BIENVENIDOS AMIGOS PUES OTRA VENEZUELA ES POSIBLE. LUCHEMOS POR LA DEMOCRACIA LIBERAL

LA LIBERTAD, SANCHO, ES UNO DE LOS MÁS PRECIOSOS DONES QUE A LOS HOMBRES DIERON LOS CIELOS; CON ELLA NO PUEDEN IGUALARSE LOS TESOROS QUE ENCIERRAN LA TIERRA Y EL MAR: POR LA LIBERTAD, ASÍ COMO POR LA HONRA, SE PUEDE Y DEBE AVENTURAR LA VIDA. (MIGUEL DE CERVANTES SAAVEDRA) ¡VENEZUELA SOMOS TODOS! NO DEFENDEMOS POSICIONES PARTIDISTAS. ESTAMOS CON LA AUTENTICA UNIDAD DE LA ALTERNATIVA DEMOCRATICA
Mostrando entradas con la etiqueta EL ESTADO. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta EL ESTADO. Mostrar todas las entradas

sábado, 20 de septiembre de 2014

CARLOS VILCHEZ NAVAMUEL, ¡MI GRAN ENEMIGO ES EL ESTADO!

El título de este comentario, es parte de algo que leí en una de las redes sociales, lo publicó en su muro  un empresario inteligente que sabe lo que hace y lo que dice, el pensamiento completo decía:
 “Mi gran enemigo es el Estado en todas sus formas, y los partidos políticos no son más que extensiones engañosas de ese Estado que tanto detesto”. 

Estamos seguros que el empresario al que nos referimos estaba consciente de lo que señalaba, su larga experiencia le ha dado conocimiento y le permite opinar sobre este asunto.

Revisando en Internet sobre el tema me encontré con un libro titulado “Our Enemy, the State” (Nuestro Enemigo el Estado), el libro escrito por Albert J. Nock, en 1935, el escritor que se dice inspiró a autores como, Frank Chodorov, Murray Rothbard, Leonard Read y Ayn Rand. El libro fue reimpreso varias veces y  traducido  al español en el 2013 y editado  por la EDITORIAL INNISFREE LTD. En esta edición aparece una introducción escrita en 2009  por  Butler  Shaffer donde nos habla del autor y nos dice que “Nock fue un hábil orador sobre el liberalismo clásico; defensor del libre mercado, la propiedad privada y receloso frente al poder. Éste escribió en una época en la que el concepto de "liberalismo" estaba siendo política e intelectualmente corrompido para transformarlo en su antítesis de una sociedad dirigida por el Estado; a Nock le preocupó en especial el efecto negativo que tal transformación habría de tener tanto en el individuo como en la cultura en general cuando la corrupción del nuevo carácter humano se hiciera la norma social. El libro lo pueden bajar en el formato de pdf en este enlace: https://bibliolibertaria.org/libros/nuestro-enemigo-el-estado/

En otro sitio leímos algunos pensamientos lapidarios de este gran escritor y pensador norteamericano, Nock afirmaba entre otras cosas que: “El estado actual de los asuntos públicos muestra con suficiente claridad que el Estado es el instrumento más pobre que se pueda imaginar para mejorar la sociedad humana y que la confianza en las instituciones políticas y las panaceas políticas es absurda y está fuera de lugar.  El Estado no es la entidad adecuada para el bienestar humano”. 

¿Es en verdad el Estado enemigo de la empresa privada? La respuesta dependerá de cómo esté conformado el Estado, porque éste puede ser benefactor o posibilitador, y como veremos a continuación las diferencias son muy grandes.

La historia está ahí para estudiarla, entre más estatista sea un gobierno, más enemigo será de la empresa privada, Cuba ha sido un ejemplo de ello en los últimos 50 años, el Estado cubano dirigido por los hermanos Castro destrozó el aparato empresarial privado y con ello la pobreza se generalizó,  en Venezuela mucho más rico y poderoso que Cuba, el Estado, con este gobierno Chavista se ha ido convirtiendo poco a poco en el gran enemigo de la empresa privada, en noviembre del año pasado Fedecámaras aseguró que 4.000 empresas habían desaparecido en los últimos diez años en Venezuela y lo atribuyó directamente a las políticas, que calificó de "pésimas", de los gobiernos de Hugo Chávez (1999-2013) y Nicolás Maduro. 
http://eltiempo.com.ve/venezuela/economia/fedecamaras-cuatro-mil-empresas-han-cerrado-en-ultima-decada/116521

Entre más pequeño sea el Estado y más libertades existan, más amigable es el Estado con la empresa privada. En países como Costa Rica, hay más libertades económicas que en los países mencionados anteriormente, sin embargo las políticas de tipo socialista que siguen privando son asfixiantes para la empresa privada, las personas que quieren convertirse en empresarios deben de comprender que una vez inicien una empresa, el Estado sin llamarlo se convertirá de forma automática en un socio suyo, un mal socio y en muchos caso como dijo el empresario, su peor enemigo.

