BIENVENIDOS AMIGOS PUES OTRA VENEZUELA ES POSIBLE. LUCHEMOS POR LA DEMOCRACIA LIBERAL

LA LIBERTAD, SANCHO, ES UNO DE LOS MÁS PRECIOSOS DONES QUE A LOS HOMBRES DIERON LOS CIELOS; CON ELLA NO PUEDEN IGUALARSE LOS TESOROS QUE ENCIERRAN LA TIERRA Y EL MAR: POR LA LIBERTAD, ASÍ COMO POR LA HONRA, SE PUEDE Y DEBE AVENTURAR LA VIDA. (MIGUEL DE CERVANTES SAAVEDRA) ¡VENEZUELA SOMOS TODOS! NO DEFENDEMOS POSICIONES PARTIDISTAS. ESTAMOS CON LA AUTENTICA UNIDAD DE LA ALTERNATIVA DEMOCRATICA
Mostrando entradas con la etiqueta PLURALIDAD. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta PLURALIDAD. Mostrar todas las entradas

viernes, 2 de mayo de 2014

JOSÉ FÉLIX DÍAZ BERMÚDEZ, DERECHO A LA PLURALIDAD

La dimensión jurídica de la pluralidad como base de las relaciones sociales y elemento caracterizador de la democracia tiene alcances notables no sólo como norma de derecho interno sino también internacional. No existe Constitución política en el mundo moderno que no la establezca de manera expresa o implícita como parte de sus disposiciones, siendo un concepto indispensable para la cohesión social.

La discriminación y la segregación de otros, especialmente por razones políticas, constituye un delito cuando se realiza como práctica institucional pudiendo constituir, según los casos, un grave atentado contra la integridad física y moral de grupos, actos de persecución, apartheid y entre otros hechos similares, materia de la cual es competente la Corte Penal Internacional.

La intolerancia con la cual se conducen los regímenes de fuerza, el autoritarismo como forma de conducción política, la represión como instrumento para enfrentar la disidencia, son todas expresiones de violencia y de agresión ilícita que atentan contra el pluralismo social, ideológico, cultural y racial, y representan una negación intolerable del Estado de Derecho, de los valores y principios de la sociedad que es diversa por naturaleza.

El pluralismo es un sistema de relaciones trascendentes donde se desenvuelve la misma sociedad, que significa unidad dentro de la diversidad, integración humana dentro de un conjunto de valores compartidos que identifican y definen a un país.  La pluralidad como concepto tiene una entidad propia en el derecho social y en el político, y se vincula de manera indisoluble con principios fundamentales como son: la igualdad, la no discriminación, la participación, la paz.

En el viejo continente, la: "Carta de París para una Nueva Europa",  el: "Tratado sobre la Unión Europea" y la: "Carta de Derechos Fundamentales", vinculan estrechamente a la democracia con los valores esenciales del individuo y de la sociedad.  La: "Declaración de Copenhague" reconoce que: "la democracia pluralista y el Estado de Derecho son esenciales para garantizar el respeto de todos los derechos del hombre y todas las libertades fundamentales".

En América, la: "Carta de la OEA" califica a la democracia como: "condición indispensable para la estabilidad, la paz y el desarrollo". En el mismo sentido, la: "Declaración de Nassau" de 1992 establece que la democracia es: "la garantía de relaciones pacíficas entre todos los habitantes y el pleno respeto por la diversidad cultural".

El: "Compromiso de Santiago con la Democracia" de 1991 ordena que: "ninguna forma de discriminación sea un obstáculo para la participación política". Igualmente, la: "Declaración de Managua", primero en 1992 y después en 1993, reconoció el derecho a: "auténticos procesos democráticos, pluralistas, participativos y respetuosos de las libertades políticas fundamentales", así como la responsabilidad de los grupos políticos en cuanto a: "la participación ciudadana y en la interacción política pacífica", respectivamente.

La: "Declaración de Montrouis" de 1995, señala que el: "ejercicio pleno de todos los derechos humanos es condición necesaria para una sociedad pluralista y participativa". A la vez, la: "Carta Democrática Interamericana" del 2001, destaca como parte esencial de la democracia: "el régimen plural de partidos y organizaciones políticas".

