*VAMOS TODOS UNIDOS CON FIRMEZA HACIA ADELANTE CON EL MOVIMIENTO REPUBLICANO MR. B I E N E S T A R E N L I B E R T A D. LA HORA DEL VERDADERO CAMBIO HA LLEGADO YA.
*BIENESTAR EN LIBERTAD: UN PROYECTO PARA UN PAÍS DE ÉXITO.
REFLEXIÓN INICIAL.
El bienestar de la persona humana, la familia y -por tanto- la sociedad constituyen el objetivo de nuestro actuar. El fin de la acción política del Movimiento Republicano es la persona humana y su familia. El Estado es útil, pero no como un fin en sí mismo sino como el medio para facilitar las condiciones para que las personas y las familias logren un mayor bienestar.
Basados en nuestra ideología tenemos respuesta para cada uno de los problemas del país. Deberemos priorizar las acciones de gobierno, favoreciendo aquellas que puedan aumentar en el menor plazo posible el bienestar de todos los venezolanos y las que nos permitan cimentar la sostenibilidad de las medidas cuyos resultados se verán en el corto, mediano y largo plazo. Con eso en mente, presentamos a continuación los ejes de la acción de gobierno más importantes y las principales políticas públicas que impulsaremos como aporte a la plataforma de la Alianza Unitaria.
OPORTUNIDAD PARA TODOS.
Venezuela debe ser tierra de oportunidades para todos, sin discriminaciones ni privilegios. Todos deben tener, de una vez, oportunidad de un empleo productivo y de cambiar de empleo para lograr mejores condiciones económicas o de otra índole.
UN GOBIERNO PARA LA GENTE.
Los Venezolanos merecen y necesitan un Gobierno amigable. Un gobierno inclusivo quitará las limitaciones a la iniciativa privada y a la generación de empleos, respetará a las minorías y la libertad de expresión y fomentará el debate nacional con liderazgo y convicción.
LIBERTAD, RESPONSABILIDAD Y ORDEN.
El principal elemento de la libertad es la responsabilidad. El irrespeto a la vida y a la propiedad es incompatible con una vida ciudadana en libertad, libre de temores e inseguridad en las casas, las escuelas o las calles.
UN PAÍS DE PROPIETARIOS.
Venezuela debe ser un país de propietarios. Hoy, muchos venezolanos que solo son dueños de si mismos, de su salario y de algunos pocos ahorros. Hoy día, cada familia que lo desee y se esfuerce, debería ser dueña de su casa de habitación, del mobiliario hogareño, de una computadora y de un medio de transporte familiar. Además, los venezolanos podrían, si así lo deciden, ser dueños de una empresa de servicios, agricultura, industria o fondo de pensión e inversión; participar plena y dignamente de la economía nacional y no solo como asalariados. Se puede y se deben titular las tierras en zonas populares urbanas y de las zonas del campo. Todos los ciudadanos tendrán la oportunidad de participar de forma activa en el capital de muchas empresas y en las grandes obras de infraestructura, mediante la titularización, como dueños, en vez de meros espectadores.
UNA VENEZUELA RESPETADA, MODERNA Y VISIONARIA.
Hay que romper las cadenas de la ineptitud y la ineficacia _del presente y del pasado_ que le han puesto freno al desarrollo y la prosperidad nacional. Las acciones deben estar basadas en la participación e inclusión de los pobres que hoy están en la base de la pirámide de ingresos. La infraestructura de carreteras, puentes, represas, acueductos, electrificación, puertos marítimos y aeropuertos, transporte urbano, servicios básicos en salud y educación se han quedado rezagadas bajo los esquemas del estatismo inoperante. Es necesario dar un cambio radical y profundo para su rescate estructural y la construcción eficiente de nuevas obras.
BIENESTAR EN LIBERTAD: UN SUEÑO EN ACCIÓN.
“No hay viento favorable para quien no sabe a dónde ir”
Séneca.
La existencia de un proyecto de “Visión de País” que la ciudadanía haga suyo, que sea conocido y compartido, puede ser el punto de partida en respuesta a la necesidad de un Acuerdo Nacional que debe tomar la Nación para su recuperación, reconstrucción y reconciliación con plena realización política, social y económica. Como es bien sabido “visión” es la imagen vivida de una meta significativa, valiosa y ambiciosa, a ser alcanzada en un futuro cercano que se relaciona con el beneficiario (el ciudadano) y que, en buena medida, es mejor de lo que existe hoy. La visión es una representación de lo que se cree será el futuro. Es como una vista de la tierra prometida.
Un análisis de las demandas del entorno en lo político, social, laboral, económico, patrimonial, etc. es menester. Debemos esbozar un análisis por contraste de los resultados de hoy versus las demandas no satisfechas; La sociedad fue, es y será implacable cuando no se haya demostrado al menos la intención seria de encaminarse hacia los estándares requeridos en esos resultados.
Debemos ofrecer un programa de acción a partir de la visión del país que se requiere construir en el futuro. Un programa que nos involucre a todos, pues sus lineamientos permiten a los sectores, organizaciones y ciudadanos ubicarse en el, porque perciben que tienen allí un lugar, un papel, y saben cual es, que no es otro que, el país que todos queremos poner en marcha. Es inyectar un shock de optimismo y esperanza. Es un sueño en acción por una verdadera lucha frontal contra la pobreza, por la inclusión, la prosperidad y el bienestar del colectivo nacional.
En este sentido, esta lucha necesariamente implica erradicar el populismo, el clientelismo, el estatismo, y reivindicar la participación y el papel regulador del Estado. Tales políticas tienen que estar orientadas por algunas líneas de acción y para ello proponemos las siguientes:
•Luchar contra el desempleo abierto y el empleo informal, evitando el empleo improductivo.
•Dar soluciones de corto plazo al hambre y la miseria, evitando recurrir a programas de beneficencia pública y, en lugar de ello, formular verdaderos programas sociales, es decir, aquellos que en el corto plazo, estén signados por la lucha contra la miseria, eleven la calidad humana de los receptores de esos programas y los preparen para el trabajo productivo.
•Que los programas sociales, en sentido estricto, sean diseñado de tal forma que quienes reciban su beneficio, puedan retribuirlos en el menor lapso posible.
•Tomar medidas drásticas de orden social y público, en protección de todos los ciudadanos y, en especial, en los sectores más pobres, quienes deben ser liberados del azote de antisociales y tienen el derecho de contar con un hábitat transformado de calidad humana.
•Reorientar el Gasto Público, en función de crear el ambiente propicio para que se desarrolle la economía privada.
