Sucedió lo inevitable a pesar del hermetismo
y de la trama novelesca que montarón los acolitos seguidores del expresidente
finado teniente coronel Chávez. Ya no podían seguir escondiendo la verdad,
además los apagones y caida de la nergía eléctrica los tenían al
descubierto. Recordemos lo que dijo
Abraham Lincoln, al pueblo se le puede engañar un tiempo, durante algún tiempo,
pero al pueblo no se le puede engañar todo el tiempo, y a pesar de montar esa
trama que compitió con la novela más famosa de la radio en Venezuela como
fue
El Derecho de Nacer, sus guionistas
y directores desde Cuba, seguidos por esos intemperantes de aquí en Venezuela,
encabezados por Maduro, Jaua y Cabello, tenían que afrontar la realidad ante la
irreversibilidad de esa enfermedad terminal
que padecia el teniente coronel.
No podían seguir jugando con ese sector del
pueblo que infaustamente se consideraba redimido ante el encantador de
serpiente, por ese reparto de migajas producto de las distintas misiones, que
sirvieron para esconder el extravio de
más de un billón de dólares que se desaparecieron por los caminos rojos
de la robolución, lo que nos indica el comportamiento soez del embaucador de
sabaneta, al frente de los destinos públicos de Venezuela, que cuando se haga
un estudio serio de su paso desordenado tratando de refundar la patria y
convertirla en una patria socialista, se podra apreciar la ruindad tautologica
del finado teniente coronel.
Ya estamos viendo, que a pesar de la trama
y pretender esconder la realidad hay que
afrontar lo acontecido, Inevitablemente e irremediablemente el arcano de los
tiempos cobró su mesada, a aquel que apostó a la muerte, recuerden el lema
"patria, socialismo o muerte", no pudo refundar la patria, ni imponer
el socialismo, pero como apuesta es apuesta el apostó a la muerte y ganó su
apuesta, se jugó a Rosalinda y el dado en la noche linda le devolvió sus
corotos, razón por la cual pasó a esa
dimensión desconocida para quienes seguimos pisando tierra de manera vertical,
mientras el se ganó como destino su cajón de pino, el cual será la antesala de
sus seguidores que lo visitaran para contar las prebendas obtenidas durante
esta gestión traumatica para Venezuela y para sus ciudadanos.
Ahora vendrán las excusas y lamentos,
esperemos lo van a decir los adlateres del Tribunal Supremo de Justicia.
quienes en ningún momento se portaron a la altura de las circunstancias, y a
pesar de lo complicado del estado de salud del finado, el 10 de Enero de 2013,
desconocieron la constitución de la república de Venezuela y dieron un golpe de
estado imponiendo al usurpador Maduro. En ellos no privó la racionalidad de
aceptar el mal estado de salud, tal como lo reconoció el teniente
coronel el 8 de diciembre de 2012, en el cual fue si acaso, el único acto de
sinceridad en su accidentada vida, sino el morbido deseo de la perpetuidad en
el poder, considerando que Venezuela es su botija para usufructuarla, y a pesar de las exigencias de muchas personas
acerca de la necesidad de comprobar el estado de salud del finado teniente
coronel, aseguraron al igual que el teniente Cabello, en una histrionica
función de circo asumida en la asamblea nacional, que gozaba de inmejorables condiciones
físicas, cuestión que se pudo comprobar hoy 5 de marzo cuando han anunciado
lo definitivo.
Ahora vamos a tener golpes de pecho a granel
y excusas por millares, Veamos a partir de hoy los partes de la dirigencia de
quienes integran el PSUV, de quienes se
abrogan ser los sucesores del teniente coronel, especialmente del ministro
Villegas, quien de una manera taimada daba los partes oficiales acomodaticios
según los intereses del regimen, por un lado para ellos preparar las
circunstancias que le permitieran al inMaduro posicionarse ante el pueblo
venezolano a fin de venderse como el sucesor del teniente coronel, y por
otra parte para sembrar esperanzas en aquellos, que
consideraban al teniente coronel un mesias, por el hecho de dotarlos de una
pensión a través de una misión,sin
prestar un beneficio al estado, creando de la manera más perversa una masa de
indigentes que se lucran de la ubre manantial del estado, de una manera
parasitaria, ya que en vez de enseñarles a pescar para obtener un oficio
perdurable y que les sirviese para
ganarse el sustento, se les induce
a la flojera perversa a tender la mano como
cualquier pedigueño, en la que no hay sentido de pertinencia y pertenencia por
mejorar nuestros niveles de creatividad para optimizar el trabajo y desarrollo
del país.
Afrontemos la realidad, debemos pasar esta
oscura página en la historia de Venezuela, Ya el teniente coronel se fue a otra
dimensión en la cual seguro a lo mejor fue a encontrarse con Franklyn Brito y
con los muertos de la avenida Baralt, masacrados por sus seguidores de Puente
Llaguno y con los cientos de miles que han
sucumbido por la inseguridad que impuso como política de estado. A lo mejor se están sincerando, redimiendo, o
pidiendo cuentas, no lo sabemos, pero lo veraz es que no pueden seguir
engañando al pueblo, ya que todos los doctores de medicina, como Oleta,
Marquina, Orihuela y otros basandose en estudios explicaban lo crudo y rudo de
la enfermedad padecida, que no era vista de la misma manera por quienes
disfrutan del saqueo a la Venezuela actual. Y por no aceptar la realidad, así
como por el odio generado por esa división impuesta durante estos catorce años,
pretendían esconder una verdad del tamaño de una catedral o del iceberg que
chocó con el Titanic, que hoy los puso al descubierto.
Una nueva pagina se empieza a escribir a
partir de ahora y el pueblo, la
ciudadanía, debe sopesar lo acontecido y darse cuenta de la realidad vivida, de
las tramas y recovecos utilizados para esconder la verdad por el propio
teniente coronel, quien se presentó a una elecciones asegurando que gozaba de
buena salud, conciendo él su propia verdad que hoy es del dominio público al
pasar a pertenecer al mundo de los muertos. Se debe seguir confiando en ese
tipo de gentes, es en esa gente que
después que me mintieron durante tanto tiempo, a la cual yo les debo depositar
nuevamente mi confianza. No debo hacer una catarsis y afrontar la realidad,
quien miente una vez miente todas las veces que pueda para lograr sus objetivos
y Venezuela necesita en estos momentos de gente que le hable claro y no le siga
mintiendo ni proponiendo paquetes rojos que le desvalorizan su salario y su
vida.
rubencontrerasg@gmail.com
¿Fue un error de imprenta escribir "5 de febrero" o este artículo es viejo?
ResponderEliminarEvidentemente fue un error de imprenta que ya ha sido corregido
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