La riqueza fácil y abundante ha sido un sueño de muchas personas. En el siglo XVI los europeos que llegaron a América ávidos de encontrar tesoros escucharon historias de un sitio mítico donde un rey se bañaba en una piscina de polvo de oro. Todo parece indicar que la historia la inventaron los indios para ver si los europeos los dejaban en paz o al menos los permitían seguir vivos. Muchos murieron en busca de ese legendario lugar.
En nuestro país tal parece que muchos siguen buscando a El Dorado ahora representado por una riqueza petrolera que le pertenece a cada venezolano y que pareciera que nos va a resolver todos nuestros problemas económicos cuando la encontremos.
La leyenda de El Dorado Petrolero ha sido alimentada por políticos de todas las corrientes e incluso académicos hablan alegremente de cantidades grandiosas de riqueza que se han despilfarrado o robado y que debemos rescatar para convertirnos en una gran superpotencia de rango mundial. ¿Pero cuales son las cifras de este fabuloso botín?
Actualmente se dice que las empresas petroleras en Venezuela exportan aproximadamente 1,8 millones de barriles de petróleo por día (MBD). Se dice que solo cobramos alrededor de 1,2 MBD porque el resto es financiado (regalado) a países satélites o dependientes. Para simplificar digamos que cobramos 1,5 MBD. El precio de la cesta de petróleo venezolano oscila actualmente alrededor de 80 dólares por barril. Esto representa un ingreso de 120 millones de dólares diarios. Si asumimos una población de 30 millones de habitantes nos tocan 4 dólares diarios a cada venezolano.
Puede uno esperar salud, educación, vivienda, transporte, seguridad social etc., etc., con un ingreso diario de 4 dólares? Entonces parece que El Dorado Petrolero realmente no existe. Si como los indios ahuyentaron a los europeos con ese mito, parece que los políticos confundieron a los venezolanos con la promesa de “pronto” devolverles lo que se robaron los gobernantes del periodo anterior. De esa forma se echo al traste con el sistema democrático porque se necesitaba que un vengador nos llevara a ese paraíso petrolero. Ahora se repite que si este régimen no hubiera despilfarrado o robado los miles de millones de recursos que entraron por las exportaciones petroleras entonces ya seriamos la potencia que merecemos ser. Esto no fue verdad antes y no lo es ahora.
No cambiemos sistemas pensando que el nuevo gobierno nos llevara a El Dorado Petrolero. No existe. Busquemos el progreso por medio del trabajo y elijamos a un sistema político que no se entrometa en nuestras vidas a cambio de un barril y nos deje trabajar para alcanzar el desarrollo que otras sociedad han logrado con esfuerzo y dedicación.
Gilberto Morillo
gilbertomorillo@yahoo.comEL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA
GENIAL
ResponderEliminarExcelente
ResponderEliminarExcelente
ResponderEliminar