•Cambiar la concepción y orientación de política fiscal, atendiendo a la necesidad de coadyuvar a la reconstrucción del país sobre bases sostenibles y sustentables.
La clave para un progreso sostenido y sustentable, y alcanzar la prosperidad esta sobre estos cuatro principios transcendentes: Libertad, Igualdad de Oportunidades, Comunidad y Excelencia. Solo en un clima de Libertad y Democracia pueden desarrollarse a plenitud el conocimiento, la creatividad, la inventiva y el espíritu innovador indispensable para enfrentar con éxito los retos de una realidad nacional cada vez más exigente.
La pregunta es ¿cómo? La respuesta es obvia: sólo creando riqueza. Pero, ¿en qué consiste la riqueza? Los economistas la definen como el Producto Social, que significa mucho más que el mero producto material porque, para que éste logre ser riqueza económica, tiene, inevitablemente, que socializarse, vale decir, lograr que la Sociedad pueda efectivamente disponer de él. Eso, y sólo eso, es lo que se denomina Producto Nacional.
¿No es, acaso, la diversificación de la economía, la que crea más espacio para una mayor creación de Valor Agregado —Sueldos, Salarios y Ganancias—, con el desarrollo de segmentos de actividades económicas articuladas, con la efectiva capacidad de emplear trabajo y capital, como la condición de crear superlativa riqueza y, así, eliminar la pobreza? En el Movimiento Republicano estamos convencidos que ésta es la vía.
Cuantos más segmentos de actividades multisectoriales y subsectoriales articuladas se impulsen, la diversificación se difunde en extensión y profundidad, generando de manera exponencial empleo de capital y trabajo, es decir valor agregado y, en consecuencia, riqueza.
Hasta ahora no ha habido mayor desarrollo debido a un problema de orden filosófico: hemos preferido utilizar las divisas que obtenemos del petróleo para importar bienes, en lugar de asumir el reto de producirlos nacionalmente. Lo poco que producimos —y cada vez es menos— se limita al sector de "bienes de consumo" (alimentos, ropa, piezas, etcétera). Hemos descartado de plano la producción en los sectores de "bienes de capital" (motores, turbinas, transformadores, etcétera) y de "máquinas de herramienta" (tornos, dobladoras, cortadoras, fundidores, etcétera) a la espera de que surjan espontáneamente.
Habrá que crear un Consejo Nacional de Bienes de Capital. Hay que ver la gran cantidad de empleos que genera el sector de bienes de capital y maquinas de herramientas en la industria de bienes de consumo. Un bien de consumo se utiliza y desaparece; en cambio, un motor o un torno, diariamente produce nueva riqueza. Se trata de un tipo de inversión que no se pierde. La generación nacional de más y mejores máquinas provee al resto del sector industrial mayor capacidad de producción, lo cual lo convierte en un extraordinario multiplicador de la economía. La mejor manera de sembrar el petróleo.
El otro sector importante para el desarrollo nacional es el de las obras de infraestructura, que va íntimamente ligado a aquellos. Aparte de mejorar la calidad de vida de la población, las obras en viviendas, transporte y vialidad, ferrocarriles, carreteras, aeropuertos, canales y puertos y obras hidroeléctricas son grandes generadoras de empleo, con un gran efecto multiplicador en lo económico.
La fabricación de infraestructura es la actividad económica que más rápidamente genera demanda agregada de bienes, presionando a las fábricas de bienes de consumo, que se ven obligadas a aumentar y mejorar sus procesos de producción, para satisfacer la demanda y aumentar la productividad. Estas a su vez generan una presión sobre las industrias de bienes de capital, generándose así un entramado de empresas interdependientes, que crece y se amplía en la medida en que se incrementa la demanda y se hace más sofisticado el proceso productivo.
También hay una salida, en la apertura a empresas transnacionales como las llamadas “fabricas maquiladoras”, radicadas en áreas geográficas predeterminadas, con todos los incentivos fiscales que las hagan atractivas a la inversión extranjera y los necesarios controles del estado para su sana y humana implementación. No vemos ninguna razón para “ruborizarse”, si eso fuere necesario; lo importante es la lucha contra la pobreza y afianzar las bases de la prosperidad de la sociedad venezolana.
Venezuela coexistiendo con la comunidad mundial del Siglo XXI con equilibrada interrelación económica con los demás países, disfrutando de un clima de plena libertad, una democracia efectiva y una sociedad cohesionada, prósperamente rica, sana y abierta a las cambiantes realidades culturales y científicas.
¿Qué implica esta Visión? Es una compleja acción política, social, cultural, científica y económica. Pero, en el aspecto económico significa: una economía competitiva, altamente diversificada, con vocación exportadora y con presencia positiva en la globalización.
EL MUNICIPIO COMO PUNTO BÁSICO E IMPULSADOR
En tal sentido, consideramos necesario establecer un conjunto de programas articulados entre sí, con el mayor grado de sincronización posible. Con punto básico e impulsador en el ámbito municipal _principio fundamental de la descentralización y del poder local_ con esfuerzos dirigidos a:
1.- Mejorar las funciones municipales básicas: la hacienda y economía municipal, seguridad pública, servicios civiles —el Registro Civil y la ubicación ciudadana—servicios sociales —salud, vivienda, programas para la eliminación de la exclusión social (tipo ranchos)—, Catastro y Permisología, tránsito urbano — sistemas de transporte colectivos, rutas e infraestructura vial—salubridad, acueductos y energía eléctrica, logística municipal —abastecimiento urbano, mercados, red de información logística, servicios de apoyo al ciudadanos y a las empresas localizadas y a localizarse en el Municipio—. El abordaje de acciones de este tipo demanda mucho esfuerzo y trabajo, tanto en términos de la administración directa de las Alcaldías, como de las empresas y la comunidad del Municipio. Y constituyen fuentes de trabajo productivo.
2.- Aprovechar el “entorno” del Municipio, en su beneficio. Existen acontecimientos, procesos y agentes externos a él, que ejercen fuerte influencia sobre su futuro: innovaciones tecnológicas y movimientos socioculturales, que penetran y afectan al sistema urbano —sean o no deseables—. Esa afectación incide en la prosperidad y habitabilidad de su población. Se deben identificar los cambios en el entorno y sus previsibles ocurrencias, comprender y evaluar el impacto de esos cambios en el desarrollo urbano para usarlos en beneficio del Municipio.
