El
8D se nos presenta con electrizantes y promisorias alternativas democráticas en
una expresión detonante frente al maniqueísmo oficialista y a los falsos
redentores. Se avecina una intensa actividad política, los demócratas nos jugamos la democracia, razón
por la cual las elecciones serán determinante en la definición
político-electoral e institucional del
país y con una decidida repercusión en la gobernabilidad municipal y el
desarrollo económico integral de las regiones. Lo importante es -por lo menos-
mostrar que hay un número importante de ciudadanos con la voluntad firme de ser
libres, que somos mayoría.
Valencia exige y merece concejales
sólidamente formados, motivados, comprometidos con una gestión exitosa,
actuando coordinadamente con la sociedad y aplicando todo su potencial al logro
de los objetivos propuestos que van más allá de las competencias legales de la
Cámara Municipal, entonces, quienes sean electos concejales debe presentar ante
la sociedad una clara y determinante idoneidad técnica para el desempeño del
cargo para la planificación, la organización, la dirección a seguir, para la
evaluación permanente de los procesos verificando el grado de avance y la
retroalimentación necesaria a fin de consolidar, redimensionar y hacer los
ajustes que fueren necesarios con una participación ciudadana activa. La
comunidad valenciana, según las apreciaciones recibidas, desconoce la capacidad
técnica, el profesionalismo y la ética de muchos de los postulados.
No deberíamos desperdiciar nuestro interés en
candidatos a concejales que no gocen de la aceptación popular ni garanticen una
gestión edilicia positiva, ni aquellos que se prestan para el divisionismo con
candidaturas paralelas, contrarias a la unidad, de esa manera ponemos en riesgo
el triunfo electoral y nunca seremos capaces de resolver los problemas globales
de la comunidad, ni las necesidades particulares de los ciudadanos.
Lamentablemente en la maqueta electoral no
figuran innegables ciudadanos para desempeñarse en las funciones edilicias,
personas como Guillermo Manosalva, Carlos Gutiérrez, Omar Escalante y otros que
han dedicado parte de su vida a luchar por el desarrollo sostenible del
municipio, todo por no pertenecer al sectarismo político que decidió el reparto
negociado de las candidaturas. Los concejales electos tendrán el reto de
encontrar, junto con el alcalde electo y la comunidad misma, los escenarios y
estrategias viables para superar la crisis estructural, social y política del
municipio.
Solamente la capacidad de un liderazgo, la
consolidación de las instituciones municipales bajo la dirección de hombres y
mujeres capaces y una sólida y efectiva voluntad de servicio nos permitirán la
prosperidad y el progreso. Hoy Valencia es víctima de una suma de problemas
existentes que demuestran notoriamente la falta de capacidad, de idoneidad,
negligencia y corrupción, lo que ha conducido a la interrupción del desarrollo
sostenible y al dispendio y malversación de los recursos municipales. Valencia
tiene la oportunidad de salir de la crisis que deja el alcalde saliente y para ello,
el único camino válido, es la masiva votación en favor de los candidatos de la
unidad con todo y sus carencias, el triunfo electoral nos permitiría pensar y
apostar a la salida de la crisis. Logremos el municipio que nos merecemos.
ffacchinb@gmail.com
EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA,CONTENIDO NOTICIOSO,
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentario: Firmar con su correo electrónico debajo del texto de su comentario para mantener contacto con usted. Los anónimos no serán aceptados. Serán borrados los comentarios que escondan publicidad spam. Los comentarios que no firmen autoría serán borrados.