El Estado costarricense como socio nos ofrece impuestos muy altos, exceso de regulaciones,  monopolios nefastos, desidia y negligencia burocrática, servicios mediocres y caros, infraestructura pésima, gollerías y un sinfín de etcéteras.

Mauricio Rojas, un chileno que estuvo radicado en Suecia desde 1974 escribió un libro titulado “Suecia después del modelo sueco” del estado benefactor al estado posibilitador, (Fundación Cadal, Buenos Aires, Argentina 2005) en él nos comenta con lujo de detalles la crisis de los noventa de ese país escandinavo y como el Estado Benefactor que tenían casi colapsa, nos habla de la transición y del cómo  lo hicieron, nos dice también por qué el Estado debe de pasar de ser un Estado benefactor a un Estado posibilitador donde los gobiernos deben facilitar la productividad y trabajar conjuntamente con la empresa privada en toda su dimensión.
 http://www.carlosvilcheznavamuel.com/del-estado-benefactor-al-estado-posibilitador/

Un Estado posibilitador permitirá a los gobiernos concentrarse en fiscalizar y generar legislatura para hacer sociedades más justas y equitativas y deberá facilitar a las empresas privadas para que ejecuten sus  proyectos de forma ágil y productiva en busca de mejorar de forma global y sustantiva, Nueva Zelanda al igual que Suecia ejecutaron grandes cambios y los resultados están a la vista.  

Carlos Vilchez Navamuel
carlosvilcheznavamuel@gmail.com
@carlosvilchezn

EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, ACTUALIDAD INTERNACIONAL, OPINIÓN, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, REPUBLICANISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA,ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA,CONTENIDO NOTICIOSO,

martes, 10 de septiembre de 2013

LEONARDO MORALES P., Y SI SE “APAGA” EL ESTADO

La corrupción ha adquirido unas dimensiones que solo con la actuación coordinada de todos los poderes del estado será posible combatirlo. Esto de por sí representa una gran dificultad como consecuencia del consentimiento que, de tales prácticas, se estimula desde las altas esferas del poder. 
Esta presunción conduce a graves consecuencias de acuerdo a la opinión del destacado jurista español Baltazar Garzón, quien en el prólogo del reciente libro de Carlos Tablante y Marcos Tarre, Estado delincuente, señala: “La permisividad por parte de un Estado en la expansión del fenómeno o la connivencia con el mismo pueden suponer a medio y largo plazo la desaparición del propio Estado o el riesgo de una inseguridad generalizada que acabe con la sociedad y la convivencia democrática.”
Maduro cree que acabar con la corrupción es algo tan simple como anunciarlo. No es que unos imberbes funcionarios se aprovechan de su posición de burócratas para lucrarse ilícitamente. Tal como lo advierten Garzón, Tablante y Tarre, se trata de toda una estructura que ha logrado desde posiciones en la estructura del Estado como conexiones internacionales. Dicho de otra manera, el enfrentamiento a la corrupción debe ser asumida con una visión que incorpora tanto lo local como lo global.
La corrupción que se practica no es amateur, se trata de redes que adquieren una dimensión y especialización que implantan sus prácticas y métodos en toda la estructura del sistema político. Será que Maduro lo imagina o lo ve a diario en Miraflores y en el Poder Judicial; en las instituciones financieras con sede en el país pero también allende los mares. Vestidos de civiles al igual que elegantemente uniformados. Quién sabe.
Recientemente una buena parte del país quedó sin el servicio de energía eléctrica. Ni siquiera Caracas, la siempre protegida frente a esos avatares quedó exenta. ¡Golpe eléctrico! ¡Sabotaje! Fueron las expresiones del alto mando madurista, siguiendo el ya inverosímil guion isleño.
Valdría la pena que Maduro lanzará esta otra expresión: ¡La corrupción! Sí, la corrupción como culpable de la crisis que desde hace tiempo afecta al sistema eléctrico del país. Cuánto se ha destinado en dólares para superar la crisis, acaso se invirtió, dónde. No habrá algún interesado o varios en que se destinen, de nuevo, extraordinarias sumas de dinero para solucionar lo que antes dejaron sin atender. Estas y seguramente muchas otras interrogantes debería el gobierno responder a todos los venezolanos que diariamente se ven afectados por un servicio que lejos de mejorar empeora.
La corrupción como fenómeno policéfalo no puede ser combatido adoptando posiciones ideológicas. Como se dice en el Estado delincuente: “No hay diferenciación, no hay colores ni ideología, para dar paso a las negociaciones ilícitas que impone la ambición del dinero.” Si Maduro quiere enfrentar la corrupción tal como lo anunció debería convocar a un acuerdo nacional de todos los sectores de la sociedad venezolana. Un acuerdo que promueva el gobierno con los partidos -en plural, los partidos-, la Iglesia, los poderes públicos, los gremios profesionales, empresariales y de trabajadores. En fin, con todos aquellos que crean poder aportar en este objetivo.
Para este propósito, Sr. Maduro, no necesita pedir permiso. La tiene fácil. Si ante el “apagón” de hace unos días lo alarmó y rodeó Miraflores de tanquetas y efectivos militares, imagine, por un instante, que se le “apague” el Estado.
@leomoralesP

EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA,CONTENIDO NOTICIOSO,

miércoles, 12 de junio de 2013

NELSON MAICA, PENSADORES, ANTHONY DE JASAY, LOS TIPS DE HOY

Pensadores: Anthony De Jasay, húngaro, 1925-, filósofo, economista, nació en Aba, se educó en Szekesfehervar y Budapest, obteniendo un grado en Agricultura. En 1947-48 trabajó como periodista independiente, su actividad le obligó a huir del país en 1948. Después de dos años en Austria emigró a Australia en 1950 y curso Economía en la Universidad de Western Australia. Con una Beca Hackett, se fue a Oxford en 1955 y fue elegido miembro investigador de Nuffield College, donde permaneció hasta 1962, publicó en el Economic Journal, el Journal of Political Economy y otras revistas. En 1962 se trasladó a París y trabajó allí en la banca, primero en un puesto ejecutivo y, luego, por su cuenta, hasta 1979, haciendo inversiones en negocios de varios países de Europa y los Estados Unidos. En 1979, se retiró a la costa normanda. 
Tiene una esposa y tres hijos. En cuanto a su pensamiento, aunque su interés inicial y formación fue en economía, luego se pasó hacia la filosofía política, y sus escritos se basan en ambos. A través del liberalismo clásico, el criticismo, el análisis económico del derecho y la teoría de la elección pública llegó, de manera independiente, a las mismas conclusiones del anarco capitalismo y de la escuela austríaca moderna y de su concepto de anarquía ordenada. Es uno de los filósofos sociales más importantes de nuestra época. Sus escritos se han centrado en las relaciones entre la economía, el estado y el individuo. Su independencia de pensamiento y originalidad explican su relativa falta de seguidores. Su obra nos permite un progreso del conocimiento y discernir las características esenciales de una alternativa al Estado moderno. En el campo intelectual ha hecho mucho por la libertad. Ha pasado por dos etapas: como refugiado de la ocupación soviética a Hungría y, luego, recobrada la libertad personal, dedicarse a la libertad general. Su objetivo ha sido doble: a. Usar las armas de la lógica de las ideologías socialistas que imponen la sumisión al Estado y que justifica la redistribución del impuesto y la riqueza como un medio para mejorar el “bien común” y, b. para desarrollar una nueva estrategia, más coherente, de la moderna doctrina liberal, la cual posee la fuerza intelectual capaz de igualar y prevalecer sobre los híbridos de pensamientos que dominan las ciencias sociales hoy y conducen la opinión pública hacia la sumisión estatista. 
El primer trabajo de De Jasay importante para la filosofía política, “El Estado” (Oxford: Basil Blackwell, 1985), ahora se considera un clásico. James Buchanan, en su opinión, elogió su análisis "pedernal duro". De Jasay se ocupa y trata al Estado como los economistas tratan y se ocupan de la empresa, es decir, como un actor intencional. Mientras que la empresa maximiza sus ganancias, el estado De Jasay maximiza el poder discrecional que le permite, además, perseguir cualquier objetivo final que pueda elegir. Al igual que la empresa busca beneficios en competencia, el Estado se convierte en un "esclavo redistribuidor", y al igual que la empresa busca una posición de monopolio, el Estado se esfuerza por tener atributos totalitarios. En el contrato social, Free Ride: “Un Estudio del Problema de Bienes Públicos” (Oxford: Oxford University Press, 1989), De Jasay refuta la afirmación (muy difundida hoy, aquí, por la secta socialista-comunista usurpadora) de que la acción coercitiva del Estado es indispensable para que los bienes públicos se produzcan en óptimas cantidades. El famoso "problema de los bienes públicos", y una supuesta falla del mercado, tiene posibles soluciones voluntarias, incluso bajo las condiciones generales de "egoísmo". Esa importante visión no ha recibido la atención que merece, dado el enorme papel que los bienes y servicios financiados con impuestos juegan en nuestras vidas. El análisis del problema y su solución propuesta por De Jasay aplica incluso a la prestación de