Hijos del mismo padre lucían siameses, pero
el 14 de abril los deslindó.
Hay un valioso material académico y
periodístico sobre causas, métodos y fines del chavecismo que aglutinó en una
figura sobrevenida las reacciones inmediatas contra la decadencia y fracasos
parciales del sistema democrático.
Confiado en la entrada petrolera, aquel
republicanismo se resistió a los urgentes cambios internos y externos
necesarios de toda viva sociedad, a medida que crece.
En sus cuarenta años
acumuló grandes aciertos que hoy en parte cosechamos, pero su aparato conductor
desestimó los continuos avisos de alarma que pedían mayor y más rápida
descentralización, relevo generacional de su dirigencia, entre otras enmiendas
esenciales.
La terca tribu cogollista de los partidos políticos con su herencia
provinciana del caudillaje regional propició el estallido de un peligro siempre
latente en el devenir histórico venezolano. Un militarismo fascista, derecha
extrema, monstruo latente que el estadista fundacional Rómulo Betancourt supo
calibrar a fondo y detener constitucionalmente para beneficio nacional y continental.
De aquel polvo vino el lodo de un carisma
individual castrense, con gancho populista impulsivo, llamado revolución, foco
de esperanza redentora para tantos relegados del anterior régimen ahora
lubricado por la inmensa riqueza mineral regalada en "damecracia",
sin control ético ni administrativo
Pero el supuesto remedio demagógico y
militarista forjó su propio parásito letal. Este "mientras tanto"
pone en evidencia definitiva el criminal oportunismo crónico y fracasado de la
llamada izquierda venezolana, igual en subversión, disidencia y gobierno. Se
llama chavismo. Son mochos que se juntan para rascarse amoralmente en cada
chance, incluido el vergonzoso bochinche funerario.
Definidos por la sabia
gracia popular como "enchufados", en ellos agoniza un frágil
madurismo que aglutina: fundadores y súbditos de su modelo castrocomunista,
gorilato de la Fuerza Armada chavecista, psicopatía endógena de resentidos
incurables bien pagados y la viveza muy criolla de una nueva oligarquía
cívico-militar burguesa, local y foránea, repleta de billete revolucionario.
Manipuladores del bravo, creyente y genuino pueblo chavecista, ya huérfano. Al
centro mismo yace una pobrecía dependiente, esclava, miedosa del Estado junto a
las clases medias en vías de extinción.
Arriba, sin pies de barro, emerge un
liderazgo civilista, paciente y decente. Equipo con rostro visible y cerebro
grupal. Capaz y obligado a la renovación de este país que otra vez exige
cambios a tiempo.
alifrei@ hotmail.com
EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA,CONTENIDO NOTICIOSO,
No hay comentarios :
Publicar un comentario
Comentario: Firmar con su correo electrónico debajo del texto de su comentario para mantener contacto con usted. Los anónimos no serán aceptados. Serán borrados los comentarios que escondan publicidad spam. Los comentarios que no firmen autoría serán borrados.