“La vida es un montón de insignificantes e irónicas ruinas”. Erique Jardiel Poncela (1901 – 1952). Escritor y dramaturgo español.
JOSÉ “CHEO” SALAZAR |
Uno
no duda de las buenas intenciones de quienes intentan concretar obras de
beneficio colectivo. Empero, hay que entender, que detrás de esas buenas
intenciones, pareciera, se esconden grandes desviaciones, improvisaciones y una
buena dosis de corrupción. En la Mesa de Guanipa, hay ejemplos, que dejan muy
claro estas presunciones y los cuales pueden ser comprobadas, por oficialistas
y opositores, con sólo acercarse a ellas. Están a la vista.
En
la zona del Caris, instalaron una huevera con 8 galpones, los cuales
albergarían c/u 8 mil gallinas ponedoras. Arrancó a medio tren, salían camiones
cargados para diferentes partes del país, atendía el mercado local y también
les vendían a los vecinos, que se acercaban a sus instalaciones, a precios
solidarios. Las cosas buenas duran muy poco y como lo que es de todos no es de
nadie, la producción se vino a pique. Los trabajadores salieron a protestar y
en una alocución presidencial, el Presidente Maduro, entregó los recursos al
gobernador Istúriz para que la reactivara y vociferó “Huevos para todo el
mundo”. Flor de un día. De 8 galpones apenas funciona 1 a duras penas y la
planta se deteriora a paso de vencedores. Está a la vista
El
Complejo Agroindustrial de la Soya “Abreu de Lima”, que fue inaugurado por el
“Mitómano eterno”, en las adyacencias de la carretera a Paríaguan y que contó
con la presencia del entonces Presidente de Brasil, Lula Da Silva, es otro
sueño frustrado. Varios pivotes centrales abandonados, la siembra de la Soya es
ínfima y lo que se ve a lo lejos es una siembra de Girasol. Ese proyecto mil
millonario, que incluía, de acuerdo a la propaganda oficial, una gran cantidad
de vivienda para los trabajadores, pareciera, no le duele a nadie. El abandono
es evidente. Está a la vista.
El
modelaje de no se hizo esperar. La gobernación del estado, que presidió el Dr.
Saab, construyó un monumento, en memoria de los caídos en la llamada “Masacre
de Cantaura”, en la corta autopista que arranca de Cantaura y cuya construcción
fue abandonó en el cruce de la Madama. Nunca lo han inaugurado y está
abandonado. El que se pare en ese sitio con esta inseguridad, corre el riesgo
de que lo pasen a mejor vida. Y el día que lo inauguren oficialmente, deberían
traer y nombrar orador de orden, al flamante diputado revolucionario, chavista
y humanista Gral. ® Roger Cordero Lara, que conoce tan bien esa historia, como
el otrora defensor de los Derechos Humanos el ex gobernador Saab. Está a la
vista.
El
anterior alcalde del municipio Simón Rodríguez, no se quedó atrás y tiene una
gran cantidad de ruinas revolucionarias, empezando por el parque automotor del
Aseo Urbano Domiciliario y Obras Públicas Municipales, el supuesto mercado de
los pequeños comerciantes, la batea de la entrada norte, El Mercado Campesino,
el Complejo Deportivo en la entrada de los Chaguaramos y la “”Inversión” que
hizo en una vieja edificación de la Urb. Los Ríos, dónde supuestamente,
funcionaría la Aldea Universitaria. En fin, son ruinas de la revolución, que
afectaron gravemente el patrimonio público Y…no hay quien responda por ese
montón de ruinas, porque en revolución, funciona perfectamente, la impunidad
automática. Están a la vista, las ruinas de la revolución. El que tiene ojos
ve.
José “Cheo” Salazar
sjose307@gmail.com
@Cheotigre
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