la defensa nacional (como se argumenta también, entre otros, contribuyen al El mito de la Defensa Nacional, editado por Hans-Hermann Hoppe [Auburn, Alabama: Ludwig von Mises Institute, 2003]). “Elección, Contrato, consentimiento: una reformulación del liberalismo” (Londres: Instituto de Asuntos Económicos, 1991) es el primer intento de De Jasay de reafirmar el liberalismo en una sólida base lógica carente de toda retórica y el sentimiento, con el objetivo de reemplazar la "floja" doctrina del liberalismo cuyo "sistema inmunológico" está fallando con una doctrina "estricta" cuyo sistema inmune puede resistir la infección por ideas ajenas. El Liberalismo De Jasay se basa en varios axiomas de elección (la tecla que sólo los individuos unipersonalmente pueden tocar y por lo tanto elegir) y en ciertas condiciones favorables de coexistencia. VOLUME IX humano, NÚMERO 1, VERANO 2004 ANTHONY DE Jasay. Las más importantes de estas condiciones son la presunción de libertad, la propiedad y la inocencia, las cuales se basan en un argumento: la lógica: la presunción de que todos los individuos tienen la libertad de actuar como mejor les parezca, siempre y cuando los demás no formulen objeciones válidas (es decir, válido en una sociedad en particular durante el período de referencia de tiempo). Cuando alguien dice: "Voy a emprender acciones A," un ciudadano puede responder, "¡No! No es una objeción válida. "Entonces los legisladores y los árbitros tienen que decidir sobre quien recae la carga de la prueba que demuestre la validez de la objeción”. La decisión depende de la correspondiente lista de objeciones aceptables. Si la lista es explícita y finita, la aceptación de cargos constituye una cuestión de eficiencia. Suponiendo que el objetor es racional y no frívolo, tendrá razones específicas y concretas en mente y será capaz de probar su afirmación fácilmente señalando con un elemento determinado en la lista de objeciones válidas. El actor intencional puede falsear la afirmación del objetor si va a la lista y muestra que no hay objeción relevante. El tiempo y el esfuerzo necesario para hacer estas comprobaciones dependen de la longitud de la lista. Todo el asunto es la eficiencia. En la vida real, sin embargo, prácticamente no existe una lista explícita de objeciones válidas. La vida social opera en relación con las listas de excepciones, algunas de las cuales se basan en las convenciones y no pueden ser explícitas. En efecto, por lo general la lista es infinita. Por lo tanto, un agente intencional encontrará lógicamente imposible falsificar la afirmación del objetor. Hay objetores que les resulta fácil frustrar las acciones de otras personas. Fueron los legisladores o jueces quienes al colocar la carga de la prueba sobre los actores intencionales, quienes estarían pidiendo algo que, en principio, no se puede hacer, la demanda sería razonable. Por lo tanto, la carga de la prueba debe recaer siempre en los objetores. La gente, el ciudadano, no es libre si debe soportar la carga de la prueba para justificar sus acciones intencionales o si deben hacer referencia a un "derecho", acudir y exponer alguna declaración de derechos antes de que se atrevan a actuar. Los otros principios son "toda la propiedad es privada", "promesas se mantendrán", y "primer llegado, primer servido." Para algunos tratadistas el modelo social de Jasay derivado de estos principios se acerca a la anarquía. El texto “Contra Politics” (Londres: Routledge, 1997) se refiere a la elección colectiva y la supuesta necesidad de anular las elecciones individuales. En este trabajo, De Jasay busca demoler lo que considera las nociones ilusorias de los poderes benignos de las constituciones y la posibilidad de gobierno limitado. El autor muestra cómo arraigadas convenciones con respecto a la responsabilidad civil, contratos, y la propiedad pueden hacer el trabajo de leyes coercitivas y mantener lo que es anarquía ordenada. En el libro de De Jasay “La Justicia y sus alrededores” (Indianapolis: Liberty Fondo, 2002), muestra una teoría de la justicia derivada de