Recientemente
el escritor Jose Antonio Albertini en una reunión de amigo se refirió a una
película basada en la vida de un asesino a sueldo titulada “El hombre de
hielo”, pero de inmediato y sin asociación previa, se comentó
un informe de Archivo Cuba, entidad comprometida en divulgar los
crímenes del totalitarismo insular.
La
información señala que desde que Raúl Castro asumió la jefatura del estado
cubano, hace siete años, han perecido en la isla al menos 200 personas por
causas imputables a su gobierno, lo que demuestra que el dictador designado sigue
siendo un hombre cruel y despiadado.
Las
primeras fotos de ejecuciones en la Sierra Maestra tienen como protagonista a
Raúl Castro, no es que fuera el único asesino, entre otros estaban Ernesto
Guevara y Ramiro Valdés, pero al parecer el actual dictador gustaba fotografiarse con sus víctimas tal y
como hicieron sus pares nazis en el pasado.
El
desaparecido comandante del ejército rebelde Lucas Moran Arce, señala en
"La Revolución Cubana. Una versión Rebelde" que Raúl es el autócrata
por excelencia, una persona desconfiada por naturaleza, y un trabajador
incansable, que solo se rodea de incondicionales y que "el Segundo Frente
Oriental era un pequeño estado totalitario en el cual la disciplina se fundaba
en el terrible drama de la muerte por fusilamiento".
El
periodista y también escritor Luis González Lalondry, está investigando los
fusilamientos masivos del campo de tiro de la Loma de San Juan ordenados por
Raúl Castro en la madrugada del 12 de enero de 1959, cerca del monumento donde
se firmó el armisticio entre Estados Unidos y España en 1898.
Según
declaraciones de sobrevivientes que posee González, de la galera 8 del vivac de
Santiago de Cuba fueron sacados 84 presos, que fueron sometidos a una parodia
de juicio en la que los jueces eran comandantes de la revolución triunfante.
El
proceso duró cuatro horas, todos fueron condenados y ejecutados en masa. Fueron
sepultados en fosas comunes que habían abierto un buldócer. Inexplicablemente
contaron con asistencia religiosa antes de morir, uno de esos sacerdotes vive
en Miami, el padre Jorge Bez Chabebe,
que dijo a González,” fue un espectáculo dantesco que provocaba náuseas”.
Esta
masacre fue comentada por uno de los biógrafos de Ernesto Guevara, Jon Lee
Anderson, señala, “Pese a su reputación de hombre cálido, puede ser impulsivo,
dogmático y a veces brutal, en 1959, durante la rendición de Santiago, la
segunda ciudad del país, Raúl presidió la ejecución de más de 70 soldados y
oficiales que fueron ametrallados y sus cadáveres lanzados a un foso".
El
doctor Armando Lago, un distinguido investigador de los crímenes del castrismo
y autor del “El Costo humano de la revolución social”, refiere que
investigaciones parciales demuestran que
Raúl Castro fue responsable de 550 ejecuciones en 1959.
Dariel
"Benigno" Alarcón, oficial del ejército rebelde que combatió junto a
Guevara en el Congo y Bolivia dice que en una ocasión Fidel Castro le envió un
mensaje a Raúl para que cesaran los fusilamientos porque habían quejas al
respecto y que escuchó a Fidel comentarle a Celia Sánchez,la respuesta de Raúl:
"Fidel, no te preocupes no correrá más sangre, de ahora en adelante ahorco
a los enemigos".
Es
tema para otra columna, pero hay una característica del dictador que es justo
evocar.
Raúl
Castro en todos los procesos "judiciales" de gran relevancia del
régimen totalitario, ha sido el principal acusador, al parecer el único papel
principal que Fidel le dejó jugar mientras fue el máximo líder.
En
1959, durante el proceso contra el comandante Huber Matos, fue una especie de
Robespierre. Amenazó y coaccionó a Matos hasta que éste que se le enfrentó.
También trató de injuriar y desacreditar al abogado defensor Francisco Loriet
Bertot, pero no lo logró.
Hay
otros procesos a tener en cuenta como el que se realizó contra la dirigencia del viejo Partido Socialista
Popular, conocido como la "Microfracción", 1968. Raúl fue quien
ordenó a la Seguridad del Estado las medidas a tomar contra los supuestos
complotados. Al final del proceso, cuando el terror "raulista" corría
impetuosamente por el torrente sanguíneo de culpables e inocentes, y se
esperaba un baño de sangre, apareció Fidel componiéndolo todo y enviando a los
inculpados a cumplir sentencias de prisión.
Pero
su momento estelar antes de asumir todos los poderes en la isla, fue durante el
“Caso Ochoa”, un proceso en el que fueron juzgados varios oficiales de alto
rango, entre ellos generales, que resultó con la ejecución entre otros de
Arnaldo Ochoa y Antonio de la Guardia, 1989, y una purga que llevó a prisión o
destitución de otros muchos militares, que solo cumplieron las ordenes que les
habían impartido los dos hermanos.
Pedro
Corzo
pedroc1943@msn.com
EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, ACTUALIDAD INTERNACIONAL, OPINIÓN, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, REPUBLICANISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA,ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA,CONTENIDO NOTICIOSO,
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentario: Firmar con su correo electrónico debajo del texto de su comentario para mantener contacto con usted. Los anónimos no serán aceptados. Serán borrados los comentarios que escondan publicidad spam. Los comentarios que no firmen autoría serán borrados.