Finalmente, la: "Declaración de Santiago sobre Democracia y Confianza Ciudadana" del 2003 y la: "Declaración de Santo Domingo sobre Gobernabilidad y Desarrollo" del 2006, coinciden al indicar que: "la libertad de expresión, al acceso a la información y a la libre difusión de las ideas" así como "la información plural", contribuyen: "a un ambiente de tolerancia de todas las opiniones" e igualmente, que los derechos a  la información y al conocimiento son indispensables para la existencia de: "una sociedad libre, democrática y pluralista", incluido el derecho al uso de Internet y de la Web: "sin censura política", dentro de un: "libre flujo de informaciones y de ideas".

Lo anterior evidencia el extendido alcance y tratamiento que la pluralidad adquiere y, en especial, en el derecho democrático, que cada vez más profundiza su inseparable relación con los derechos humanos.

Quebrantar el derecho a la pluralidad social y democrática compromete la capacidad de un gobierno de dirigir y representar a la nación, lo coloca al margen del Estado de Derecho, de la legitimidad política y del sentido de unidad que la misma requiere como elemento de la identidad espiritual y ciudadana de todos los venezolanos.

Jose Felix Diaz Bermudez
jfd599@gmail.com
@jfd599

EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, ACTUALIDAD INTERNACIONAL, OPINIÓN, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, REPUBLICANISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA,ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA,CONTENIDO NOTICIOSO,

sábado, 28 de diciembre de 2013

SIMON GARCIA, PLURALIDAD, UNI0N Y BIENESTAR, EL LUGAR COMÚN

Esta epoca de fin de año, llena de resonancia espiritual y religiosa, es propicia para el trato amigable, la actitud generosa y la reconciliación. Ello se manifiesta en los ámbitos de la vida privada y en el espacio más abierto de las relaciones familiares. Son días de reflexión, regocijo y definición de nuevos buenos propósitos.También la vida pública suele adquirir un cierto sogiego, incluso en actividades sociales tan ordinariamente agresivas como la política y la guerra. En la una y la otra, que son dos formas distintas de competencia  por el poder, la navidad se asocia a oportunidad para el encuentro civilizado entre los contendores o para el cese de la refriega bélica.

Sin muchas luces ni arbolitos de navidad, con pocos estrenos de gaitas y un compensatorio CD de aguinaldos de Gaélica,  en medio de un anémico clima festivo, el espírtu de la navidad se asomó vagamente con la invitación del gobierno nacional a los Alcaldes electos con la tarjeta de la MUD. Una iniciativa que  vale mucho, al margen de la desconfianza que hace saltar a los picados de culebra ante tan sorpresivo bejuco.
Su importancia es directamente proporcional a la evaluación que tengamos sobre los efectos nocivos que cultural y socialmente ha provocado la más enconada división de nuestra sociedad desde la Guerra Federal. 
El choque de las emociones comenzó por destruír amistades, separar familias y puso un cuchillo entre los dientes a gente de ordinario tranquila, trasmutada en ardorosos defensores de una concepción unilateral de la patria. 
Un conflicto en torno a ella que se ha trasvasado a otros comportamientos y que ha terminado por desconyuntar a la sociedad, pues cada quien jala para su versión sin admitir que puedan tener y hacer que coexistan democráticamente, divergentes visiones sobre lo que es hoy y lo que debe ser mañana la casa común que termina por ser toda patria.
En medio de la tregua algunos, que ven los resultados electorales como su botella media llena, buscan estímulos ideológicos para mantener encendido su volcán de odios. Pero a quienes fuimos a votar en contraposición a las políticas del Estado nos corresponde, porque nos jugamos la vigencia de la pluralidad que defendemos, asumir el diálogo con disposición activa y constructiva. No sólo para buscar un área de convenimientos mínimos entre el gobierno y la Alcaldías, sino para tender la mano a los otros millones de venezolanos que dieron su respaldo a los candidatos propuestos por el PSUV.
Para encontrarnos con ellos es importante aceptar lo que hay de verdad en sus razones y en sus demandas.  Tal vez aprendiendo a oirlos y a manejar positivamente nuestras discrepancias podamos entender por qué nuestra botella, a la luz de los comicios municipales, está otra vez medio vacía.
No hay que disculparse por dialogar. Todos los que quieran, desde el progresismo, trabajar por la unión entre los venezolanos tienen que hacer política sin dejarse llevar a ejercerla como un sucedáneo de la guerra, donde el que piensa distinto es tenido por traidor y enemigo. Dialogamos porque no validams el apartheid hacia los que defienden el proceso revolucionario y porque la unidad nacional es un bien público necesario para evitar que el país se vaya a pique. Dialogamos porque los venezolanos rojos rojitos, tengan o no el gobierno,  son y serán importantes para asegurar  el bienestar político y social de todos. Así que, ¿por qué temer el diálogo y las posibilidades de empeños comunes que tanto hemos exigido?
Lo más importante es que la sensación de que seguir la peleadera es arar en el mar, es compartida cada vez por mayor número de venezolanos en uno y otro lado. La existencia de radicales, también en uno y otro lado, aporta el señalamiento y el debate sobre objetivos máximos; pero siempre arrastra el inconveniente de apelar a medios inviables o que sencillamente conducen precipitadamente a aislarse de la mayoría. Pero los radicales son consustanciales a la diversidad y hay que confrontarse dialogalmente también con ellos.
Nada perdemos en dedicar estos días festivos a sembrar entre nuestros amigos, de allá y de acá, las semillas del pluralismo y de la reconciliación. Hacerlo con la confianza de que habrán de venir tiempos de regocijo compartido y de mayores coincidencias desde proyectos políticos obligados a competir por un modelo de bienestar sin abandonar la sabrosa experiencia humana de la convivencia. Hacerlo, sobre todo, porque el 2014 se nos viene encima con rostro duro y amenazas de resaca.
Simon García
simongar48@gmail.com   
@garciasim

EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA,CONTENIDO NOTICIOSO,

domingo, 15 de septiembre de 2013

SIMON GARCIA, NUESTROS DISIDENTES

Hay que abrir espacios y canales a través de los cuales puedan circular ideas sobre los fines, objetivos y métodos de resistencia cívica a la degradación neototalitaria que atrae a los enchufados. La MUD ha sido un primer impulso renovador

Puesto que nos proponemos ser un movimiento alternativo a las posiciones neototalitarias, estamos obligados a tratar a nuestros disidentes con contemplaciones.

Condescendencia que no es por bobada. Se apega a una gestación democrática de la mayoría y a la presunción de que ella cambia producto de la confrontación con y entre discursos minoritarios.

La prueba de la pluralidad no es sólo la existencia del juego de opiniones sino la garantía de que ellas pueden influir o determinar la adopción de nuevas posiciones comunes.

Si esta visión tiene algo de cierto, convertir en casus belli diferencias con la posición oficial de la MUD, conduce a la negación propia.

Exuda desgaste en doble vía. Especialmente en desavenencias que tengan que ver con la formulación de una estrategia eficaz para desplazar pacífica y constitucionalmente al régimen no democrático que ejerce, aprovechándose de la democracia formal, todo el poder del Estado desde una sola de sus instancias.

Hay que abrir espacios y canales a través de los cuales puedan circular ideas sobre los fines, objetivos y métodos de resistencia cívica a la degradación neototalitaria que atrae a los enchufados.

Debate libre de incidencias burocráticas propias de las viejas formas de luchar por el poder. Los temas afloran en la conversación común como aspectos que desarrollarían el nuevo pensamiento alternativo, la oferta de país y el plan estratégico para llegar a él.

No es automático que las innovaciones surjan de los disidentes. Pero, al menos, van a indicar motivos de reflexión lateral a lo convencionalmente dado por verdadero por el pedazo de foca, inherencia incómoda de separar, que cada uno pueda conservar por dentro.

El país no va a emocionarse, no va a recuperar el riesgo a soñar sin las iniciativas, los planteamientos y las propuestas que evidencien que existe más ambición alternativa que pura y simple gestión opositora.

La MUD ha sido un primer impulso renovador. Ella motorizó una experiencia significativa para orientar la confluencia de energías partidistas, personalidades independientes y sectores sociales.

Pudo construir una propuesta unitaria de alcaldes y concejales que es una fortaleza para el 8.

Son candidatos que continúan, en el plano electoral, el enfrentamiento social y político al régimen. Salieron de unas primarias abiertas o de un consenso. Representan la voluntad de unidad. Tienen además, el plus de su vinculación armónica a un horizonte alternativo desde modelos diversos de gestión local.

La propuesta produjo otra clase de disidencias. Un minoritario efecto Narciso llevó a postulaciones al margen de la Unidad. Pero aún son parte de la oposición.

Hay que persuadirlos de que no favorezcan el triunfo oficialista global. Un papel que han jugado partidos que actualmente están en la MUD y que merecieron la oportunidad de corrección. Es hora, como le gustaba decir a Caraquita Urbina, de barrer hacia adentro.

simongar48@gmail.com

EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA,CONTENIDO NOTICIOSO,