BIENVENIDOS AMIGOS PUES OTRA VENEZUELA ES POSIBLE. LUCHEMOS POR LA DEMOCRACIA LIBERAL

LA LIBERTAD, SANCHO, ES UNO DE LOS MÁS PRECIOSOS DONES QUE A LOS HOMBRES DIERON LOS CIELOS; CON ELLA NO PUEDEN IGUALARSE LOS TESOROS QUE ENCIERRAN LA TIERRA Y EL MAR: POR LA LIBERTAD, ASÍ COMO POR LA HONRA, SE PUEDE Y DEBE AVENTURAR LA VIDA. (MIGUEL DE CERVANTES SAAVEDRA) ¡VENEZUELA SOMOS TODOS! NO DEFENDEMOS POSICIONES PARTIDISTAS. ESTAMOS CON LA AUTENTICA UNIDAD DE LA ALTERNATIVA DEMOCRATICA

martes, 30 de septiembre de 2014

NELSON ACOSTA ESPINOZA, ¿DE REGRESO A LA POLÍTICA?,

Si, amigo lector, la política comienza a prevalecer y a imponer su lógica en el país. Desde luego, usted puede legítimamente formularse las siguientes interrogantes ¿a qué se refiere esta afirmación? ¿Acaso, esta actividad no ha estado presente en nuestra cotidianeidad a lo largo de estos años de revolución? 

Bien, lo que intentamos resaltar es que la práctica autoritaria que caracteriza al  socialismo del siglo XXI comienza a mostrar profundas grietas. Lo que significa, entonces,  que se está abriendo paulatinamente un espacio para el ejercicio de la política democrática. Entendida esta actividad como la búsqueda negociada de los acuerdos que implica la existencia de variedad en las ideas y posiciones en torno a los dilemas que enfrenta la nación. Es en este sentido que afirmamos que la política y su lógica democrática retornan.

Ahora bien, es importante iniciar un intercambio de ideas con la finalidad  de discutir sobre la forma más adecuada de procesar este agotamiento. Es imprescindible prestar atención, por ejemplo, a la dimensión intelectual que debe alimentar  la práctica política. En consecuencia, resultaría conveniente saber diferenciar sus aspectos tácticos de los estratégicos. En otras palabras, no ceder a la tentación de confundir los primeros con los segundos. La estrategia, como es sabido,  constituye el dominio de los dirigentes, mientras que la táctica es el quehacer de los políticos de coyunturas. El estratega se preocupa por la historia; el táctico por las cámaras y los titulares y, en todo caso, por los votos que cámaras y titulares pudiera inducir.

Es bueno, señalarlo. La cultura prevaleciente en el período democrático privilegiaba los aspectos relacionados con el inmediatismo político. Cero consideraciones sobre el horizonte estratégico. Este se encontraba, por así decirlo,  previamente definido (Pacto de Punto Fijo). Esta ceguera impidió a los actores políticos de la época avizorar la crisis que se avecinaba y, en consecuencia, renovar su apuesta estratégica. En otras palabras, diseñar un discurso y proyecto alternativo a lo ya existente.

Ahora bien, ¿cuál sería ese nuevo horizonte estratégico? Y ¿qué táctica sería la apropiada? Estas interrogantes apuntan hacia un tema complejo. Me voy a permitir en esta entrega adelantar, brevemente, algunas consideraciones.

La nueva apuesta democrática deberá superar, en un solo movimiento, las deficiencias del pasado y el modelo del socialismo del siglo XXI.  Para alcanzar este doble cometido, sería necesario pensar el país dentro de un nuevo marco discursivo. Uno que propicie un estado federal que conduzca a la creación y afianzamiento de las autonomías regionales. Recordemos que esta búsqueda no es una demanda nueva ni carece de asiento histórico. Por el contrario, esta reivindicación se encuentra enraizada con los procesos culturales e institucionales que fraguaron la independencia y la creación de la república de Venezuela. Tuvo continuidad en las luchas por la autonomías seccionales a finales del siglo pasado, la descentralización en los últimos años de la década de los ochenta y se encuentra articulada con particularidades de carácter cultural y antropológico.

Bien pudiera preguntarse ¿qué es Venezuela? Una repuesta apropiada a esta cuestión tendría que pasearse por estas diferencias regionales que dibujan el mapa nacional. Andino, valenciano, monaguense, zuliano, guariqueños etc. son particularidades culturales que no han sido procesadas debidamente por el discurso  político que prevalece en el país.

En fin, los signos del presente son alentadores. Es por esta razón que afirmamos que la política reaparece. Sin embargo, cuidado con los peligros que se derivan de los viejos hábitos. Estemos atentos.

Nelson Acosta Espinoza
acostnelson@gmail.com
@nelsonacosta64

EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, ACTUALIDAD INTERNACIONAL, OPINIÓN, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, REPUBLICANISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA,ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA,CONTENIDO NOTICIOSO,

No hay comentarios :

Publicar un comentario

Comentario: Firmar con su correo electrónico debajo del texto de su comentario para mantener contacto con usted. Los anónimos no serán aceptados. Serán borrados los comentarios que escondan publicidad spam. Los comentarios que no firmen autoría serán borrados.