3.- Convertir los retos en oportunidades para el desarrollo municipal: modernización de la Administración Pública Municipal como elemento clave para el progreso de las ciudades; aprovechar “la globalización”, para insertar a los municipios en ella; impulsar los intercambios comerciales, tanto internos en el Municipio, como con otros espacios regionales, nacionales e internacionales; coadyuvar al aumento de la competitividad empresarial que se ubique en el Municipio. Hasta hace poco, los líderes municipales se concentraban en procurar puestos de trabajo, atraer inversiones y captar ayudas públicas. Hoy tienen que abocarse a mejorar la competitividad de las empresas locales —que son las que generan empleo productivo—, a la innovación tecnológica, la penetración de mercados exteriores y la capacitación de la mano de obra local. Hoy, las ciudades grandes y pequeñas son la clave de la riqueza económica y social de las Naciones. Las empresas buscan ubicaciones que les permitan obtener mejores condiciones de instalación, accesibilidad y funcionalidad, hechos que deben ser aprovechados e impulsados.
4.- Asimilar nuevas tecnologías en los Municipios para resolver los problemas sociales y promover oportunidades de trabajo para minorías y grupos marginales, formar y emancipar a los ciudadanos —darles poder político y económico—.
5.- Los Municipios son centros difusores de innovaciones; los nuestros deberán serlo. Hasta hace poco se pensaba que sólo en las grandes ciudades se realizaba la innovación tecnológica, basándose en razones tales como la disponibilidad de Mano de Obra calificada para la investigación, de centros universitarios y de investigación, de medios de transporte, proximidad al mercado, calidad de vida. Es decir, la llamada “economía de densidad” —gran demanda de bienes y servicios concentrada localmente—, todo lo cual influía para que aumentara la competitividad y, por tanto, la necesidad de los avances tecnológicos. No obstante, eso está dejando de ser válido exclusivamente para las grandes ciudades. Lo es también para las medianas ciudades —y, posiblemente, para las pequeñas— porque pueden estar bien equipadas, bien comunicadas, contar con Recursos Humanos emprendedores y con Recursos Humanos bien calificados. Al contar con eso, pueden integrarse en las redes internacionales donde se hace investigación, desarrollo y la transferencia tecnológica y se pueden transformar en ciudades inteligentes, con lo cual se coadyuva la dinámica económica, social y política de la ciudadanía.
6.- Es preciso impulsar la competitividad en el Municipio, la cual ya no depende de los recursos naturales o energéticos, de la base industrial tradicional, de la posición geográfica, de la acumulación de capital o de la voluntad política de un Estado protector. Ahora se basa en la productividad del territorio y, sobre todo, dependerá de:
Hacer eficiente el funcionamiento del sistema urbano – regional, con base, especialmente, en cuanto a la movilidad de los servicios básicos.
Insertarse en los sistemas de comunicaciones de carácter global y lograr que los agentes sociales y económicos obtengan buena información de los procesos mundiales.
El apoyo público a los agentes económicos y sociales por medio de políticas de naturaleza “incentivo exportador”, que favorezcan la sinergia económica y social y la innovación continua.
Instituciones políticas representativas, eficaces y transparentes que actúen según normas claras y estables en sus relaciones con los agentes privados.
La definición de un proyecto de ciudad y el “marketing” del mismo.
La gobernabilidad local basada en la cohesión social y la participación ciudadana.
En la medida que los Municipios se aboquen a impulsar estas funciones en sus espacios regionales, estarán creando las condiciones para que las empresas locales se dinamicen y se expandan generando fuentes de trabajo y, además, las externas a esos espacios funcionales, se articularán a ellos.
7.- El Municipio debe definirse como exitoso, para lo cual, debe ofrecer un nivel razonable de servicios públicos y estar en la condición de movilizar los recursos eficaz y permanentemente. Implica lograr estimular el desarrollo de la economía local, pues sin prosperidad económica, los Municipios no podrán asegurar permanentemente sus ingresos —y no podrán, por tanto, movilizarlos eficaz y permanentemente—.
8.- El Municipio y el desarrollo social esto incluye todas las facetas de la problemática social del Municipio, las cuales debe coordinar y articular armónicamente: educación y cultura, salud, definición de las condiciones de habitabilidad para la calidad humana, deporte, acciones comunitarias, la lucha contra la exclusión social y en pro de la integración social, velar por el patrimonio histórico y cultural del Municipio. Todas ellas constituyen fuentes directas e indirectas de trabajo y de calidad de vida para los ciudadanos. El Municipio deberá atender integralmente los siguientes aspectos:
•Crear, mantener y desarrollar las condiciones que garanticen el poder de los ciudadanos en el Municipio, como individuos y como entes sociales.
•Eliminar e impedir la exclusión social —"ghettos" tanto de sectores pobres, como de comunidades pudientes, que también los hay, como consecuencia de la inseguridad—.
•Establecer, desarrollar y mantener condiciones efectivas de igualdad de accesibilidad a la educación, a la cultura y al esparcimiento, en condiciones de excelencia, para todos los ciudadanos del Municipio, sin discriminación de condición social, raza, religión, origen nacional, de género o concepción política.
•Capacitar —directa e indirectamente— la fuerza laboral y gerencial del Municipio.
•Establecer una gama de opciones educativas, de capacitación y desarrollo de las capacidades humanas en el Municipio.
•Crear mecanismos para la atención a los hijos de trabajadores del Municipio.
•Establecer las condiciones y desarrollar mecanismos para eliminar el empleo informal y el desempleo abierto.
•Establecer el ambiente y las condiciones para reducir al máximo la pobreza reduciendo al máximo el carácter asistencialista público de la política social.
•Desarrollar condiciones y medios dirigidos a que la población recobre su sentido de pertenencia a la sociedad.
•Fortalecer y profundizar el proceso de descentralización hasta las comunidades en barrios y urbanizaciones del Municipio.
•Proteger a los grupos más vulnerables en el Municipio —madres lactantes, niños menores de 12 años y ancianos—.
•Desarrollar el ambiente necesario para consolidar la familia como epicentro del desarrollo social.
•Respetando los programas oficiales de Educación, transformar la educación como palanca para el desarrollo social y que se convierta en una práctica que se perfeccione a través de las generaciones y un elemento clave de la seguridad, de la sociedad y de la Nación; que todo adulto tenga, conserve y desarrolle los conocimientos necesarios para el nuevo mundo de la innovación tecnológica, la evolución cultural y superación humana.
•Transformar el sistema educativo en el Municipio para que el aprendizaje empiece desde los primeros días de vida, poniendo el énfasis no sólo en el preescolar y la educación básica sino, en la educación de la mujer como elemento clave para el desarrollo socioeducativo y dé paso a la diversidad y desarrollo de múltiples alternativas en las que se asuman los nuevos retos de la descentralización educativa.
•Crear, desarrollar y sostener condiciones para el fortalecimiento de los valores culturales en el Municipio, ante el reto de la globalización, sin perder la identidad local, regional y nacional.
•Involucrar positivamente a los medios de comunicación del Municipio en la educación, la cultura y en los programas de desarrollo social y crear un código de identidad ciudadana.
•Tomar acciones dirigidas a repotenciar y ampliar las plantas físicas para la educación en el Municipio.
9.- El Municipio y el desarrollo económico. El Municipio debe coordinar y articular armónicamente las actividades dirigidas a impulsar el desarrollo armónico de los distintos sectores económicos —industria, servicios, comercio, minería, agricultura, ganadería, pesca, turismo, finanzas, etc.—; la problemática de las PyME’s y su inserción en redes productivas; desarrollar y mantener sistemas de información de las variables económica de la localidad de la región, nacionales e internacionales, al servicio de las empresas privadas como acción de apoyo a ellas, impulsar y promocionar la actividad económica del Municipio. Atender e impulsar los aspectos relacionados con la integración económica local, estadal, nacional e internacional, donde la actividad económica del Municipio pueda y deba integrarse; y, así mismo, administrar coordinadamente las acciones relacionadas con las asociaciones económicas locales en el ámbito regional, nacional e internacional. Debe atender integralmente los siguientes aspectos:
•Garantizar la seguridad económica y garantizar la libertad de iniciativa económica en el Municipio.
•Establecer las condiciones y desarrollar mecanismos para eliminar el empleo informal —transformándola en formal donde sea posible— y el desempleo abierto que exista en el Municipio.
•Inducir el impulso de las inversiones privadas en innovaciones tecnológicas.
•Establecer y estimular condiciones para que la producción de bienes y servicios producidos en el Municipio puedan efectivamente penetrar mercados fuera del Municipio, en la región, en el país y en el exterior.
•Crear las condiciones que garanticen el poder de los consumidores en el Municipio e información para hacer transparentes los mercados.
•Impulsar la competencia y contrarrestar las tendencias monopólicas.
•Impulsar la capacitación permanente de la Mano de Obra local.
•Establecer las condiciones para la capacitación permanente de la Mano de Obra empleada, independientemente que sean asumidas por el Gobierno Nacional, las Gobernaciones, el Municipio, por el sector privado, o a través de formas cogestionarías, igualmente, con la Mano de Obra desempleada y de la futura Mano de Obra —jóvenes que estén próximos a ingresar en la condición de "población económicamente activa"—
•Establecimiento de condiciones y el ambiente adecuado para que las empresas instaladas y a instalarse en el Municipio tengan una formación continua apoyadas por centros de investigación y centros tecnológicos.
•Impulsar la investigación tecnológica al servicio de las empresas y actividades agrícolas, industriales, comerciales y de servicios en general.
•Promover el desarrollo económico sostenido y sustentable del Municipio.
•Impulsar y estimular la existencia y desarrollo de servicios productivos en el Municipio, tales como auditorias, consultorías en diversas especialidades, ingeniería, informática, reclutamiento de personal, consultoría jurídica, entre otras, en cantidad y calidad suficiente.
•Establecer y mantener el ambiente apropiado para el desarrollo económico y social en el Municipio.
•Crear las condiciones para que los factores directos —fuerza de trabajo y medios de producción, entre los cuales se pueden incluir tierra, energía, maquinaria y equipos, materias primas, tecnología existente, etc.— disponibles en el Municipio, tengan las condiciones requeridas para el desarrollo de la competitividad de las actividades económicas establecidas en el mismo e, igualmente, para los factores indirectos —costo de vida, calidad de vida, ambiente sociocultural, calidad del medio ambiente natural y del medio ambiente social, seguridad pública y ciudadana—.
10.- El Municipio y la seguridad pública y ciudadana. Aquí todas las facetas de la seguridad pública en el Municipio deben coordinar y articular armónicamente las siguientes actividades:
•Crear, desarrollar y mantener el sistema de seguridad e información del Municipio, que incluya los aspectos demográficos, sociales, económicos, geográficos e índices delictivos en el Municipio.
•Crear, mantener y desarrollar sistemas de inteligencia.
•Prevenir el delito, incluido el delito económico.
•Servicios de Policía y de seguridad del Municipio.
•Justicia de paz
•Prevención y protección vecinal
•Cooperar para garantizar la Seguridad Jurídica.
•Protección Civil y Bomberos.
Habrá que definir programas nacionales de salud pública; de desarrollo educacional diversificado; de salubridad; reglas e instrumentación de los sistemas de transporte y comunicaciones, de seguridad pública y saneamiento habitacional y de desarrollo de infraestructura, especialmente dirigida al medio rural y local, aunque diseñados y supervisados a nivel nacional, para ser ejecutados descentralizadamente en los ámbitos regional y local.
Diseñar y articular programas de corto plazo (coyuntural) de manera que quede claramente establecida la vinculación entre éstos y los de largo y mediano plazo. Esta articulación, básicamente, debe incluir el desarrollo de programas económicos de estímulo al impulso del desarrollo de la diversidad de segmentos de actividades en aquellas cadenas productivas donde tenemos condiciones más favorables para desarrollar ventajas competitivas sobre la base del aprovechamiento de las ventajas comparativas naturales. Estimulo a la agricultura y la agroindustria.
Así mismo, debe contemplarse un conjunto de subprogramas dirigidos a reciclar y potenciar la calidad y capacitación de la fuerza laboral —y, de ser necesario, incluir programas de inmigración selectiva de una región a otra—, de manera que buena parte de la misma pueda ser absorbida por esas actividades en proceso de desarrollo, en la medida en que sea desplazada de las tareas primarias de fortalecimiento y reforma de la actividad municipal y regional.
Todo esto pide definir los esquemas de financiamiento de los programas de coyuntura. Los programas enunciados presentan dos características claras:
a. Generan gran cantidad de trabajo productivo que constituye la clave para disminuir drásticamente el desempleo abierto y el empleo informal.
b. Requieren importantes cantidades de recursos financieros a ser aplicados por el Estado
—especialmente en su ámbito municipal—.
Se hará imprescindible tomar varias decisiones y acciones para lo cual se requiere de una profunda voluntad política de todos los actores de nuestra sociedad. Estamos reafirmando nuestro rol en el espacio de la acción política. En el Movimiento Republicano estamos cerca de los ciudadanos, conocemos sus necesidades y queremos excedernos en nuestras expectativas. En esta grave hora exigimos liderazgo de calidad y decisiones sobre el ejercicio mismo del poder.
*BIENESTAR EN LIBERTAD: UN PROYECTO PARA UN PAÍS DE ÉXITO.
REFLEXIÓN INICIAL.
El bienestar de la persona humana, la familia y -por tanto- la sociedad constituyen el objetivo de nuestro actuar. El fin de la acción política del Movimiento Republicano es la persona humana y su familia. El Estado es útil, pero no como un fin en sí mismo sino como el medio para facilitar las condiciones para que las personas y las familias logren un mayor bienestar.
Basados en nuestra ideología tenemos respuesta para cada uno de los problemas del país. Deberemos priorizar las acciones de gobierno, favoreciendo aquellas que puedan aumentar en el menor plazo posible el bienestar de todos los venezolanos y las que nos permitan cimentar la sostenibilidad de las medidas cuyos resultados se verán en el corto, mediano y largo plazo. Con eso en mente, presentamos a continuación los ejes de la acción de gobierno más importantes y las principales políticas públicas que impulsaremos como aporte a la plataforma de la Alianza Unitaria.
OPORTUNIDAD PARA TODOS.
Venezuela debe ser tierra de oportunidades para todos, sin discriminaciones ni privilegios. Todos deben tener, de una vez, oportunidad de un empleo productivo y de cambiar de empleo para lograr mejores condiciones económicas o de otra índole.
UN GOBIERNO PARA LA GENTE.
Los Venezolanos merecen y necesitan un Gobierno amigable. Un gobierno inclusivo quitará las limitaciones a la iniciativa privada y a la generación de empleos, respetará a las minorías y la libertad de expresión y fomentará el debate nacional con liderazgo y convicción.
LIBERTAD, RESPONSABILIDAD Y ORDEN.
El principal elemento de la libertad es la responsabilidad. El irrespeto a la vida y a la propiedad es incompatible con una vida ciudadana en libertad, libre de temores e inseguridad en las casas, las escuelas o las calles.
UN PAÍS DE PROPIETARIOS.
Venezuela debe ser un país de propietarios. Hoy, muchos venezolanos que solo son dueños de si mismos, de su salario y de algunos pocos ahorros. Hoy día, cada familia que lo desee y se esfuerce, debería ser dueña de su casa de habitación, del mobiliario hogareño, de una computadora y de un medio de transporte familiar. Además, los venezolanos podrían, si así lo deciden, ser dueños de una empresa de servicios, agricultura, industria o fondo de pensión e inversión; participar plena y dignamente de la economía nacional y no solo como asalariados. Se puede y se deben titular las tierras en zonas populares urbanas y de las zonas del campo. Todos los ciudadanos tendrán la oportunidad de participar de forma activa en el capital de muchas empresas y en las grandes obras de infraestructura, mediante la titularización, como dueños, en vez de meros espectadores.
UNA VENEZUELA RESPETADA, MODERNA Y VISIONARIA.
Hay que romper las cadenas de la ineptitud y la ineficacia _del presente y del pasado_ que le han puesto freno al desarrollo y la prosperidad nacional. Las acciones deben estar basadas en la participación e inclusión de los pobres que hoy están en la base de la pirámide de ingresos. La infraestructura de carreteras, puentes, represas, acueductos, electrificación, puertos marítimos y aeropuertos, transporte urbano, servicios básicos en salud y educación se han quedado rezagadas bajo los esquemas del estatismo inoperante. Es necesario dar un cambio radical y profundo para su rescate estructural y la construcción eficiente de nuevas obras.
BIENESTAR EN LIBERTAD: UN SUEÑO EN ACCIÓN.
“No hay viento favorable para quien no sabe a dónde ir”
Séneca.
La existencia de un proyecto de “Visión de País” que la ciudadanía haga suyo, que sea conocido y compartido, puede ser el punto de partida en respuesta a la necesidad de un Acuerdo Nacional que debe tomar la Nación para su recuperación, reconstrucción y reconciliación con plena realización política, social y económica. Como es bien sabido “visión” es la imagen vivida de una meta significativa, valiosa y ambiciosa, a ser alcanzada en un futuro cercano que se relaciona con el beneficiario (el ciudadano) y que, en buena medida, es mejor de lo que existe hoy. La visión es una representación de lo que se cree será el futuro. Es como una vista de la tierra prometida.
Un análisis de las demandas del entorno en lo político, social, laboral, económico, patrimonial, etc. es menester. Debemos esbozar un análisis por contraste de los resultados de hoy versus las demandas no satisfechas; La sociedad fue, es y será implacable cuando no se haya demostrado al menos la intención seria de encaminarse hacia los estándares requeridos en esos resultados.
Debemos ofrecer un programa de acción a partir de la visión del país que se requiere construir en el futuro. Un programa que nos involucre a todos, pues sus lineamientos permiten a los sectores, organizaciones y ciudadanos ubicarse en el, porque perciben que tienen allí un lugar, un papel, y saben cual es, que no es otro que, el país que todos queremos poner en marcha. Es inyectar un shock de optimismo y esperanza. Es un sueño en acción por una verdadera lucha frontal contra la pobreza, por la inclusión, la prosperidad y el bienestar del colectivo nacional.
En este sentido, esta lucha necesariamente implica erradicar el populismo, el clientelismo, el estatismo, y reivindicar la participación y el papel regulador del Estado. Tales políticas tienen que estar orientadas por algunas líneas de acción y para ello proponemos las siguientes:
•Luchar contra el desempleo abierto y el empleo informal, evitando el empleo improductivo.
•Dar soluciones de corto plazo al hambre y la miseria, evitando recurrir a programas de beneficencia pública y, en lugar de ello, formular verdaderos programas sociales, es decir, aquellos que en el corto plazo, estén signados por la lucha contra la miseria, eleven la calidad humana de los receptores de esos programas y los preparen para el trabajo productivo.
•Que los programas sociales, en sentido estricto, sean diseñado de tal forma que quienes reciban su beneficio, puedan retribuirlos en el menor lapso posible.
•Tomar medidas drásticas de orden social y público, en protección de todos los ciudadanos y, en especial, en los sectores más pobres, quienes deben ser liberados del azote de antisociales y tienen el derecho de contar con un hábitat transformado de calidad humana.
•Reorientar el Gasto Público, en función de crear el ambiente propicio para que se desarrolle la economía privada.
•Cambiar la concepción y orientación de política fiscal, atendiendo a la necesidad de coadyuvar a la reconstrucción del país sobre bases sostenibles y sustentables.
La clave para un progreso sostenido y sustentable, y alcanzar la prosperidad esta sobre estos cuatro principios transcendentes: Libertad, Igualdad de Oportunidades, Comunidad y Excelencia. Solo en un clima de Libertad y Democracia pueden desarrollarse a plenitud el conocimiento, la creatividad, la inventiva y el espíritu innovador indispensable para enfrentar con éxito los retos de una realidad nacional cada vez más exigente.
La pregunta es ¿cómo? La respuesta es obvia: sólo creando riqueza. Pero, ¿en qué consiste la riqueza? Los economistas la definen como el Producto Social, que significa mucho más que el mero producto material porque, para que éste logre ser riqueza económica, tiene, inevitablemente, que socializarse, vale decir, lograr que la Sociedad pueda efectivamente disponer de él. Eso, y sólo eso, es lo que se denomina Producto Nacional.
¿No es, acaso, la diversificación de la economía, la que crea más espacio para una mayor creación de Valor Agregado —Sueldos, Salarios y Ganancias—, con el desarrollo de segmentos de actividades económicas articuladas, con la efectiva capacidad de emplear trabajo y capital, como la condición de crear superlativa riqueza y, así, eliminar la pobreza? En el Movimiento Republicano estamos convencidos que ésta es la vía.
Cuantos más segmentos de actividades multisectoriales y subsectoriales articuladas se impulsen, la diversificación se difunde en extensión y profundidad, generando de manera exponencial empleo de capital y trabajo, es decir valor agregado y, en consecuencia, riqueza.
Hasta ahora no ha habido mayor desarrollo debido a un problema de orden filosófico: hemos preferido utilizar las divisas que obtenemos del petróleo para importar bienes, en lugar de asumir el reto de producirlos nacionalmente. Lo poco que producimos —y cada vez es menos— se limita al sector de "bienes de consumo" (alimentos, ropa, piezas, etcétera). Hemos descartado de plano la producción en los sectores de "bienes de capital" (motores, turbinas, transformadores, etcétera) y de "máquinas de herramienta" (tornos, dobladoras, cortadoras, fundidores, etcétera) a la espera de que surjan espontáneamente.
Habrá que crear un Consejo Nacional de Bienes de Capital. Hay que ver la gran cantidad de empleos que genera el sector de bienes de capital y maquinas de herramientas en la industria de bienes de consumo. Un bien de consumo se utiliza y desaparece; en cambio, un motor o un torno, diariamente produce nueva riqueza. Se trata de un tipo de inversión que no se pierde. La generación nacional de más y mejores máquinas provee al resto del sector industrial mayor capacidad de producción, lo cual lo convierte en un extraordinario multiplicador de la economía. La mejor manera de sembrar el petróleo.
El otro sector importante para el desarrollo nacional es el de las obras de infraestructura, que va íntimamente ligado a aquellos. Aparte de mejorar la calidad de vida de la población, las obras en viviendas, transporte y vialidad, ferrocarriles, carreteras, aeropuertos, canales y puertos y obras hidroeléctricas son grandes generadoras de empleo, con un gran efecto multiplicador en lo económico.
La fabricación de infraestructura es la actividad económica que más rápidamente genera demanda agregada de bienes, presionando a las fábricas de bienes de consumo, que se ven obligadas a aumentar y mejorar sus procesos de producción, para satisfacer la demanda y aumentar la productividad. Estas a su vez generan una presión sobre las industrias de bienes de capital, generándose así un entramado de empresas interdependientes, que crece y se amplía en la medida en que se incrementa la demanda y se hace más sofisticado el proceso productivo.
También hay una salida, en la apertura a empresas transnacionales como las llamadas “fabricas maquiladoras”, radicadas en áreas geográficas predeterminadas, con todos los incentivos fiscales que las hagan atractivas a la inversión extranjera y los necesarios controles del estado para su sana y humana implementación. No vemos ninguna razón para “ruborizarse”, si eso fuere necesario; lo importante es la lucha contra la pobreza y afianzar las bases de la prosperidad de la sociedad venezolana.
Venezuela coexistiendo con la comunidad mundial del Siglo XXI con equilibrada interrelación económica con los demás países, disfrutando de un clima de plena libertad, una democracia efectiva y una sociedad cohesionada, prósperamente rica, sana y abierta a las cambiantes realidades culturales y científicas.
¿Qué implica esta Visión? Es una compleja acción política, social, cultural, científica y económica. Pero, en el aspecto económico significa: una economía competitiva, altamente diversificada, con vocación exportadora y con presencia positiva en la globalización.
EL MUNICIPIO COMO PUNTO BÁSICO E IMPULSADOR
En tal sentido, consideramos necesario establecer un conjunto de programas articulados entre sí, con el mayor grado de sincronización posible. Con punto básico e impulsador en el ámbito municipal _principio fundamental de la descentralización y del poder local_ con esfuerzos dirigidos a:
1.- Mejorar las funciones municipales básicas: la hacienda y economía municipal, seguridad pública, servicios civiles —el Registro Civil y la ubicación ciudadana—servicios sociales —salud, vivienda, programas para la eliminación de la exclusión social (tipo ranchos)—, Catastro y Permisología, tránsito urbano — sistemas de transporte colectivos, rutas e infraestructura vial—salubridad, acueductos y energía eléctrica, logística municipal —abastecimiento urbano, mercados, red de información logística, servicios de apoyo al ciudadanos y a las empresas localizadas y a localizarse en el Municipio—. El abordaje de acciones de este tipo demanda mucho esfuerzo y trabajo, tanto en términos de la administración directa de las Alcaldías, como de las empresas y la comunidad del Municipio. Y constituyen fuentes de trabajo productivo.
2.- Aprovechar el “entorno” del Municipio, en su beneficio. Existen acontecimientos, procesos y agentes externos a él, que ejercen fuerte influencia sobre su futuro: innovaciones tecnológicas y movimientos socioculturales, que penetran y afectan al sistema urbano —sean o no deseables—. Esa afectación incide en la prosperidad y habitabilidad de su población. Se deben identificar los cambios en el entorno y sus previsibles ocurrencias, comprender y evaluar el impacto de esos cambios en el desarrollo urbano para usarlos en beneficio del Municipio.
