*NOTICIA EN EL NACIONAL DE VENEZUELA: “CRÍTICAS DE RAMOS ALLUP TERMINAN DE DISTANCIAR A AD Y EL PSOE”
El Nacional
Debido a una entrevista en la que el dirigente critica al partido de Gobierno español, se suspendió la colaboración académica entre ambas agrupaciones Estrechos aliados durante décadas, Acción Democrática y el Partido Socialista Obrero Español PSOE) no tienen ya nada en común. Hoy, las relaciones entre ambas agrupaciones “son inexistentes”, en palabras de Henry Ramos Allup, secretario general de AD. A principios de mes, el líder adeco no sólo dio por terminado el vínculo en declaraciones al diario La Vanguardia, sino que acusó al embajador español en Venezuela, Raúl Morodo, de actuar como intermediario de Chávez ante la oposición venezolana y tratar de influir a AD para que el MVR ingresara en la Internacional Socialista.
La entrevista tuvo consecuencias en España. Luego de su publicación, el 7 de diciembre, la Fundación Pablo Iglesias, del PSOE, decidió no incluir a jóvenes adecos en su Máster de Liderazgo y Comunicación Política.
En un correo electrónico, la encargada del proyecto, Elena Flores, lamenta la situación y señala que las declaraciones de Ramos Allup “han sido el detonante para dar por zanjada la colaboración con AD”. Y agrega:
“Los problemas entre los dos partidos deberían haberse resuelto en conversaciones privadas pero nunca en la prensa”.
Ramos Allup dijo a La Vanguardia:
“El MVR no ha entrado en la Internacional Socialista porque AD lo vetaba y lo veta. Morodo parece un emisario más de Chávez para actuar como quintacolumnista o como avanzada frente a AD y la oposición. Lo vetamos porque el MVR no es socialista, sí lo es un militarismo fascista latinoamericano, con ingredientes populistas”.
El dirigente reiteró sus apreciaciones a El Nacional, y recordó que el desencuentro comenzó con una reunión en la casa de Morodo a la que asistieron Guillermo Galeote y Elena Flores, el presidente de AD, Jesús Méndez Quijada; el vicepresidente del partido, Víctor Bolívar, y el secretario de Asuntos Internacionales, Alfredo Coronil.
Ramos relató que los adecos plantearon su desacuerdo con la visita de Rodríguez Zapatero, por creer que fortalecería a Chávez y criticaron que privaran los intereses económicos. Una vez que el mandatario español vino a Venezuela, en marzo pasado, los adecos esperaban reunirse con él en privado, pero la reunión que se organizó incluyó a todos los representantes de la oposición.
Otro asunto que los irritó fue que el embajador español intentara que ellos dialogaran con el Presidente, ofreciéndose a gestionar la cita. “Me dijo que tenía que entenderme con Chávez y que él podía solicitar una audiencia para que me recibiera. Le corté y le dije que no necesitaba intermediarios.
Nunca hemos querido hablar con Chávez, ni en público ni en privado”, señaló a La Vanguardia.
Ramos opinó ayer que algunos partidos afiliados a la IS que ejercen el poder en sus países, “parecen más interesados en defender los intereses económicos de su gobierno que los principios de la social democracia internacional”.
Agregó que esto es lo que actualmente ocurre con los gobiernos de España y el de Hugo Chávez.
“Nos parece ruin que por los intereses económicos de España, por el empleo de 600 personas en los astilleros en Galicia –que estaban casi paralizados– se ponga en riesgo la democracia venezolana y el bienestar de alrededor de 500 mil españoles que viven en Venezuela”, afirmó.
El Nacional
Debido a una entrevista en la que el dirigente critica al partido de Gobierno español, se suspendió la colaboración académica entre ambas agrupaciones Estrechos aliados durante décadas, Acción Democrática y el Partido Socialista Obrero Español PSOE) no tienen ya nada en común. Hoy, las relaciones entre ambas agrupaciones “son inexistentes”, en palabras de Henry Ramos Allup, secretario general de AD. A principios de mes, el líder adeco no sólo dio por terminado el vínculo en declaraciones al diario La Vanguardia, sino que acusó al embajador español en Venezuela, Raúl Morodo, de actuar como intermediario de Chávez ante la oposición venezolana y tratar de influir a AD para que el MVR ingresara en la Internacional Socialista.
La entrevista tuvo consecuencias en España. Luego de su publicación, el 7 de diciembre, la Fundación Pablo Iglesias, del PSOE, decidió no incluir a jóvenes adecos en su Máster de Liderazgo y Comunicación Política.
En un correo electrónico, la encargada del proyecto, Elena Flores, lamenta la situación y señala que las declaraciones de Ramos Allup “han sido el detonante para dar por zanjada la colaboración con AD”. Y agrega:
“Los problemas entre los dos partidos deberían haberse resuelto en conversaciones privadas pero nunca en la prensa”.
Ramos Allup dijo a La Vanguardia:
“El MVR no ha entrado en la Internacional Socialista porque AD lo vetaba y lo veta. Morodo parece un emisario más de Chávez para actuar como quintacolumnista o como avanzada frente a AD y la oposición. Lo vetamos porque el MVR no es socialista, sí lo es un militarismo fascista latinoamericano, con ingredientes populistas”.
El dirigente reiteró sus apreciaciones a El Nacional, y recordó que el desencuentro comenzó con una reunión en la casa de Morodo a la que asistieron Guillermo Galeote y Elena Flores, el presidente de AD, Jesús Méndez Quijada; el vicepresidente del partido, Víctor Bolívar, y el secretario de Asuntos Internacionales, Alfredo Coronil.
Ramos relató que los adecos plantearon su desacuerdo con la visita de Rodríguez Zapatero, por creer que fortalecería a Chávez y criticaron que privaran los intereses económicos. Una vez que el mandatario español vino a Venezuela, en marzo pasado, los adecos esperaban reunirse con él en privado, pero la reunión que se organizó incluyó a todos los representantes de la oposición.
Otro asunto que los irritó fue que el embajador español intentara que ellos dialogaran con el Presidente, ofreciéndose a gestionar la cita. “Me dijo que tenía que entenderme con Chávez y que él podía solicitar una audiencia para que me recibiera. Le corté y le dije que no necesitaba intermediarios.
Nunca hemos querido hablar con Chávez, ni en público ni en privado”, señaló a La Vanguardia.
Ramos opinó ayer que algunos partidos afiliados a la IS que ejercen el poder en sus países, “parecen más interesados en defender los intereses económicos de su gobierno que los principios de la social democracia internacional”.
Agregó que esto es lo que actualmente ocurre con los gobiernos de España y el de Hugo Chávez.
“Nos parece ruin que por los intereses económicos de España, por el empleo de 600 personas en los astilleros en Galicia –que estaban casi paralizados– se ponga en riesgo la democracia venezolana y el bienestar de alrededor de 500 mil españoles que viven en Venezuela”, afirmó.
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