria importación de bienes de consumo, materias primas y equipos industriales bajo la pretendida definición de una falsa soberanía alimentaria ha fomentado el desarrollo de la agroindustria extranjera en detrimento del pueblo venezolano, así como ha creado leyes con contra productores nacionales cediendo dichos espacios a extranjeros provenientes de países considerados terroristas por el conjunto de naciones democráticas y de derecho.
Por otra parte estamos ante una política económica que nos sitúa con las mas alta inflación de América Latina, signada por el despilfarro de los dineros públicos otorgados sin autorización legitima alguna a socios internos y externos para garantizar apoyos tarifados tanto en el ámbito nacional como internacional, cuando nuestro país ha recibido las mas monstruosa cantidad de divisas con motivo del alza de los precios del petróleo en una industria petrolera que no asume los roles que le corresponden a otras instancias nacionales y que la obliga a la insolvencia con sus compromisos internacionales y a una política de trueque producto de la incapacidad administrativa de quienes nos desgobiernan que, pese a los ingentes recursos percibidos, tiene que recurrir a la banca internacional para cubrir los déficits que se presentan en caso todos los rubros de las finanzas públicas. Todo ello en presencia de un gasto burocrático perverso que muchas veces se detiene en las alcabalas de los intermediarios lo que nos permite calificar a la actual administración como la más corrupta que ha existido en Venezuela.
Para colmo de males PDVSA la antaño mayor y mas confiable proveedora para el mercado internacional y con absoluta solvencia, ha disminuido drásticamente su producción por lo que sus exportaciones a EEUU se han reducido considerablemente y es ahora el quinto suplidor de ese consumidor de crudo y derivados, gastando sus ingresos en financiar el adiestramiento, cerca de la represa Uribante-Caparo, para una supuesta guerra asimétrica pagando asesores e instructores venidos de Colombia, Cuba e Irán, todos especialistas en narcoterrorismo y violencia social expertos en manejo de armas y explosivos de guerra, lo que incluye el uso indiscriminado de explosivos en contra de la población civil, así como el uso masivo de minas antipersonales, atentados contra servicios públicos y empresas básicas al igual que la practica masiva del secuestro y extorsión, la producción y comercialización de estupefacientes y sicotrópicos y el secuestro y utilización de menores de edad en sus unidades de combate. Así como la creación de una franja de exclusión territorial como aliviadero para las fuerzas narco terroristas con afinidad política, franja que va desde castilletes hasta la gran sabana donde esta aplicando el desplazamiento forzoso de la población civil mediante el terror aplicado por la fuerza armada a su mando.
En este estado de cosas se agrega el resultado de la experticia forense de Interpol aplicada a las computadoras y discos duros obtenidas por Colombia después de su incursión defensiva realizada en territorio ecuatoriano y en la cual resultara abatido uno de los jefes más sanguinario del narcoterrorismo colombiano, lo cual es una confirma a toda prueba lo que el propio Comandante Presidente ha venido expresando en repetidas oportunidades al leer emocionadamente la carta de Manuel Marulanda, al solicitar el estatus de beligerancia para las FARC y ELN, al solicitar un minuto de silencio por la muerte de Raúl Reyes, al estrechar públicamente la mano de miembros del secretariado de las FARC y al haber falseado responsabilidades en la masacre en el estado Apure. Ello hace inexplicable la actitud destemplada que pretende negar ahora lo que está probado por confesión de parte, y lo cual es tipificado como traición a la patria.
Ante estos graves y vergonzosos hechos no nos queda otra alternativa para la defensa de la legalidad y democracia de todos los que conformamos la patria de nuestro libertador Simon Bolívar y para la tranquilidad del conjunto naciones libres y democráticas, que solicitar al renuncia al cargo de Presidente De La Republica, cargo en cuyo desempeño no reúne las condiciones mínimas de moral, capacidad, ética y honor y exhortando el respeto a nuestra carta magna, y a los representantes de la Justicia En Venezuela, el antejuicio de merito al ciudadano Presidente de la República para resarcir al pueblo venezolano de la afrenta y daño moral que nos ha ocasionado y solicitar públicamente el cese del lenguaje soez y destemplado con el cual se tratan los asuntos internacionales en las largas e ilegales cadenas con las cuales nos castiga quien hoy detenta la máxima representación del Estado en Venezuela.
PATRIA DEMOCRACIA DISCIPLINA Y LIBERTAD PLENA
LA SOCIEDAD DEMOCRÁTICA VENEZOLANA