3.- Convertir los retos en oportunidades para el desarrollo municipal: modernización de la Administración Pública Municipal como elemento clave para el progreso de las ciudades; aprovechar “la globalización”, para insertar a los municipios en ella; impulsar los intercambios comerciales, tanto internos en el Municipio, como con otros espacios regionales, nacionales e internacionales; coadyuvar al aumento de la competitividad empresarial que se ubique en el Municipio. Hasta hace poco, los líderes municipales se concentraban en procurar puestos de trabajo, atraer inversiones y captar ayudas públicas. Hoy tienen que abocarse a mejorar la competitividad de las empresas locales —que son las que generan empleo productivo—, a la innovación tecnológica, la penetración de mercados exteriores y la capacitación de la mano de obra local. Hoy, las ciudades grandes y pequeñas son la clave de la riqueza económica y social de las Naciones. Las empresas buscan ubicaciones que les permitan obtener mejores condiciones de instalación, accesibilidad y funcionalidad, hechos que deben ser aprovechados e impulsados.
4.- Asimilar nuevas tecnologías en los Municipios para resolver los problemas sociales y promover oportunidades de trabajo para minorías y grupos marginales, formar y emancipar a los ciudadanos —darles poder político y económico—.
5.- Los Municipios son centros difusores de innovaciones; los nuestros deberán serlo. Hasta hace poco se pensaba que sólo en las grandes ciudades se realizaba la innovación tecnológica, basándose en razones tales como la disponibilidad de Mano de Obra calificada para la investigación, de centros universitarios y de investigación, de medios de transporte, proximidad al mercado, calidad de vida. Es decir, la llamada “economía de densidad” —gran demanda de bienes y servicios concentrada localmente—, todo lo cual influía para que aumentara la competitividad y, por tanto, la necesidad de los avances tecnológicos. No obstante, eso está dejando de ser válido exclusivamente para las grandes ciudades. Lo es también para las medianas ciudades —y, posiblemente, para las pequeñas— porque pueden estar bien equipadas, bien comunicadas, contar con Recursos Humanos emprendedores y con Recursos Humanos bien calificados. Al contar con eso, pueden integrarse en las redes internacionales donde se hace investigación, desarrollo y la transferencia tecnológica y se pueden transformar en ciudades inteligentes, con lo cual se coadyuva la dinámica económica, social y política de la ciudadanía.
6.- Es preciso impulsar la competitividad en el Municipio, la cual ya no depende de los recursos naturales o energéticos, de la base industrial tradicional, de la posición geográfica, de la acumulación de capital o de la voluntad política de un Estado protector. Ahora se basa en la productividad del territorio y, sobre todo, dependerá de:
Hacer eficiente el funcionamiento del sistema urbano – regional, con base, especialmente, en cuanto a la movilidad de los servicios básicos.
Insertarse en los sistemas de comunicaciones de carácter global y lograr que los agentes sociales y económicos obtengan buena información de los procesos mundiales.
El apoyo público a los agentes económicos y sociales por medio de políticas de naturaleza “incentivo exportador”, que favorezcan la sinergia económica y social y la innovación continua.
Instituciones políticas representativas, eficaces y transparentes que actúen según normas claras y estables en sus relaciones con los agentes privados.
La definición de un proyecto de ciudad y el “marketing” del mismo.
La gobernabilidad local basada en la cohesión social y la participación ciudadana.
En la medida que los Municipios se aboquen a impulsar estas funciones en sus espacios regionales, estarán creando las condiciones para que las empresas locales se dinamicen y se expandan generando fuentes de trabajo y, además, las externas a esos espacios funcionales, se articularán a ellos.
7.- El Municipio debe definirse como exitoso, para lo cual, debe ofrecer un nivel razonable de servicios públicos y estar en la condición de movilizar los recursos eficaz y permanentemente. Implica lograr estimular el desarrollo de la economía local, pues sin prosperidad económica, los Municipios no podrán asegurar permanentemente sus ingresos —y no podrán, por tanto, movilizarlos eficaz y permanentemente—.
8.- El Municipio y el desarrollo social esto incluye todas las facetas de la problemática social del Municipio, las cuales debe coordinar y articular armónicamente: educación y cultura, salud, definición de las condiciones de habitabilidad para la calidad humana, deporte, acciones comunitarias, la lucha contra la exclusión social y en pro de la integración social, velar por el patrimonio histórico y cultural del Municipio. Todas ellas constituyen fuentes directas e indirectas de trabajo y de calidad de vida para los ciudadanos. El Municipio deberá atender integralmente los siguientes aspectos:
•Crear, mantener y desarrollar las condiciones que garanticen el poder de los ciudadanos en el Municipio, como individuos y como entes sociales.
•Eliminar e impedir la exclusión social —"ghettos" tanto de sectores pobres, como de comunidades pudientes, que también los hay, como consecuencia de la inseguridad—.
•Establecer, desarrollar y mantener condiciones efectivas de igualdad de accesibilidad a la educación, a la cultura y al esparcimiento, en condiciones de excelencia, para todos los ciudadanos del Municipio, sin discriminación de condición social, raza, religión, origen nacional, de género o concepción política.
•Capacitar —directa e indirectamente— la fuerza laboral y gerencial del Municipio.
•Establecer una gama de opciones educativas, de capacitación y desarrollo de las capacidades humanas en el Municipio.
•Crear mecanismos para la atención a los hijos de trabajadores del Municipio.
•Establecer las condiciones y desarrollar mecanismos para eliminar el empleo informal y el desempleo abierto.
•Establecer el ambiente y las condiciones para reducir al máximo la pobreza reduciendo al máximo el carácter asistencialista público de la política social.
•Desarrollar condiciones y medios dirigidos a que la población recobre su sentido de pertenencia a la sociedad.
•Fortalecer y profundizar el proceso de descentralización hasta las comunidades en barrios y urbanizaciones del Municipio.
•Proteger a los grupos más vulnerables en el Municipio —madres lactantes, niños menores de 12 años y ancianos—.
•Desarrollar el ambiente necesario para consolidar la familia como epicentro del desarrollo social.
•Respetando los programas oficiales de Educación, transformar la educación como palanca para el desarrollo social y que se convierta en una práctica que se perfeccione a través de las generaciones y un elemento clave de la seguridad, de la sociedad y de la Nación; que todo adulto tenga, conserve y desarrolle los conocimientos necesarios para el nuevo mundo de la innovación tecnológica, la evolución cultural y superación humana.
•Transformar el sistema educativo en el Municipio para que el aprendizaje empiece desde los primeros días de vida, poniendo el énfasis no sólo en el preescolar y la educación básica sino, en la educación de la mujer como elemento clave para el desarrollo socioeducativo y dé paso a la diversidad y desarrollo de múltiples alternativas en las que se asuman los nuevos retos de la descentralización educativa.
•Crear, desarrollar y sostener condiciones para el fortalecimiento de los valores culturales en el Municipio, ante el reto de la globalización, sin perder la identidad local, regional y nacional.
•Involucrar positivamente a los medios de comunicación del Municipio en la educación, la cultura y en los programas de desarrollo social y crear un código de identidad ciudadana.
•Tomar acciones dirigidas a repotenciar y ampliar las plantas físicas para la educación en el Municipio.
9.- El Municipio y el desarrollo económico. El Municipio debe coordinar y articular armónicamente las actividades dirigidas a impulsar el desarrollo armónico de los distintos sectores económicos —industria, servicios, comercio, minería, agricultura, ganadería, pesca, turismo, finanzas, etc.—; la problemática de las PyME’s y su inserción en redes productivas; desarrollar y mantener sistemas de información de las variables económica de la localidad de la región, nacionales e internacionales, al servicio de las empresas privadas como acción de apoyo a ellas, impulsar y promocionar la actividad económica del Municipio. Atender e impulsar los aspectos relacionados con la integración económica local, estadal, nacional e internacional, donde la actividad económica del Municipio pueda y deba integrarse; y, así mismo, administrar coordinadamente las acciones relacionadas con las asociaciones económicas locales en el ámbito regional, nacional e internacional. Debe atender integralmente los siguientes aspectos:
•Garantizar la seguridad económica y garantizar la libertad de iniciativa económica en el Municipio.
•Establecer las condiciones y desarrollar mecanismos para eliminar el empleo informal —transformándola en formal donde sea posible— y el desempleo abierto que exista en el Municipio.
•Inducir el impulso de las inversiones privadas en innovaciones tecnológicas.
•Establecer y estimular condiciones para que la producción de bienes y servicios producidos en el Municipio puedan efectivamente penetrar mercados fuera del Municipio, en la región, en el país y en el exterior.
•Crear las condiciones que garanticen el poder de los consumidores en el Municipio e información para hacer transparentes los mercados.
•Impulsar la competencia y contrarrestar las tendencias monopólicas.
•Impulsar la capacitación permanente de la Mano de Obra local.
•Establecer las condiciones para la capacitación permanente de la Mano de Obra empleada, independientemente que sean asumidas por el Gobierno Nacional, las Gobernaciones, el Municipio, por el sector privado, o a través de formas cogestionarías, igualmente, con la Mano de Obra desempleada y de la futura Mano de Obra —jóvenes que estén próximos a ingresar en la condición de "población económicamente activa"—
•Establecimiento de condiciones y el ambiente adecuado para que las empresas instaladas y a instalarse en el Municipio tengan una formación continua apoyadas por centros de investigación y centros tecnológicos.
•Impulsar la investigación tecnológica al servicio de las empresas y actividades agrícolas, industriales, comerciales y de servicios en general.
•Promover el desarrollo económico sostenido y sustentable del Municipio.
•Impulsar y estimular la existencia y desarrollo de servicios productivos en el Municipio, tales como auditorias, consultorías en diversas especialidades, ingeniería, informática, reclutamiento de personal, consultoría jurídica, entre otras, en cantidad y calidad suficiente.
•Establecer y mantener el ambiente apropiado para el desarrollo económico y social en el Municipio.
•Crear las condiciones para que los factores directos —fuerza de trabajo y medios de producción, entre los cuales se pueden incluir tierra, energía, maquinaria y equipos, materias primas, tecnología existente, etc.— disponibles en el Municipio, tengan las condiciones requeridas para el desarrollo de la competitividad de las actividades económicas establecidas en el mismo e, igualmente, para los factores indirectos —costo de vida, calidad de vida, ambiente sociocultural, calidad del medio ambiente natural y del medio ambiente social, seguridad pública y ciudadana—.
10.- El Municipio y la seguridad pública y ciudadana. Aquí todas las facetas de la seguridad pública en el Municipio deben coordinar y articular armónicamente las siguientes actividades:
•Crear, desarrollar y mantener el sistema de seguridad e información del Municipio, que incluya los aspectos demográficos, sociales, económicos, geográficos e índices delictivos en el Municipio.
•Crear, mantener y desarrollar sistemas de inteligencia.
•Prevenir el delito, incluido el delito económico.
•Servicios de Policía y de seguridad del Municipio.
•Justicia de paz
•Prevención y protección vecinal
•Cooperar para garantizar la Seguridad Jurídica.
•Protección Civil y Bomberos.
Habrá que definir programas nacionales de salud pública; de desarrollo educacional diversificado; de salubridad; reglas e instrumentación de los sistemas de transporte y comunicaciones, de seguridad pública y saneamiento habitacional y de desarrollo de infraestructura, especialmente dirigida al medio rural y local, aunque diseñados y supervisados a nivel nacional, para ser ejecutados descentralizadamente en los ámbitos regional y local.
Diseñar y articular programas de corto plazo (coyuntural) de manera que quede claramente establecida la vinculación entre éstos y los de largo y mediano plazo. Esta articulación, básicamente, debe incluir el desarrollo de programas económicos de estímulo al impulso del desarrollo de la diversidad de segmentos de actividades en aquellas cadenas productivas donde tenemos condiciones más favorables para desarrollar ventajas competitivas sobre la base del aprovechamiento de las ventajas comparativas naturales. Estimulo a la agricultura y la agroindustria.
Así mismo, debe contemplarse un conjunto de subprogramas dirigidos a reciclar y potenciar la calidad y capacitación de la fuerza laboral —y, de ser necesario, incluir programas de inmigración selectiva de una región a otra—, de manera que buena parte de la misma pueda ser absorbida por esas actividades en proceso de desarrollo, en la medida en que sea desplazada de las tareas primarias de fortalecimiento y reforma de la actividad municipal y regional.
Todo esto pide definir los esquemas de financiamiento de los programas de coyuntura. Los programas enunciados presentan dos características claras:
a. Generan gran cantidad de trabajo productivo que constituye la clave para disminuir drásticamente el desempleo abierto y el empleo informal.
b. Requieren importantes cantidades de recursos financieros a ser aplicados por el Estado
—especialmente en su ámbito municipal—.
Se hará imprescindible tomar varias decisiones y acciones para lo cual se requiere de una profunda voluntad política de todos los actores de nuestra sociedad. Estamos reafirmando nuestro rol en el espacio de la acción política. En el Movimiento Republicano estamos cerca de los ciudadanos, conocemos sus necesidades y queremos excedernos en nuestras expectativas. En esta grave hora exigimos liderazgo de calidad y decisiones sobre el ejercicio mismo del poder.
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