sábado, 10 de diciembre de 2011

ELIDES ROJAS: AL CAPONE MORIRÍA DE ENVIDIA

La revolución chavista tenía entre sus principios básicos adecentar el país. Barrer de una vez por todas con esa historia invencible de ladrones, rateros y corruptos que de alguna manera le sirvieron a Chávez y su grupo para justificar los golpes de Estado del 92. Al menos ese fue el discurso fundamental de los militares golpistas.

No necesariamente era lo que de verdad tenían en mente. Llegar al poder, años después por la vía electoral, barrió de cuajo todas las metas de construir un país nuevo y decente. Algunos de la cúpula de uniforme, los más serios y consecuentes se fueron de esta cueva de Alí Babá hace tiempo. Apenas vieron los primeros movimientos de los choros disfrazados de socialistas y, especialmente, el refuerzo hamponil de los hambreados cubanos, este cuento de la revolución estaba comenzando a perderse. Y, en efecto, 13 años después, Chávez y su combo han logrado lo que parecía imposible. Lograron construir un aparato de corrupción blindado, enorme, gigante, invencible. Así como la llamada cuarta república logró su propia destrucción a punta de ladrones sueltos y apoyados, el chavismo está listo para la parrilla por las misma razones repotenciadas y multiplicadas por 1.000 o más.

¿Cómo logra Chávez y su chavismo y que socialista levantar el aparato de corrupción más poderoso desde los tiempos de Al Capone? ¿Cómo hizo este portento de honestidad y moral revolucionaria para hacer realidad el sueño del Hombre Nuevo? Fácil. Muy Fácil. Tomó por asalto los poderes públicos y, entre ellos, todos los mecanismos de control. Como en las películas de vaqueros gringas cuando el comisario del pueblo era a la vez el jefe de la banda atraca bancos. Zamuro cuidando carne.

Sin Asamblea Nacional, Contraloría, Fiscalía o tribunales realmente honestos e independientes no hay la más mínima posibilidad de que los choros revolucionarios sientan el más mínimo temor al cogerse unos reales. Son del mismo equipo, de la misma banda.

Ese es el primer paso. Generar el sistema de la impunidad, mientras se llenan la boca hablando de moral socialista y honestidad revolucionaria. El segundo, muy usado antes, pero perfeccionado en estos tiempos de militarismo y que socialista. Es la creación de alcabalas de todo tipo. En cada alcabala hay que bajarse de la mula. Certificado para tal cosa, solvencia para nadar en el Guiare, recibo de pago del derecho a jalar mecate, sistemas de control de cambio variados, escalonados y de muchos renglones, cupos para todo, controles de precios, militares cuidando mercancía, mercales y mercalitos, contenedores podridos en cada puerto o patios vacíos. Confiscaciones, expropiaciones. Leyes y reglamentos. Cada paso es una alcabala donde hay que pagar peaje.

Y el tercero es la infinita creatividad para robar y practicar el raterismo más descarnado. Venden balas y armas a los malandros y a los presos, sacan la comida de Mercal hacia Colombia, venden gasolina de contrabando, se roban la carne de Mercal y la venden a restaurantes, tienen el control del mercado negro vía Pdvsa, arman rápidamente mafias como la de las cabillas o el cemento. Son rápidos. Muy buenos.

Al Capone se hubiera muerto de envidia.

Twitter: @ejrl

EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA

EDDIE A. RAMÍREZ S: DÍA INTERNACIONAL DE LOS DERECHOS HUMANOS. (PALABRAS PRONUNCIADAS EN EL CIV EL 10/12/11)

Sesenta y tres años después que la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobó la Declaración Universal de los Derechos Humanos, el régimen del teniente coronel Hugo Chávez viola flagrantemente muchos de estos derechos ante la mirada indiferente de algunos gobiernos y organismos internacionales.
Un día como hoy, en 1948, la ONU proclamó que para evitar que el hombre fuese compelido al supremo recurso de la rebelión contra la tiranía y la opresión, era esencial que los Derechos Humanos fuesen protegidos por un régimen de derecho.
Sesenta y tres años después, los venezolanos no tenemos garantizado el derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad, como queda evidenciado por los asesinatos, entre otros, de José Manuel Vilas, Maritza Ron, Evangelina Carrizo, Juan Carlos Sánchez, Antonio López Castillo, así como el increíble caso de Franklin Brito; la presencia de casi una treintena de presos políticos, algunos con graves problemas de salud,  y de varias decenas de exiliados, así como los homicidios de 16.000 compatriotas en un año, la mayoría de ellos en barrios populares.
No todos los venezolanos somos iguales ante la ley. Basta recordar hechos recientes como la impunidad de la que goza el malandro vocero del teniente coronel en el canal del Estado y la sentencia favorable a un atorrante que se dice estudiante de la UCV, en comparación con el trato dado por jueces sumisos en los casos de Globovisión y de la juez Afiuni.
Los venezolanos demócratas no tenemos protección a nuestra vida privada, ni ante los ataques a la honra y reputación, como se comprueba en las grabaciones telefónicas a María Corina Machado y a otros realizadas y difundidas por el canal de televisión del Estado.
Los venezolanos no tenemos derecho a la propiedad y prueba de ello son las numerosas confiscaciones ordenadas por el dictador de Sabaneta. Agroisleña, empresas de servicios de la costa oriental del Lago, fincas en producción y edificios son casos conocidos.
Los venezolanos no tenemos derecho a la libertad  de opinión y de expresión, como se comprobó en los casos de Oswaldo Álvarez Paz y de Globovisión y, desde luego, con los arbitrarios cierres de RCTV y de 34 emisoras de radio no afectas al totalitarismo Siglo XXI.
Los venezolanos solo pueden conseguir empleo en los organismos del estado si se inscriben en el partido de gobierno, visten franelas rojas y asisten a las concentraciones del oficialismo.
Los venezolanos tenemos limitaciones para expresarnos en elecciones auténticas, debido a la designación de un Consejo Nacional Electoral en el que cuatro de sus cinco miembros son fichas del partido de gobierno.
Los venezolanos no tenemos derecho a sindicalizarnos por  las trabas impuestas por los Registros, tal y como fue el caso de Unapetrol.
En cuanto a los trabajadores petroleros que nos sumamos, motu proprio, al paro cívico convocado el 2 de diciembre del 2002 por todos los partidos políticos integrantes de la Coordinadora Democrática, por la Confederación de Trabajadores de Venezuela, por Fedecámaras y por la sociedad civil, la persecución ha sido implacable. Despido ilegal masivo de casi 23.000 trabajadores, prohibición de trabajar en empresas privadas que le prestan servicios o son socias de Pdvsa, expulsión de las escuelas de la empresa de niños hijos de trabajadores de Pdvsa, desalojo violento de viviendas en los campos petroleros sin que se hubiese cumplido con los requisitos de finalización del contrato de trabajo, como fue el bochornoso caso de Los Semerucos en Paraguaná, en donde los chacales del Destacamento 44 de la Guardia Nacional  arremetieron en horas de la madrugada con bombas lacrimógenas, perdigones y peinillazos en contra ancianos y niños que dormían. Órdenes de captura en contra de una docena de compañeros que actuaron como voceros durante el paro, entre ellos Horacio Medina, Juan Fernández, Edgar Paredes, Edgar Quijano, Lino Carrillo y Juan Luís Santana, los cuales tuvieron que exiliarse al no tener garantías de un juicio justo en libertad. Además, investigaciones por parte de la contraloría de Pdvsa a más de cien trabajadores por supuestos daños por la importación de gasolina durante el paro, cuando paradójicamente en la actualidad Pdvsa importa gasolina por los numerosos accidentes que ocurren en las refinerías por falta de mantenimiento y por incumplimiento de las normas de seguridad. Desde luego, siempre tendremos presente e insistiremos hasta que se haga justicia en el caso de nuestro Compañero José Manuel Vilas asesinado en San Antonio de los Altos, cuyos autores están identificados pero disfrutan de la impunidad que otorga el régimen a sus violentos que atemorizan a los demócratas.
Amigos, estamos en presencia de un régimen forajido que desconoce sentencias de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, como ha sido en los casos de  jueces destituidos, del general Usón y de Leopoldo López. El libro La Justicia Revolucionaria del profesor Rafael Chavero constituye una denuncia de los numerosos despidos de jueces honestos que no se sometieron a las directrices de Miraflores. Así como el teniente coronel declaró con toda desfachatez que había ordenado a Alí Rodríguez tomar la colina de Pdvsa porque allí estaban los reales, también procedió a tomar la colina de los tribunales porque tenía necesidad de ahogar a la justicia.
Vamos a seguir luchando por nuestros derechos. Vamos a organizarnos cada vez mejor. Acudamos a las primarias a seleccionar a nuestros candidatos y derrotemos a la barbarie el 7 de octubre. Los petroleros seguimos presentes y comprometidos. No estamos en esta lucha porque nos despidieron, nos despidieron porque no podíamos ser indiferentes en la lucha por la democracia.  ¡No más prisioneros políticos, ni exiliados!
eddiearamirez@yahoo.com
EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA

DIEGO ARRIA: IMPUNIDAD VS. UNIDAD

Este régimen izó desde su fundación la bandera de la impunidad. Esa bandera ondea para avalar la toma de universidades, la violación de los derechos civiles, el secuestro o el exilio de venezolanos que piensan distinto, el asesinato de una sociedad que vive con miedo.
El deber del próximo gobierno; inexorablemente de transición, es arriar esa bandera de la impunidad; es dejar de hacer honores a la burla, a la mentira, a la humillación y a la estafa sistemática. Paradójicamente, aunque los vaivenes de la política electoralista de estos tiempos intenten decir otra cosa; lo opuesto a la impunidad es la justicia; y para aplicarla no hace falta tener un cargo prominente; basta con ser ciudadano.
La impunidad conspira contra la unidad nacional. No se trata de una causa personal; es el sentir de cientos de miles, de millones, de venezolanos que no quieren venganza ni retaliación, sino justicia. Es una visión que se escapa de la coyuntura electoral y se transa en los principios. No hay forma de ser ambiguo en este tipo de temas. La impunidad es la negación de la justicia.
Nefasto régimen
Voceros que defienden la unidad entre quienes adversamos a este nefasto régimen, han sido capaces de desestimar los hechos que sustentan la denuncia contra Hugo Chávez en la Corte Penal Internacional; con lo cual desacreditan el Estatuto de Roma, del cual Venezuela es el primer firmante en América Latina. Con ello se enciende una alarma; porque desconocer los delitos de lesa humanidad, descritos en el expediente; es -por decir lo menos- un acto de complicidad con esa bandera que ondea en las astas de las casas del Gobierno; y pareciera, de algunas de la oposición.
Claro objetivo
El Gobierno de transición, que aspiro a presidir, tiene claro que su objetivo, por principios, es arriar la bandera de la impunidad. Liberar a los presos políticos y retornar los medios de comunicación a sus concesionarios son ejemplos que ilustran un seguro primer día de ejercicio presidencial.
Cuando enfrentemos el incierto panorama económico que estos irresponsables dejarán al país, igualmente iremos contra la impunidad; no engavetaremos denuncias, ni esconderemos expedientes. Cohabitar con delincuentes no forma parte del plan que desarrollaremos, porque no estamos dispuestos a pagar el precio de la impunidad.
@Diego_Arria
diego.arria@gmail.com

EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA

ANA JULIA JATAR: GANAR LAS ELECCIONES NO ES SUFICIENTE

Qué bien se siente contestar las preguntas de mis queridos lectores. Muchas de ellas relacionadas con el camino antes y después de la derrota de Hugo Chávez. Les confieso que las respuestas no son fáciles porque estoy convencida de que ganar las elecciones no es suficiente. Mientras más reflexiono sobre esa ruta, más me convenzo de que los estragos en la psiquis colectiva de una revolución comunista-populista en cámara lenta, como la que estamos sufriendo, son tan profundos que sólo pueden superarse con un sueño alternativo que logre calar en la mayoría.

Algo parecido a lo que hizo Deng Xiaoping, que con frases como: "Ser pobre no es socialismo" logró voltear en 180 grados a la China de Mao. Las sociedades no acaban con el agrio sabor de las revoluciones con sólo echarle azúcar por encimita al discurso oficial; no, la reconstrucción de un país destruido en sus valores más fundamentales sólo se logra con líderes capaces de convencer a la mayoría de que hemos perdido el tiempo con tanto vinagre.

Por ejemplo, me preguntan lo que pienso del bochornoso espectáculo de los estudiantes chavistas en la UCV; esos que irrumpieron groseramente, lanzaron carne cruda y voltearon bandejas de comida en la Sala E frente a la actitud estoica de la rectora. Sólo me pueden entender quienes lo hayan visto; los que no, búsquenlo en You Tube por "Violencia en la Sala E de la UCV". El horrible espectáculo nos entristece de tal forma que podemos caer en la conclusión de que es mejor ignorarlos. Todo lo contrario, tenemos que entender lo que tienen en la mente esos estudiantes que, al faltarle el respeto a la institución universitaria, a la propiedad ajena y a sí mismos, sólo estaban hundiendo su futuro sin saberlo. No puede faltar en este análisis la aprobación descarada del Presidente que, como otros totalitarios, necesita de los jóvenes para mantenerse en el poder. No hay mejor fuego para la destrucción "revolucionaria" que las hormonas de la juventud. Desafortunadamente, lo que sucedió en la Sala E de la UCV no es un caso aislado, sino la triste metáfora de nuestra Venezuela hoy. Estos muchachos han regresado a la barbarie pero la realidad es que gran parte del país lo ha hecho también.

Y esta reflexión me lleva a la pregunta de qué hacer con la industria petrolera cuando se vaya Hugo Chávez. Nuevamente, el ganar la elección no basta, pues está ligada a los tremendos costos que ha tenido para el país la reiterada tentación expropiadora de nuestros gobernantes. ¿Existe en el país el consenso nacional para no volver a hacerlo? Es importante dar demostraciones de ello, pues con este Gobierno hemos caído en aberraciones tan grandes que nuestras garantías tendrán que ser igualmente poderosas. Traigo el ejemplo de la faja del Orinoco. Explotar el petróleo pesadísimo de la faja requiere de dos procesos muy costosos. Es obvio que nos conviene que ambos se realicen en Venezuela, pero hoy no hay quien invierta aquí, ni siquiera nuestro propio Gobierno que con tanto populismo se quedó sin real para invertir a largo plazo, y ahora convirtió la explotación de la faja en un crimen. Para hacer el petróleo más líquido no lo procesan, sino que criminalmente lo combinan con petróleo liviano. Toda esta destrucción de valor y oportunidades es consecuencia de años de irrespeto a los derechos de todos.

La barbarie está en todas partes y las respuestas sólo vendrán con cambios profundos en la forma de vernos, pues la reconstrucción de Venezuela va más allá de ganar las elecciones en 2012.

@anajuliajatar

EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA

FAUSTO MASÓ: NECESARIO ABURRIMIENTO

De haberse celebrado las primarias a comienzos de este año habría tiempo para curar las heridas, provocadas por el enfrentamiento entre precandidatos. Ahora, quedan pocos meses después de febrero hasta las elecciones presidenciales. Esta es una razón adicional para que los debates eviten la verdadera confrontación, aun a costa de que pierdan dramatismo, disminuya eventualmente el rating. Para derrotar a Chávez en octubre harán falta los radicales, los comeflor, los politicastros, los ambiciosos.
Antes de que abriera la boca el primer precandidato las cartas estaban echadas. El país prefiere la unidad sobre todas las cosas. Después de febrero el candidato de la MUD buscará votos hasta en el chavismo para forjar una nueva mayoría.
María Corina dejó de ser la mejor, o el mejor, diputado de la Asamblea para emprender una misión imposible, imponerse como independiente; aunque buena parte de los venezolanos no apoye a ningún partido, también los considera imprescindibles para derrotar a Chávez. Si ella y Leopoldo hubieran llegado a un acuerdo otra sería la historia, pero ya es demasiado tarde para lograrlo y pronto lo será también para retirarse. Invocar a los independientes les sirvió en el pasado a los candidatos antipartidos, respaldados por los que condenaban la política, pero tampoco llegaron lejos, terminaron como apóstoles de la antipolítica. María Corina busca ahora el voto duro, apuesta por que los radicales serán decisivos en las primarias, por que votarán en masa. Se expresa con más energía que un hombre, ya no habla de mujer a mujer.
Capriles y Pablo Pérez representan las candidaturas creíbles porque están apoyados por las organizaciones políticas. Capriles lleva la ventaja decisiva de haber sido apoyado unánimemente dentro de Primero Justicia, y administrar con sabiduría su posición en las encuestas. Sólo un debate que alimentara a La Hojilla le restaría popularidad.
Cada vez que los chavistas agreden físicamente a los líderes de la oposición, aumenta el deseo unitario en la oposición.
La gente en la calle no preguntó sobre el caso Makled o sobre la amistad de Chávez con Cuba, hablaban de seguridad, salud, desempleo, lo que toca de cerca a 90% de los venezolanos; otras hubieran sido las preguntas si se hubieran hecho en la plaza Altamira.
Todavía ninguna encuesta refleja con exactitud la opinión pública, porque aún la oposición no cuenta con un candidato unitario. Tan pronto concluya el proceso de las elecciones primarias, y en bloque los líderes opositores apoyen al ganador, al candidato de la MUD, mejorará la oposición en la opinión pública.
Esa unidad debería trascender el mundo político, abarcar a todos los sectores de la sociedad, desde trabajadores a rectores universitarios, escritores, científicos, porque al final las elecciones del próximo octubre no enfrentan únicamente a dos fuerzas políticas, sino también dos visiones de la sociedad en la que una, la que está en el poder, pretende borrar del mapa a la otra.
Con una enfermedad terminal como el cáncer Chávez no baja la guardia, la oposición enfrenta a un adversario terrible. ¿O ya olvidamos a quién enfrentará el país el próximo año? La unidad, la verdadera unidad, necesita hasta fantasmas del pasado, los enemigos a muerte, antiguos aliados de Chávez, radicales y conservadores, ateos y cristianos. Todos, pues.
Fausto.maso@gmail.com
EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA

CARLOS VILCHEZ NAVAMUEL: : FACEBOOK, UN FENÓMENO SOCIAL DE ALCANCE MUNDIAL

Si Internet -como tecnología- revolucionó la comunicación en el mundo, Facebook lo hizo en la comunicación social, esta ventana virtual aparece en EEUU en el 2004, fue fundada por Eduardo Saverin, Chris Hughes, Dustin Moskovitz y Mark Zuckerberg, su creador y principal socio de la compañía. En esta plataforma trabajan más de 3000 empleados, aparece actualmente en 70 idiomas, la utilizan 800 millones de personas en el mundo y está en continuo crecimiento.  

Facebook es quizás, el fenómeno social más grande e importante de los últimos tiempos, ha transformado la comunicación entre las personas y lo ha hecho de forma global. Su éxito indudablemente radica en que es gratis, su diseño es muy bueno, es fácil de seguir y cualquier usuario de Internet puede afiliarse para interactuar con otras personas sin distingos de raza, credo o posición social 

Nos permite no solo estar interrelacionados con nuestros amigos y familiares, si-no que además, podemos hacer nuevos amigos de una forma nunca antes vista, sea a través del “chat” o por medio de envío de mensajes, con gente que reside en el propio país o con otras personas que viven en otros países aunque estos se localicen en un continente diferente, nos abre una posibilidad distinta para expresar e informar de acuerdo a las capacidades y entendimiento de cada individuo y lo que es más importante, lo podemos hace libremente.

Esta red social ha servido tanto a manifestantes como a los políticos en sus campañas, sirve para vender productos, como para compartir escritos, pensamientos, videos, fotografías, música, y no en pocas ocasiones las personas se convierten en informantes de hechos que suceden en el momento  muchas veces más rápido que los mismos noticieros de televisión.

Cada usuario es libre de poner la información de su perfil y colocar las fotos y videos que les plazca, lo pueden hacer de forma pública o privada, Facebook refleja una parte de lo que somos como personas y como sociedad, en esta red social nos quejamos, formamos grupos, hacemos denuncias, criticamos a los políticos, a los equipos favoritos, a los curas y a los artistas, se denuncia la atención de una empresa o institución, se hacen oraciones, chismes, se convocan a fiestas y mientras algunas personas critican la comida de un restaurante, otras lo recomiendan, todo esto es comunicación.  

Según algunos expertos del tema, esta red social podría absorber la mayoría de los contenidos que tiene Internet en un futuro cercano, cierto o no, lo que sí podemos afirmar es que Facebook  -al menos por ahora-  revolucionó como nadie la comunicación social.

Como todo en la vida, esta plataforma social tiene sus admiradores y adversarios, entre los primeros nos encontramos con el presidente de iLike, (sitio de intercambio de música) Hadi Partovi, que afirmó que "En la historia de la computación, se creó la computadora personal, luego Windows, luego la Web y ahora la plataforma Facebook", entre los segundos, -los detractores- está José Steinsleger, un escritor y periodista argentino radicado en México quien ha escrito varios artículos sobre el tema, en el periódico la Jornada apareció uno de sus escritos titulado “La ideología Facebook” entre otras cosas dice “En el ciberespacio hay redes y… telarañas. Internet es una red (de redes), y Facebook una telaraña (de personas). Internet vincula, Facebook captura.”

Estamos seguros que Facebook evolucionará, la tecnología avanza rápidamente y no es nada raro que en un futuro cercano podamos  “chatear” en un idioma y el que lo reciba en otro, los programas de traducción instantánea están a la vuelta de la esquina.   ¿Usted que opina?
              
http://www.carlosvilcheznavamuel.com
http://porunaprensamashumanayobjetiva.blogspot.com/
carlosvilcheznavamuel@gmail.com

EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA

NELSON MAICA C: LEYES ANTIGUAS

Nota 1. Dedicadas a las nuevas generaciones. Cuentan las leyendas, sobre todo las de boca-oído, que por allá, bien lejos hacia atrás, entre los años 400 y 450 ac, la “plebe romana” exigió a los gobernantes de turno un mínimo de seguridad jurídica, requirió que se le respetaran las costumbres establecidas (mos maiorum).
Entonces, una comisión de 10 personas, fundamentalmente de las que sabían leer y escribir, posiblemente de las clases superiores, como los patricios, y a quienes se les llamo decemviri legibus scrbundis, redactaron una Ley a la cual se le dio el nombre de Lex Duodecim Tabularum (Ley de las doce tablas porque estabas esculpidas en 12 planchas de bronce). Así, los gobernantes respondieron a las exigencias de la plebe.

                           Tabla de las 12 leyes romanas

Según dejo escrito Tito Livio, los decemviri legibus scrbundis administraron Roma durante un tiempo y elaboraron diez tablas legislativas, aprobadas posteriormente por las comitia centuriata. Posteriormente se eligió otra comisión, la segunda, en la que participaron comisionados plebeyos con la finalidad de terminar de escribir las leyes que se les encomendó.
¿Qué paso con esa Ley de las doce tablas? ¿Dónde están esas planchas o tablas de bronce? ¿Qué dicen, o mejor, que decían?
Pues, según cuentan, fueron destruidas en uno de los tantos incendios de los cuales fue victima la ciudad de Roma, en esa ocasión, por los galos en el 387 antes de cristo.
La segunda comisión también gobernó y en forma tiránica e intento perpetuarse en el poder más allá del término establecido; pero el pueblo se rebeló y restauró la normalidad en Roma. Eligieron dos cónsules y publicaron las leyes decemvirales en doce tablas.
La Ley de las XII Tablas duro mucho tiempo y gozo de un gran respeto por el pueblo de Roma.
Se ha escrito y comentado mucho sobre ellas: a) que era una colección de leyes de distintos periodos; b) que no eran oficiales, sino privadas; c) que formaban parte de la tradición romana; d) que no existía en esa época una mentalidad como para producirlas; e) que fue un acuerdo político de vida ciudadana; f) que fue el producto de una transición de un régimen oligárquico a otro, unificando las clases patricias y plebeyas; g) que eran leyes copiadas de los griegos; h) que contemplaba todos los aspectos de la vida, desde una citación a juicio hasta el control del pueblo sobre el gobierno y cada funcionario como una garantía de la vida civil; i) que se prohibía toda norma que se refiriera a un privado, a favor o en contra.
Se especulo que esta regla dio pie, posteriormente, a la consecución de la igualdad de status de todos los civiles.
De cuanto no se tiene dudas, hoy, es que esa Ley de las XII Tablas fue un conjunto de reglas fundamentales para el desenvolvimiento de la vida en sociedad en aquella población agrícola y militar, de gran aceptación y, además, escritas.
Los textos conocidos de la Ley de las doce tablas llegaron hasta hoy por letrados como: Livio, Gayo, Festo y Cicerón, de los cuales tomamos algunos ítems para ustedes:
Tabla I: Si alguien es citado según derecho, acuda. Si no acude, que se dé fe: y que se le capture. Si hay enfermedad, edad o minusvalía que se le dé montura. Si no la quiere, no se le dé vehículo. El garante del propietario, sea propietario. Del pobre, uno (ciudadano) que lo aprecie. Cuando pacten, anúnciese. Si no pactan, que lleven su causa al comicio o al foro antes de mediodía. Durante la exposición, que estén presentes ambos. Pasado mediodía adjudíquese el litigio a quien esté presente. Si están ambos presentes, que la caída del sol sea el último momento.
Tabla II: Quien careciera de testigo, por tres días lo reclame ante su puerta.
ex sponsione te mihi... dare oportere aio…quando tu negas, te praetor iudicem sive arbitrum postulo uti des…morbus sonticus...aut status dies cum hoste...quid horum fuit unum iudici arbitrove reove, eo dies diffissus esto…cui testimonium defuerit, is tertiis diebus ob portum obvagulatum ito (Dile al peticionario: de la promesa que me… Me dijo que debería ser el de dar… cuando tú lo niegas, es necesario hacer uso de un árbitro o un juez da el pretor… enfermedad seria… días o estados con el enemigo… arbitro ve reo ve el juez había uno de ellos, porque los días de dificultad ser… a quien el testimonio a querer, a causa de los días de la obvagulatum tercer puerto que se vaya). Continuara.
Tips:
El decálogo liberal de Bertrand Russell, 1872-1970, filosofo, matemático y pensador liberal británico. 1951.
1. No sientas certeza sobre absolutamente nada.
2. No creas que vale la pena proceder ocultando la evidencia, porque con toda seguridad la evidencia saldrá a la luz igual.
3. Nunca trates de desalentar el pensamiento porque crees que así es seguro que lograrás algo.
4. Cuando te confronten con una posición contraria, aunque sea tu mujer, marido o hijos, intenta solucionarlo con argumentos y no por autoridad, porque la victoria que se sustenta sobre la autoridad es irreal e ilusoria.
5. No respetes la autoridad de otros, porque siempre encontrarás una autoridad opuesta.
6. No uses el poder para suprimir opiniones que consideras peligrosas, porque si lo haces, esas opiniones te suprimirán a ti.
7. No temas que tu opinión se considere excéntrica, porque cada opinión aceptada hoy alguna vez también fue considerada excéntrica.
8. Regocíjate en la diferencia de opinión inteligente y no en la aceptación pasiva, porque si aprecias la inteligencia como debes, notarás que lo primero implica una aceptación más profunda que lo segundo.
9. Sé escrupuloso en la verdad, incluso cuando la verdad sea inconveniente, porque es más inconveniente que la ocultes.
10. No sientas envidia por la felicidad de quienes viven en un paraíso de tonterías, porque sólo un tonto cree que ése es el paraíso.
¿Sera verdad que “el destructor” guarda alguna semejanza con Idi Amin Dada ( tomado de Wikipedia, Uganda, 1925 a 2003. Murió a los 78 años, 2003, en Arabia Saudí. Periodo de gobierno como Presidente 1971 al 1979)?
“Donde hay educación no hay distinción de clases”.
Confucio, 551 ac- 478 ac, filosofo chino.
nelsonmaica@gmail.com

EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA

ROBERTO SALINAS LEÓN: EL TEMPERAMENTO LIBERAL

El liberalismo es objeto constante de crítica. Candidatos presidenciales, miembros de la intelligentsia, periodistas, miembros de la clase corporativista, líderes clericales, de la derecho, de la izquierda-estos, y varios otros, se unen en ubicar al liberalismo como la fuente principal de nuestros problemas contemporáneos. En la región latinoamericana, es prácticamente obligación moral detestar y despreciar al liberalismo.

La interrogante natural, por ende, es ¿qué es el liberalismo? En cierta medida, esa es una parte principal del problema. Hay "liberales" de todo tipo; y todos, sin excepción, ofrecen su particular definición al respecto. En las palabras de un observador, cada liberal moderno es, a la vez, participante de una herejía, pero parte de una secta. Empero, entre las diferencias y las distinciones, hay un común denominador.

¿Cuál es? La respuesta parecería obvia: la libertad. Pero la libertad en su expresión total, en todas sus dimensiones, conlleva una actitud específica, un temperamento ante el conocimiento, el temperamento liberal. Esta es una forma, quizá la correcta, de entender el liberalismo-no como doctrina, o tesos, o receta preconcebida en las aulas académicas, no como algún consenso político o pacto general. El liberalismo, así visto, es una actitud ante el conocimiento, ante la realidad externa-un temperamento humilde, que se adapta a los cambios, pero que privilegia lo conocido sobre lo desconocido, la tradición histórica sobre el heroísmo de un caudillo salvador.

En una sociedad abierta, todos tienen visiones y valores, pero en esta sociedad, la norma capital es que ningún miembro de la sociedad puede imponer su visión sobre otros. Esa es la fuente de la libertad: las decisiones normativas del deber ser, de qué hacer, cómo hacerlo, se toman en forma independiente de una previa concepción de cómo se debe vivir la vida del ser humano-independiente de la concepción del nacionalismo histórico, o del fundamentalista islámico, de un proyecto alternativo de nación, del tecnócrata iluminado, del ingeniero social, vaya, de aquellos que presumen un monopolio sobre la verdad.

Mario Vargas Llosa captura este ingrediente capital del liberalismo como actitud, o temperamento, cuando nos dice: "el liberal que aspiro a ser es uno que ve en la libertad un valor fundamental." Es, gracias a la libertad, a dejar hacer, a respetar las visiones de otros, que la humanidad ha prosperado, que ha pasado de las cuevas a las estrellas, de la tribu al correo electrónico. Y ya nos decía nuestro gran liberal mexicano, José María Luís Mora, es por ello que la libertad aborrece el despotismo. Para ejercer la libertad, se requiere una serie de instituciones que eviten imposición de visiones sobre nuestros conciudadanos-se requiere un marco de derechos que protejan que lo que es de uno, es efectivamente de uno, o sea, derechos de propiedad; y se requiere un sistema de justicia que imparta decisiones bajo la premisa de igualdad de oportunidad, o sea, estado de derecho.

Este es el temperamento de una sociedad abierta, el temperamento liberal: aquel que celebra la migración, la pluralidad racial, la diversidad política, el derecho al respeto ajeno. Es el mismo temperamento que ve con escepticismo los híbridos como "liberalismo social" o la pretensión "constructivista" de erigir, ex nihilo, sin historia o tradición, algo totalmente nuevo, una nueva sociedad que refute el pasado y "cambie" el futuro. Por ello, el liberal habla de imponer límites al uso de la autoridad-y por ende, de abandonar la vanidad de, digamos, planear, orientar, dirigir la actividad de otros proyectos de vida. Esa es la esencia, y la consecuencia, de toda una enseñanza de la vida basada en la conversación del ser humano con la historia, en el temperamento liberal.


EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA

ENRIQUE GHERSI: ORÍGENES DEL LIBERALISMO

El liberalismo es una corriente de pensamiento que se fundamenta en la teoría subjetiva del valor, en materia económica, y el concepto de libertad negativa, en materia política.

La teoría subjetiva es aquélla que define el valor económico no como algo inherente a la cosa misma, sino como la opinión que la gente tiene acerca de una cosa.

Un ejemplo muy sencillo permitirá evaluar el conjunto: el valor de un vaso no es la cantidad de trabajo incorporado en él, como creía equivocadamente David Ricardo o Marx, sino lo que la gente cree que este vaso vale; es decir, la escasez relativa de este vaso. Por eso este vaso puede valer mucho o puede valer poco, en función de su abundancia o escasez en una sociedad. La teoría subjetiva del valor en mi concepto es un elemento central para poder definir en qué momento nos encontramos frente a una doctrina liberal.

En segundo lugar, el concepto de libertad negativa fue desarrollado por Isaías Berlin. Lo que quiere decir es que, entre las muchas formas de definir a la libertad, son liberales las corrientes que la definen como la ausencia de coacción y, por eso, se llama libertad negativa. Es decir, aquellas doctrinas que definen a la libertad como la ausencia de coacción.

Aceptando esta definición inicial del liberalismo basado en la teoría subjetiva del valor y en el concepto de libertad negativa, quiero presentarles a ustedes una visión sintética de los orígenes de este liberalismo. En base a estas consideraciones, por consiguiente, es muy fácil encontrar cuál es el origen de la idea liberal.

Aparición de la idea liberal en la España Medieval

En nuestro concepto, el origen de la idea liberal lo vamos a encontrar en la España medieval, señaladamente durante la ocupación árabe de España y específicamente en Andalucía.

Así, encontraremos el origen de la teoría subjetiva del valor y del concepto de libertad como ausencia de coacción entre escritores árabes y judíos medievales. Señaladamente en Ibn Jaldún, un historiador magreví de la edad Media que es el primero que desarrolla el concepto de libertad como ausencia de coacción claramente en un famoso y monumental libro llamado “Introducción a la Historia Universal” un libro escrito en la baja edad media árabe. En él recomienda a los príncipes gobernar dejando a su pueblo actuar de acuerdo con sus puntos de vista, con sus potencialidades, con sus instintos, con sus placeres, con sus deseos. Es tal vez uno de los escritos más antiguos donde podemos encontrar claramente expuesto el concepto de libertad en sentido negativo.

En materia económica, el concepto de valor subjetivo fue esbozado también en esa época por Maimónides, un sabio judío de Córdova. Maimónides es juez de la comunidad judía y, como tal, comenzó a redactar opiniones jurídicas de interpretación de la ley mosaica, tratando de establecer la naturaleza del interés y de la usura. A partir de tales estudios sobre interés y usura Maimonides ensaya por primera vez lo que es el concepto del valor subjetivo.

Curiosamente, fue la enorme energía creativa de la España árabe, crisol de civilizaciones donde convivían pacíficamente árabes, judíos y cristianos, que permite el desarrollo de dos grandes conceptos liberales que son posteriormente recogidos, ya en el siglo XVI, por la llamada Escuela Jesuítica de Salamanca.

La Escuela Jesuítica de Salamanca

En la escuela toma las viejas teorías de Maimónides del concepto subjetivo del valor y lo desarrolla sistemáticamente. Se puede hablar de que los primeros escritos y estudios de economía moderna se hacen a la luz de los trabajos de los jesuitas de Salamanca en el siglo XVI. La teoría subjetiva del valor que había sido ensayada por Maimónides es convertida en teoría monetarista por los jesuitas, a través de la llamada teoría cuantitativa de la moneda.

¿Por qué los jesuitas del siglo XVI inventan la teoría cuantitativa de la moneda? o, ¿por qué aplican el concepto subjetivo del valor a la moneda? Por culpa, en parte del Perú. Esa es una anécdota interesante que conocer. En el siglo XVI comienza en España y en las posesiones de los Austrias españoles una inflación monstruosa creada como consecuencia de la explotación de las minas de oro y plata del Nuevo Mundo. En efecto, por parte en culpa de que el oro peruano es acuñado inmoderadamente, produce una inflación monstruosa en España y en las posesiones germánicas flamencas de su imperio.

Entonces, alguien tenía que explicar qué estaba pasando, y son los jesuitas de Salamanca los que desarrollan por primera vez el monetarismo para explicar la gran inflación del siglo XVI. Y dicen: “La moneda es igual que cualquier bien, un bien vale en función de su abundancia o de escasez”. Hay mucha papa, la papa baja de precio; hay poca papa, la papa sube de precio, esa es la teoría cuantitativa del valor. El valor de las cosas no es lo que la cosa es en sí misma sino lo que la gente considera que la cosa es en determinado contexto; la abundancia o la escasez, ese es el valor de algo.

Los jesuitas de Salamanca toman este concepto que había sido elaborado por Maimónides y lo aplican a la moneda naciendo la teoría cuantitativa del valor.

Los jesuitas de Salamanca desarrollaron también el concepto de libertad negativa en el terreno político. Fue curiosamente Fray Ginés de Sepúlveda, el gran rival de Bartolomé de las Casas, el héroe de los socialistas latinoamericanos, quien descubrió a partir de un tratado de derecho internacional público los conceptos y principios elaborados por Ibn Jaldún durante la edad media árabe. De manera que, tanto en el terreno de la teoría cuantitativa de la moneda como en el terreno del desarrollo filosófico de la libertad, entendida como ausencia de coacción, ambas son ideas largamente elaboradas de los jesuitas de Salamanca.

Jesuitas más recientes, inclusive el famoso jesuita Tomás de Mercado, cuyo nombre parece sugerente para los conceptos que desarrollamos, escribió un famoso libro llamado “Suma de tratos y contratos en Ciudad de México”; el cual fue durante tres siglos la doctrina básica que se enseñó en todas las universidades de América Latina, incluido el Perú. De manera que si leemos, por ejemplo, los escritos de Peralta y Barrionuevo, el famoso sabio criollo del siglo XVII, podemos encontrar una decidida influencia del pensamiento jesuítico de Salamanca del siglo XVI y, finalmente, del incipiente liberalismo.

Si tuviéramos que hacer el árbol genealógico del liberalismo, sus raíces serían Ibn Jaldún y Maimónides; el tronco inicial, los jesuitas de Salamanca. ¿Cuál es la siguiente sección de este árbol? El pensamiento jesuítico de Salamanca curiosamente se estanca en España y no tiene continuadores. Hay quien ha querido encontrar en Jovellanos, ya en el siglo XVIII, una conexión; pero aparentemente fue un sacerdote con gran influencia liberal tomada de la ilustración francesa y no del pensamiento español del siglo XVI.

Los continuadores del pensamiento de los jesuitas de Salamanca estuvieron en Flandes, representados por Hugo Grotio y Heinnecius, conocidos como los pioneros del derecho internacional público. Ellos toman la imprenta del pensamiento de los jesuitas de Salamanca y profundizan el concepto económico y el concepto político de la idea liberal.

Difusión de la idea liberal: El liberalismo continental europeo y el liberalismo anglosajón.

A través del “pensamiento flamenco” viene la gran difusión de la idea liberal política y, en mi concepto, la gran separación del liberalismo. Es decir, tenemos dos raíces: Ibn Jaldún y Maimónides; un tronco común, la escuela de Salamanca; un tronco subsiguiente, el pensamiento flamenco; y luego la gran división del liberalismo en dos copas: el liberalismo continental europeo y el liberalismo anglosajón. De Flandes el liberalismo salta a Inglaterra, señaladamente a Escocia. Grotio y Heinnecius fueron profesores de un famoso pensador escocés, de apellido Huntintong, que revoluciona la educación en su país. Huntintong fue maestro de Adam Smith, que aprendió de él la doctrina económica y moral que posteriormente se convertiría en el liberalismo contemporáneo de origen anglosajón.

Encontramos ahí claramente una línea de desarrollo intelectual: de los flamencos a Huntintong, el renacimiento escocés y Adam Smith. Este paso hace eclosión durante el siglo XVIII con el gran movimiento intelectual que Adam Smith encabeza en su época. Recordemos una cosa: Adam Smith en su época era un hombre muy famoso; es decir, no era solamente un oscuro profesor o un erudito de biblioteca, fue un hombre que realmente se convierte en un hombre muy famoso, muy célebre, muy influyente en la política, al extremo que llega a ser representante o miembro del Parlamento. Es célebre su participación durante el proceso de independencia de Estados Unidos de Europa, a favor de la independencia de las colonias norteamericanas cuando esto se somete a voto en la Cámara de los Comunes de Inglaterra; es considerado un traidor por muchos de los ingleses por ese voto en su momento.

Adam Smith desarrolla los conceptos clásicos de la teoría subjetiva del valor y de la libertad negativa con diferente énfasis y diferente fortuna. Mucha gente, los historiadores que ustedes van a leer, creen y opinan, probablemente de manera correcta, que Adam Smith confunde el problema del valor y van a encontrar algunas páginas de Smith donde claramente recoge una idea de valor subjetivo y otras donde Smith habla del valor trabajo o valor objetivo. Por eso muchos consideran que Marx en realidad fue una tergiversación o una profundización de los errores de Smith y, en buena parte, los errores de Smith permitieron el desarrollo conceptual del marxismo en el siglo siguiente.

El desarrollo ulterior del liberalismo inglés, tanto en su vertiente manchesteriana con Cobbett, que condujo la polémica por el libre comercio en el final del siglo XVIII y principios del siglo XIX, como lo que se ha llamado liberalismo clásico que viene con Adam Smith, David Ricardo, John Stuart Mill, Jeremías Bertram y Herbert Spencer, tiene claramente un entroncamiento con una de las grandes copas de este árbol liberal que se divide en el momento de la influencia del pensamiento flamenco.

La otra gran rama del pensamiento liberal, es el liberalismo continental. Esta se distribuye por los diferentes países de Europa, fundamentalmente en Alemania y en Francia, con distintas escuelas, énfasis y características.

Primero pasa a Francia donde tiene claramente un desarrollo en la ilustración francesa. Voltaire, Diderot, D´alambert, algunos dicen que Rousseau, otros niegan la pertenencia de Rousseau a la doctrina, toman estas grandes y viejas ideas de Grotio, Heinnecius y los jesuitas de Salamanca, cada vez más perdida en el tiempo. Cada vez se reconoce menos a los jesuitas como los autores de estas ideas, porque lo curioso de este proceso de elaboración es que nadie se acuerda de quién las dice; ellos la toman del profesor inmediato, quien la tomó a su vez del profesor inmediato. Pero mucho menos los ilustrados franceses, que eran anticlericales por naturaleza, recuerdan que esto tuvo como origen a un pensamiento neoclásico.

Paradójicamente pues, en el liberalismo continental francés se desarrolla una línea anticlerical, fundamentalmente centrada en temas filosóficos, aunque Jean Batista Say salva el honor colaborando en algo con los conceptos clásicos de la teoría subjetiva del valor.

Por su parte, el liberalismo continental alemán tiene su propio desarrollo, que alcanza un punto culminante en el siglo pasado y es, probablemente, el responsable del renacimiento de las teorías liberales durante esta centuria.

En Austria, el pensamiento liberal anida en algunas universidades de habla germana y tiene una eclosión importantísima durante el largo reinado del emperador Francisco José, en que se desempeñó como ministro de economía Eugene Von Böhm-Bawerk. Este hombre ha sido tal vez el liberal más importante de los últimos siglos porque él recoge el viejo tema de los jesuitas de Salamanca, de la teoría subjetiva del valor, que había sido enredada y confundida por Smith, y ciertamente por David Ricardo, y olvidada por los franceses, y lo pone por primera vez en una ecuación matemática. Para el efecto, desarrolla claramente y científicamente el concepto central: que el valor de una cosa está en función de su escasez o de su abundancia, que el valor de una cosa es una opinión y que la economía es en realidad una rama de la psicología y no de la matemática.

Según Von Böhm-Bawerk, el valor no está en la cosa, está en la gente. Es consecuencia de la escala valorativa de millones de individuos, que simultánea y espontáneamente, y sin conexión alguna opinan en un contexto llamado “mercado”, y le atribuyen a algo, por error, una determinada condición. Como consecuencia de tales trabajos algunos hablan de la escuela neoclásica neoliberal a partir de ese momento. Después de Böhm-Bawerk, Weiser, Weickel, Menger y sus discípulos Ludwig Von Mises y Friedrich Von Hayek, la escuela austriaca del pensamiento liberal ha fecundado esta doctrina profundamente.

Escuelas actuales

Hoy en día se habla de que en el mundo liberal existen las siguientes escuelas: en primer lugar, la llamada “escuela del capital humano”, se llama así porque se dedica más a los conceptos elaborados por la escuela austriaca, a estudiar lo que es el valor de la gente. Esta escuela sostiene que la gente vale en sí misma, en conocimiento, en habilidades, en tiempo y en técnica. En base a tales hipótesis hacen una serie de estudios sobre la conducta humana, sobre el matrimonio, sobre la capacidad de trabajo, sobre la educación. La escuela del capital humano ha tenido dos premios Nobel muy recientes. El primero fue Theodore Schultz en la década del setenta y muy recientemente Gary Becker.

La tesis sobre la que se fundamenta es que no solamente existe un mercado monetario sino también un mercado no monetario en toda la sociedad. La política es un mercado; las relaciones humanas son un mercado; la cultura también. En todas estas manifestaciones de la conducta humana hay un funcionamiento racional que se puede estudiar científica y análogamente a la economía.

La segunda escuela del liberalismo contemporáneo es la del “Public Choice” que estudia el mercado político. James Buchanan, Premio Nobel de Economía, es el exponente máximo de esta escuela.

En tercer lugar, está la llamada “Escuela de los derechos de propiedad”. Es tal vez la que ha tenido el desarrollo más explosivo en los últimos años y los aportes más importantes. Cuenta en este momento con tres premios Nobel: Ronald Coase, Ronald Douglas North y Robert Vogel. Coase es el más original; planteó que el derecho también tiene una lógica económica consistente en facilitar las transacciones de la gente.

El derecho de propiedad, por ejemplo, es una forma de reducir el costo de vivir en un mercado, porque al saber qué es de cada cual, todos tenemos información muy importante para reducir la cantidad de tiempo y la cantidad de datos necesarios para vivir en un mercado. Otra contribución original de Coase fue su afirmación de la empresa como un paquete de contratos preestablecidos que permite a la gente organizarse económicamente consolidando información.

Una cuarta escuela liberal es la monetarista. Milton Friedman es su premio Nobel representativo.

Finalmente, la última escuela contemporánea del liberalismo es la llamada “anarcocapitalista”. El anarcocapitalismo se origina en el siglo pasado con Herbert Spencer. Quedó en estado larvado, hasta que en tiempos muy recientes ha tenido un gran desarrollo y fundamentalmente a partir del concepto de privatización.

En efecto, desde el momento en el cual el concepto de privatización es aceptado como viable en una sociedad, comienza un desarrollo intelectual muy riguroso dispuesto a mostrar que es posible privatizarlo todo. No hay ninguna razón por la cual todas las funciones del Estado no puedan ser privatizadas en su integridad.

Esta escuela todavía no tiene un premio Nobel, pero no me extrañaría que en los próximos años lo tuviera por las importantes contribuciones matemáticas hechas por ellos, sobre todo en lo que se llama la “teoría del caos”. Vera Smith y David Friedman, hijo de Milton, son sus representantes más caracterizados.

Hemos hecho un brevísimo cuadro sinóptico del origen y de la evolución del liberalismo. Dos grandes raíces: Ibn Jaldún y Maimónides. Tronco común: el liberalismo flamenco. Las ramificaciones: el liberalismo anglosajón y el continental europeo.

Diríamos que la gran influencia actual de las ideas liberales provienen esencialmente de una variación del liberalismo continental, el llamado liberalismo austriaco, que logró una vanguardia intelectual a principios de este siglo, gracias a ganar el debate ideológico en las grandes universidades contemporáneas a los socialistas y los marxistas durante los 40 o 50 años primeros de este siglo.

Es absolutamente evidente que el desarrollo intelectual y la gran potencia y la energía, la vanguardia, como se llama en el pensamiento académico, se encuentra en esa rama, en esa escuela desprendida de ese gran tronco común que nos hermana a todos en las creencias fundamentales de la libertad del ser humano, de su derecho a decidir y del valor como reconocimiento a la capacidad autónoma de cada individuo para decidir qué le conviene, qué cosa es buena y cuándo puede conseguirla. Diríamos que éste es, apretada y groseramente, un cuadro aproximado a esa fascinante e inexplicable historia de esta gran doctrina.

EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA

MIGUEL ANTEZANA: SER LIBERAL EN VENEZUELA (DESDE LIMA PERU)

Quien haga un repaso de mis artículos de opinión sobre la realidad venezolana no dudará un minuto para tildarme de antichavista (o antichávez, o “antichavecista”). Ante ese gratuito calificativo –que alguna vez ya he recibido - debo responder que, más que eso, soy un declarado neoliberal. Como hay mucha gente que asume, cree, o le han hecho creer que ser neoliberal -o liberal a secas- es un insulto, o que el liberalismo es algo detestable, hasta inhumano, quiero dejar sentada “mi” verdad sobre el tema.

En la Venezuela de hoy, esa que llaman del siglo XXI, la sociedad se encuentra fragmentada, más que dividida. Ello ha sido posible “gracias” a un concienzudo trabajo del propio presidente de la República “Bolivariana”, Hugo Chávez, quien arrogándose omnipotencia afirma que en el país hay sólo dos bandos: los que están con él y los que están contra él.

Los que están con él, debemos asumir que es gente convencida en su proyecto político personal, el cual en un primer momento vendió y le colocó el sello diferenciador de “bolivariano”, y que ahora descaradamente lo defiende como “socialismo del siglo XXI”. El “bolivarianismo” ha quedado sólo como una marca comercial, algo que podemos asumir –inclusive- podría ser desechado en un futuro para dar paso a lo estrictamente “socialista”.