las libertades, de libres obligaciones, aciertos y errores rechazados por convención asumida. En esta teoría, sólo son injustos los actos que se derivan de las injusticias, y, en contraste con las afirmaciones hechas por los teóricos dominantes en la actualidad "la justicia social", la desigualdad del ingreso y la riqueza no es injusto. Además de sus libros, Jasay ha publicado numerosos artículos sobre economía y filosofía política. Dos de las más recientes y especialmente poderosos merecen mención. "Libertades, 'derechos', y derechos" seminales (Il Politico [septiembre-diciembre de 2001]) LA REVISIÓN INDEPENDIENTE 102. GERARD Radnitzky. La obra de De Jasay también nos ayuda a entender mejor la historia política de nuestro tiempo e incluso hacer un poco de "predicción de patrones" (a la Hayek) en el futuro. De Jasay establece una distinción entre las libertades y derechos: en términos generales, en el caso de una libertad del objetor quien tiene la carga de la prueba, mientras que en el caso de un derecho que dice tener cierto derecho tiene la carga de la prueba. "Derechos" a menudo resultan como declaraciones que han sido otorgados por los poderes fácticos. Los beneficiarios finalmente disfrutan de estos "derechos" como algo normal y natural. Por lo tanto, la retirada de ellos resulta difícil, si no imposible. Se observa un efecto de trinquete que a menudo produce patrones de ondas históricos: el estado de bienestar se expande hasta convertirse en prohibitivamente caro. Los nuevos reformadores  tratan de rodar de nuevo (como lo hicieron Thatcher y Reagan, por citar sólo dos ejemplos principales), los problemas de adaptación que se plantearía dar a los grupos de interés, tales como receptores de asistencia social, la oportunidad de reafirmarse, lo que garantiza que los rebotes del Estado de bienestar son como una venganza. El trabajo masivo de De Jasay es conciso, libre de jerga, y se distinguió por su claridad y su dependencia de la argumentación lógica. Es lo más cercano a un intelectual integral en defensa de la libertad, como cualquier cosa, es probable que produzca un solo pensador. Sorprendentemente, a los menos nueve décimos partes de la creación académica es bien hostil a ella o se ignora. Hasta ahora, sólo unos pocos pensadores líderes han dado algún reconocimiento. Una posible explicación es que la política de De Jasay es el polo opuesto de la que prevalece en la mayoría de universidades, y otra es que él es un independiente en lugar de un erudito académico. Aún otra es que es difícil de encasillar, y ninguna escuela lo llama a su nomina. Aunque su influencia puede ser establecida lentamente, sin embargo, es probable que dure. A lo largo de su historia, la humanidad ha mostrado permanentemente una condición física clasificada en el lenguaje ordinario como "enfermedad" o "enfermedades." Siempre ha sido lo que Hume llamaba una "conjunción constante" entre la vida humana y la enfermedad. La hipótesis hobbesiana de que la enfermedad es una condición necesaria para la supervivencia de la especie humana tiene un fuerte apoyo empírico. Nunca ha sido falsified.VOLUME IX, NÚMERO 1, VERANO 2004 ANTHONY DE Jasay. También a lo largo de su historia, la humanidad ha mostrado permanentemente una condición social clasificada en el lenguaje ordinario como "el Estado" o "Gobierno." Siempre ha sido lo que Hume llamaba una "conjunción constante" entre la sociedad humana y el gobierno. La hipótesis hobbesiana de que el gobierno es una condición necesaria de la vida social tiene un fuerte apoyo empírico. Nunca ha sido falsificada. Los argumentos a favor de la prevención o erradicación de la enfermedad son evidentemente equivocadas y pueden ser peligrosos. A menudo son presentados por personas ingenuas con poca comprensión de la realidad. Los argumentos a favor de fomentar la capacidad de la sociedad para evolucionar órdenes anárquicas y vivir con menos o ningún gobierno son evidentemente equivocadas y pueden ser peligrosos. Ellos a menudo son presentados por personas ingenuas con poca comprensión de la realidad.-

Tips:
•        Población: Sacrificada, es la victima de este régimen. Luego de 14 años del presente régimen comienza a darse cuenta, por los controles, represión, terror, crimen, la inflación, la ocupación cubana, la escasez y el hambre, etc., que ha sido víctima de unos charlatanes (que hablan mucho y sin sentido; que hablan sin discreción; embaucadores; embusteros; engañadores; farsantes; impostores; ladinos; mentirosos; timadores, etc.) y de su secta socialista-comunista creada y sumisa a los castro (doctrina religiosa o ideológica que se diferencia o independiza de otra; conjunto de seguidores de una parcialidad religiosa o ideológica; conjunto de creyentes en una doctrina particular o de fieles a una religión que se considera falsa: ej.: secta satánica). ¿Todavía lo duda? ¿Acaso la presente realidad no se lo muestra? Sugerencia: pida una ayudadita entonces y/o acérquese al mercado o bodega o pulpería a comprar algo. ¿Se le parece a una “franquicia” moderna y/o a la libertad que usted merece y ejercía?
•        Territorio: Está en abandono a pesar de su belleza y exuberancia y magnetismo y potenciales. Hidro-electricidad: antes de 1999 la exportábamos; ahora carecemos de ella. Pdvsa: se desconoce verazmente ingresos, gastos y la deuda que tiene; pero si se conoce que importa casi todos los rublos que antes de 1999 producía y exportaba, incluyendo la gasolina y, de paso, sigue pidiendo prestamos. Del petróleo dependemos económicamente; pero lo regalamos y mal usamos. Aguas servidas: el régimen no informa: caja de pandora. Habrá que averiguar cómo está el sistema cloacal a nivel nacional. ¿Por los audios silva, caldera, etc., se podrá inferir? ¿Por los anuncios del régimen?
•        Gobierno: Régimen. Parece que al final se nos presenta como toda una secta socialista-comunista creada, dirigida y sometida desde la isla caribeña totalitaria. ¿Por qué secta socialista-comunista? Porque aparentemente fue creada y es sostenida para que unos seguidores sectarios aseguren a sus conductores, lideres, charlatanes, todo tipo de posibilidades para el engaño, la trampa, la corrupción, el asalto, la impunidad. Fue muy fácil crearla y en corto tiempo. Cuanto mayor es el número de sectarios, mas fácil es engañarlos. Treta milenaria y en todas las áreas de la vida. Esta secta socialista-comunista creada y dirigida por los castros para su beneficio, llama la atención todos los días mediante noticias, rumores, etc., que difunden y son para engañar, distraer, llenas de grandes promesas, estimulando así todo tipo de sueños en quienes les siguen, oyen y ven cuanto desean oír y ver. No explican nada, solo hay que volver a las soluciones primitivas de los antepasados, a los remedios rurales antiguos, a las secretas pócimas. Todo indefinido, campechano. Vea y sienta usted el total fracaso cuando necesita algo.
•        Oposición: ¡A patear la calle! ¡Desmontar la ilegitimidad e ilegalidad! Lo está murmurando y exigiendo la población multicolor. Se supone que tiene muy claro el camino a seguir. Las dudas y vacilaciones no tienen cabida ahora. La timidez y la falta de audacia son contraproducentes. Temas pendientes: inflación, represión, protestas, militarización (milicias obreras), fraude, contratos colectivos, persecución y matanza de sindicalistas y población, universidades, finanzas públicas, epidemias, salarios, éxodo de talentos, corrupción, etc., etc., etc. ¡Cuidado, siguen las muchachadas y no usan bien la palabra! ¡La estrategia se ejecuta, no se pregona! El pueblo no soporta largos periodos de dudas, eso cuenta la historia.
•        Relaciones Internacionales: Resaltantes: Iglesia, USA, Colombia, Brasil, Guyana, Caribe, Importaciones, Dólares, Préstamos y Convenios no transparentes. ¿A cuánto ascienden los préstamos obtenidos en el exterior? Este régimen no representa a toda la población, solo a una secta. Clarificar lo relacionado con el supuesto fraude electoral. Ilegitimidad. Ilegalidad: ¿La comunidad internacional repudia la ilegitimidad, ilegitimidad, en Venezuela? ¿Quiénes si y quienes no? Sigue a todo tren la estrategia de la distracción por parte del régimen. ¿También es repudiable la visita a los ocupantes de Vzla? ¿Sí? ¿Por qué no se repudia la ocupación con fuerza, con energía? ¿Acaso la oposición está de acuerdo con la ocupación cubana?
 “¿Quieres dejar de pertenecer al número de los esclavos? Rompe tus cadenas y desecha de ti todo temor y todo despecho”, Epicteto.
nelsonmaica@gmail.com

EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA,CONTENIDO NOTICIOSO,

lunes, 13 de agosto de 2012

RICARDO VALENZUELA, EL ESTADO ¿AMO O SIRVIENTE?, REFLEXIONES LIBERTARIAS, DESDE MEXICO,

El candidato republicano a la presidencia de los EU, Mitt Romney, acaba de seleccionar a quien lo acompañará como su Vicepresidente en la lucha política que se avecina, Paul Ryan. Ryan es un joven congresista y uno de los consentidos del Partido del Té. El debate se torna por demás interesante. En la esquina de Obama los estatistas gritando; “Ustedes son mis hijos y con los derechos que les otorgo, me haré responsable de su bienestar de la cuna a la tumba”. En la otra Romney afirmando; “Nosotros somos sirvientes y nos han confiado la responsabilidad de protegerlos. El gobierno no es quien los ha dotado de sus derechos, somos solo los protectores de los mismos.”
El enfrentamiento político en los EU deberá definir una vez por todas, cual debe ser la saludable relación del ciudadano con su gobierno.
En esta era de acontecimientos históricos en la cual los mexicanos nos encontramos intentando redefinir la relación del ciudadano común con su gobierno. En la cual estamos también tratando de implementar un verdadero sistema democrático republicano que conduzca a el país por la ruta de la prosperidad y la justicia, pensamos es importante analizar algunos conceptos que aclaren las posiciones de ambas partes.
Una creencia común en nuestro país es que los derechos de los mexicanos emanan de nuestra constitución o de nuestro gobierno. Esta es una de nuestras creencias más erróneas. A través de la historia, la creencia común fue que la gente eran sujetos incondicionales de los mandatos de sus gobiernos. Si el Rey le ordenaba a una persona abandonar su familia para pelear en una guerra lejana, tenía que obedecer. El rey podía controlar y regular vida y propiedad porque era soberano y supremo. Los ciudadanos como súbditos eran subordinados e inferiores. Cuando el Rey ordenaba, había que obedecer.
Gradualmente la gente empezó a cuestionar el concepto del soberano con control irrestricto sobre sus vidas y sus fortunas. En 1215, por ejemplo, con la promulgación de carta magna, el Rey por primera vez en la historia fue forzado a admitir que sus poderes sobre los ciudadanos eran limitados. Sin embargo, fue hasta 1776 con la declaración de independencia de los EU, que el concepto del soberano todopoderoso fue prácticamente destruido. El gobierno no era soberano y supremo, Jefferson declaró al mundo. Los individuos lo son. Por lo mismo, los funcionarios públicos son subordinados a los ciudadanos, son sus sirvientes.
En esos momentos nació el concepto de que los seres humanos nacen con ciertos derechos fundamentales que fueron anteriores a los gobiernos. Es decir, los derechos del hombre no provienen del Rey ni de ningún gobierno. Derechos como la libertad, la vida, la propiedad y la búsqueda de su felicidad, existen independiente y previamente a los gobiernos, no por ellos, son los derechos naturales de todo ser humano.
La razón por la cual la gente organiza los gobiernos es precisamente para proteger el ejercicio de esos derechos. Es decir, en la ausencia de un gobierno, los elementos negativos como los delincuentes harían la vida de la sociedad miserable. Por lo tanto, se necesita un gobierno para arrestar, juzgar y castigar a ese tipo de gente. Un gobierno que proteja vida, libertad, propiedad y contratos. No se necesitan gobiernos promotores, petroleros, electricistas, banqueros etc.
¿Qué pasa cuando el gobierno quebranta su obligación de proteger y se convierte en un elemento más destructivo de los que sería en ausencia de ese gobierno? Entonces la gente tiene el derecho de alterarlo o abolirlo e implementar uno nuevo designado para proteger, no destruir, el ejercicio de los derechos naturales que Dios nos heredó. El problema que enfrentaron de inmediato los promotores de esta nueva forma de organización social, era el comprobar si era posible el formar un gobierno que permaneciera limitado, inferior y subordinado al mandato de la gente, y que no asumiera el tradicional papel de soberano y supremo en sustitución de los monarcas.
Para entender la actitud del ciudadano común hacia su gobierno en México y la relación con él, hay que remontarnos a la conquista de la Nueva España y los trescientos años de control de nuestro territorio de parte de una institución tan autócrata como la corona de España, y la intervención en estos acontecimientos de una iglesia católica medieval que siempre promovió una sumisión total a las instituciones de parte de los ciudadanos. Cuando Adam Smith publicó su magna obra “La Riqueza de las Naciones” en 1776, en España fue prohibida y el delito de poseerlo castigado con la muerte por la inquisición.
Después de la independencia, México se convirtió en un cruento campo de batalla en una lucha letal por el poder que en esos momentos se estaba gestando para el estado mexicano, el poder absoluto, el regreso al concepto del monarca absoluto, soberano y supremo, ahora representado por una infinidad de caudillos tanto liberales como conservadores. En el ocaso del siglo XIX, Porfirio Díaz se adueñó de tal poder transportando al país hasta el siglo pasado en un estado de cacicazgo, mediante una dictadura que encendió las pasiones de los mexicanos.
A principios del siglo pasado el país se sume en una revolución liberal que fue secuestrada por los socialistas en el constituyente de Querétaro en 1917, con la elaboración de una constitución de ese corte, socialista. Este evento fue la puerta que se abrió para establecer el sistema “político moderno” de México basado en lo mismo, el poder absoluto, pero ahora ejercido por un solo partido y un monarca sexenal llamado Sr. Presidente.
Durante los siguientes 70 años ésta fatal combinación se ha encargó también de convencer a los mexicanos de que el estado es superior, absoluto, soberano y supremo. Que los ciudadanos somos inferiores, somos súbditos, que necesitamos para todo extender la mano al estado, pedir su anuencia, darle eternamente las gracias.
Finalmente, en el despertar de este nuevo siglo los mexicanos debemos de entender que el ciudadano es el soberano, no el estado, que el estado debe ser inferior y supeditado al mandato de la gente, que el estado debe tener limitaciones, que ya no debe haber monarcas sexenales que afirmen  “el estado soy yo,” que el mismo pueblo debe elegir a sus “servidores públicos” y no simplemente heredar el trono como ha sucedido. Los mexicanos finalmente debemos de entender que como seres humanos tenemos derechos naturales anteriores e independientes del estado, y la función primordial del estado es el velar y proteger esos derechos.
Desgraciadamente todavía hay políticos que no lo entienden y no quieren que los mexicanos lo entiendan. Quieren simplemente regresar a la época del estado feudal y omnipotente, del monarca sexenal, a la dictadura perfecta. ¡Cuidado caciques estatales y reyecitos estilo Hugo Chávez!    
Twetter@elchero

EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA,CONTENIDO NOTICIOSO,

martes, 6 de marzo de 2012

NARCISO GUARAMATO PARRA: EL ESTADO

Toda doctrina económica, tiene implícitamente una visión muy específica de cómo debe estar organizado el Estado y del alcance que debe tener sobre la economía. Desde un extremo liberal que apoya al mercado como mecanismo de producción y distribución,  en que el Estado debe ser lo más reducido posible hasta el otro extremo socialista en que el Estado es el todo poderoso de tomar las decisiones.

Pero ¿Qué es el Estado? ¿Quiénes lo conforman? ¿Cuáles son sus funciones? Estas preguntas deben tener una respuesta clara antes de discutir cualquier forma de producción de bienes y servicios. Son muchas las personas que confunden gobierno con Estado, como fue el caso del Luis XIV, Rey de Francia, a quien se le atribuye aquella expresión, himno al absolutismo: “El Estado soy yo”.

Como lo explican, Francisco J. Virtuoso (Rector UCAB) y Hildebrad Breuer (Lic. En Estudios Internacionales) en su trabajo denominado: “Estado, gobierno y sociedad, que es parte del libro. “Buenos Gobiernos Locales, caminos para promover una gestión pública corresponsable” (Centro Gumilla, Dic. 2011). El Estado como sistema de organización política tiene aproximadamente  400 años de historia y se concibe como capaz de “garantizar el orden y la seguridad necesarios para el goce efectivo de los derechos de las personas. Es visto así, el único camino disponible para escapar del estado de la naturaleza”.

El Estado surge de la voluntad o decisión de una parte de la ciudadanía, de “… un número reducido de hombres a quienes se confía el poder legal de formular sus mandatos”. En referencia a su organización y funciones, estas se conciben como un conjunto de instituciones, leyes y reglas de juego, que tienen como principal característica la transcendencia en el tiempo sobre el hombre. El Estado venezolano está conformado por 5 poderes: El Ejecutivo, El Legislativo, El Judicial, El Electoral y El Poder Ciudadano (art. 136 de la Constitución).

Es una organización evolutiva, que continuamente tiene que adaptarse a las nuevas visiones, legislaciones, creencia, nuevas formas de propiedad, etc. “En los Estados de hoy en día, el consentimiento, se dice, es la base, por lo que el tema de la autonomía de los ciudadanos, y de la ciudadanía misma como cualidad (…) No es fruto del poder del más fuerte; es consecuencia del acuerdo de las voluntades de los asociados, de ahí que sea elevado a ente de razón, y únicamente en éste el hombre realiza plenamente su naturaleza de ente racional”.

El artículo 3 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela señala lo siguiente: “El Estado tiene como fines esenciales de defensa y el desarrollo de la persona y el respeto a su dignidad, el ejercicio democrático de la voluntad popular, la construcción de una sociedad justa y amante de la paz, la promoción de la prosperidad y bienestar del pueblo y la garantía del cumplimiento de los principios, derechos y deberes consagrados en esta Constitución.”

Por lo antes expuesto y a diferencia de Luis XIV, nos atrevemos a decir “El Estado somos todos”.

guaamatoparra@gmail.com
@guaramatoparra

EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA