El
14 de Mayo se conmemoran 66 años del nacimiento del Estado de Israel marcando
la fecha cuando en 1948 David Ben Gurión
leyó la Proclamación de la Independencia que dio fin al mandato Británico en cumplimiento a la
resolución de la ONU que autorizaba la creación de dos entidades separadas: un
Estado Judío y otro Estado Palestino.
Además del nacimiento del Estado Hebreo, esa resolución representaba la oportunidad para que igualmente se estableciera el Estado Palestino, aplicando el mandato de la partición. Pero la opción de los Palestinos, apoyados por siete naciones árabes, fue la de negar la existencia del Estado Judío declarándole la guerra al recién nacido Estado, con lo que se inicio un largo conflicto que afecta aún hoy a ambas poblaciones con sus consecuencias trágicas que enlutan a todas las familias de la región.
Venezuela
desde el inicio siempre ha reconocido la existencia de los dos Estados: el de
Israel y el de Palestina. A inicios de la década de los 90 tuve el privilegio de ser Embajador de
Venezuela en Israel y constatar la esperanza de israelíes y palestinos en las negociaciones
de Paz de Madrid y de Oslo. Pude asistir al histórico apretón de manos entre
Rabin, Arafat y Shimón Peres; testimoniar el regreso y visitar a Yasser Arafat
en Gaza, presenciar el establecimiento de relaciones diplomáticas de varios
países árabes con Israel, y asistir a las reuniones en Rabat y Aman que
propusieron las bases de un Nuevo Medio Oriente.
Pero
esos momentos de euforia lamentablemente duraron poco. El asesinato de Yitzak
Rabin en manos de un fanático Israelí al igual que los recrudecimientos de los
atentados terroristas del Hamas y el Hizbola, paradójicamente muestran las
coincidencias estratégicas de ambos extremos por mantener la violencia y aplastar los ideales de los
pacifistas.
La
administración Chávez -siendo Maduro
Canciller- se desvió de la tradicional e histórica posición de Venezuela
(y de América Latina) de mantener relaciones con ambas partes, al inclinarse
por una posición unilateral al reconocer al Hamas y al Hizbola, y romper las
relaciones diplomáticas con el Estado de Israel que se ha prolongado por más de
cinco años. Si bien es cierto que Maduro ha señalado en diversas oportunidades
en privado su deseo de restablecer las relaciones con el Estado Hebreo, se
constata la falta de acción para concretar sus promesas, al igual que tantas
otras promesa que no se concretan. Ojala cumpla esta vez
El
Presidente Shimon Peres destacó recientemente“en muchos sentidos, la existencia
de Israel es un milagro” por los grandes logros alcanzados. Pero recordó el
desafío de ambos en alcanzar un Acuerdo para beneficio de ambos pueblos, que responda a la justa
aspiración de los Israelíes de vivir en un Estado seguro y sin terror, y
de los Palestinos en consolidar un
Estado reconocido con las condiciones de
prosperidad necesaria. Los enormes adelantos científicos y tecnológicos de
Israel pueden contribuir eficazmente al
aportarle a los países vecinos y en especial a Palestina, instrumentos para lograr el desarrollo en el
agro, la industria, la medicina, la
informática, la utilización de irrigación y recursos que permitan el
financiamiento de un desarrollo compartido. La visita del Papa Francisco a
Tierra Santa debe ser una oportunidad para que ese microcosmos religioso se
convierta en un epicentro de esperanza, fe y paz, para beneficio de la
Humanidad.
Milos
Alcalay M
milosalcalay@yahoo.com
@MilosAlcalaym
EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, ACTUALIDAD INTERNACIONAL, OPINIÓN, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, REPUBLICANISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA,ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA,CONTENIDO NOTICIOSO,