Los que no están con él, ergo, en contra, son personas pro yanqui, capitalistas, oligarcas, pro imperialista, “escuálidos” y otros tantos calificativos, inclusive descontextualizados y mal utilizados, que no soportan el mínimo análisis crítico y/o conceptual. Curiosamente, los términos “liberal” o “neoliberal” han sido usados sólo para adjetivar las políticas económicas anteriores que sólo le trajeron “hambre al pueblo”, o a los economistas y organismos multilaterales. Poco o nada se ha dicho sobre lo “liberal” o “neoliberal” como una corriente de pensamiento, como una filosofía de vida, como una manera de ser en el país.

De acuerdo con la definición clásica, el Liberalismo es una corriente basada en la supremacía de las libertades individuales, es decir, la importancia del individuo sobre el colectivo en sus diversas manifestaciones: expresión, pensamiento, religión y hasta en su comportamiento económico, sobre la base del estado de derecho. Precisamente, es la arista económica en el Liberalismo y su “nueva” forma de ver el papel del Estado en la economía de una nación, de dónde se aferran los más feroces críticos tanto de la corriente, como de la ideología.

No obstante, el Liberalismo y Neoliberalismo van más allá de sólo la visión económica o de cuál debe ser el papel de Estado y –por ende- de los gobiernos y gobernantes. Es cierto que las consecuencias de algunas políticas macroeconómicas “neoliberales” –sobretodo en Latinoamérica- no han sido siempre halagadoras; sin embargo, esos resultados han tenido más relación con fallas a nivel estructural, con una mala o mediocre aplicación, o por la intromisión de factores políticos o politiqueros que distorsionan y afectan su carácter técnico.

Con esto no queremos decir que las llamadas “recetas” neoliberales sean infalibles y adecuadas para todo el mundo. De hecho, la aparición de la llamada “tercera vía” o hasta de una “cuarta”, dan cuenta de lo variopinta que es la realidad. No todo es blanco o negro, hay grises; pero lo que sí podemos conocer sin titubeos son las bondades o defectos del blanco y del negro, más aún cuando profundizamos en la Historia Económica.

El neoliberalismo le añade a todo lo inmerso en lo liberal el aspecto internacional, el libre comercio y lo que hoy se conoce como globalización. Otra vez, los detractores afirman que el libre comercio, pero sobretodo la globalización es algo así como una maldición. En otras palabras, para los “anti” las economías deberían cerrarse al mundo, deberían asumir que no existe nada más allá de nuestras narices y que si alguien viene con productos mejores y más baratos deberíamos tirarle la puerta en la cara porque lo que desea es aprovecharse de nosotros.

Pero ese neoliberalismo que no conoce fronteras no sólo está en lo económico, está en nuestra vida diaria así no lo queramos ver… o mejor dicho, a pesar de que algunos no lo quieran ver. Los “nuevos socialistas” -cuyo fundamento no es defender su “ideología” sino atacar a los liberales o neoliberales- utilizan herramientas de la detestada globalización a diario (Internet, emails, comunicación satelital) dejando sólo en pie las fronteras cartográficas, pues todas las demás ya han sido derrumbadas, y ellos lo saben.

Lamentablemente la mayoría de esos nuevos paladines del socialismo redivivo, muchas veces extremistas y radicales, no tienen mayor “ideología” y/o acción que alentar el resentimiento social, la diferenciación de clases y el odio a todo lo que no sea pobre. Es decir, la culpa de que existan clases desposeídas de “algo” la tienen aquellos que sí lo tengan, y se acabó.

Este argumento simplista, soportado por el poder político es extremadamente peligroso y socialmente incendiario en todo sentido, pues sus consecuencias son generalmente mayor pobreza y mediocridad; y si se tienen recursos, se cae inevitablemente en el populismo barato. Lo único que pueden obtener sus seguidores es la lejana posibilidad de una “salvación” de parte de algún “Mesías”, llámese líder, pensador, presidente o lo que sea. Sin embargo, como el poder ciega, y estando en el poder se conocen las bondades del libre mercado, de la globalización y del capitalismo que tanto se odia, no queda más que echarle gasolina al discurso, pues las palabras se las lleva el viento y la realidad lo aplasta.

Venezuela llegó a eso: un gran sector de la población ilusionado con un cambio para mejor que nunca llegó, engañado por un “líder” que ahora limita las libertades para mantenerse en el poder, y decepcionado porque se quiere llevar a la sociedad hacia un supuesto “socialismo” que en la realidad es ya un totalitarismo autoritario, sobre la base de excusas legalistas.

¿Se puede creer y estar de acuerdo con “eso”? ¿Se puede renunciar a las libertades y derechos mínimos en nombre de una supuesta “revolución”? ¿Es aceptable ser tildado de “contrarrevolucionario” quien se niegue a avalar la mezcolanza que es el “socialismo” que se intenta vender en Venezuela? Pues no, y quien comparta ese “no” es un simple y declarado liberal.

Para darle más consistencia al ser liberal en Venezuela, Mario Vargas Llosa tiene unas líneas perfectas que vienen como anillo al dedo:

“El liberal que yo trato de ser cree que la libertad es el valor supremo, ya que gracias a la libertad la humanidad ha podido progresar desde la caverna primitiva hasta el viaje a las estrellas y la revolución informática, desde las formas de asociación colectivista y despótica, hasta la democracia representativa. Los fundamentos de la libertad son la propiedad privada y el Estado de Derecho, el sistema que garantiza las menores formas de injusticia, que produce mayor progreso material y cultural, que más ataja la violencia y el que respeta más los derechos humanos. Para esa concepción del liberalismo, la libertad es una sola y la libertad política y la libertad económica son inseparables, como el anverso y el reverso de una medalla. Por no haberlo entendido así, han fracasado tantas veces los intentos democráticos en América latina. Porque las democracias que comenzaban a alborear luego de las dictaduras respetaban la libertad política pero rechazaban la libertad económica, lo que, inevitablemente, producía más pobreza, ineficiencia y corrupción, o porque se instalaban gobiernos autoritarios, convencidos de que sólo un régimen de mano dura y represora podía garantizar el funcionamiento del mercado libre. Esta es una peligrosa falacia. Nunca ha sido así y por eso todas las dictaduras latinoamericanas“desarrollistas” fracasaron, porque no hay economía libre que funcione sin un sistema judicial independiente y eficiente, ni reformas que tengan éxito si se emprenden sin la fiscalización y la crítica que sólo la democracia permite”.

En Venezuela, oponerse a las acciones totalitarias y autoritaristas es ser liberal. Estar en contra de la no existencia del estado de derecho es ser liberal, querer lo mejor para sus hijos porque uno lo considere así, y no porque el gobierno lo quiera, es ser liberal. Expresar lo que a uno le de la gana y fomentarlo, sin represalias, es ser liberal. Si estar en contra del “chavismo” es ser liberal, pues Venezuela es mayoritariamente liberal.

Ahora, ¿es malo ser liberal? Para nada, de hecho, está muy bien serlo porque es hasta comercial. Así como alguna vez fue muy snob ser de izquierda, ahora el comulgar con el liberalismo y/o liberalismo es sinónimo de ser “mente abierta”. Sino, pregúntenles a los socialistas chilenos…


EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA