Bien amigos lectores, la siguiente reflexión
es probable que no sea del agrado de muchos amigos que tienen la bondad de leer
esta columna. Me refiero, a la extrapolación que a continuación haré en
relación a la frase pronunciada por el Presidente Maduro: “Dios proveerá”. En
principio, me voy a permitir reafirmar lo señalado en escritos anteriores.
Estamos claro que esta solicitud presidencial
implica una suerte de sumisión ante la realidad del país y las
dificultades que enfrenta para poder modificar, lo inmodificable: el socialismo
del siglo XXI. Desde este punto de partida se explica la desesperación
implícita en esta evocación mágica religiosa.
En mi modesto entender, esta exclamación o,
lo que ella implica igualmente, pudiera
aplicarse al comportamiento político que exhiben algunos sectores de la
oposición democrática. Vamos despacio. Intentemos explicar el sentido de lo
afirmado anteriormente. Cuidado, no existe en mi espíritu ninguna pasión anti
oposicionista. Todo lo contrario, me anima, si, un espíritu crítico con la
finalidad de enriquecer la práctica democrática. Este ejercicio, no tengo la menor duda,
es consustancial con el espíritu de tolerancia que debe privar en
quienes profesamos la fe democrática. ¿Qué queremos significar, entonces, con
esta comparación? ¡Desesperanza, dogmatismo, quietismo o un exceso de optimismo
en este sector de la oposición?
El electoralismo, entendámoslo, funciona como
una fe ciega. Y esta certidumbre tiende a desplazar la actividad propiamente
política. Las cifras de las encuestas reseñan una mayoría disgustada e
insatisfecha con las políticas del gobierno. En especial aquellas
relacionadas con el abastecimiento de
alimentos básicos. Para algunos opositores, entonces, esta circunstancia luce suficiente para
obtener una mayoría holgada en la próxima elección parlamentaria. Creencia esta
que ha sido respaldada por distintas exploraciones de opinión pública.
Todas ellas miden un mayoría de la población arrecha con las políticas del
gobierno, en especial, las atenientes a la distribución de comestibles.
A
pesar de estas condiciones objetivas, es válido preguntarse: ¿Dónde ubicar la
política, el relato, la narrativa y las emociones? ¿Son, acaso, las circunstancias económicas tan favorables
al sector democrático que sería posible dejar estas condiciones subjetivas “a
la buena de Dios”.
Me parece que dejar estas circunstancias “a la buena de Dios” sería un gran error.
Vamos a decidirlo con claridad. La oposición hasta ahora, no tiene un relato
alternativo. La consigna de la unidad pareciera ser su mejor mensaje y esta no
es suficiente. Por otra parte, exigir la renuncia de Maduro no constituye un
programa político y, desde luego, es insuficiente en términos de ofertar un
proyecto de país.
Ciertamente es loable aspirar a la unidad nacional.
Seria injusto y políticamente incorrecto cuestionar una iniciativa de esta
naturaleza. Sin embargo, es válido elevar algunas interrogantes en torno a este
tema. Por ejemplo, ¿Qué significa lo nacional para estos actores políticos?
¿Representan ellos la diversidad cultural, social y política presente en la
población venezolana? ¿Las regiones, con sus anhelos y demandas se encuentran
representadas?
La unidad y los acuerdos que ella suscite,
insisto, deben traspasar la inmediatez electoral. La formulación de un nuevo
proyecto de país que sustituya los del pasado y del presente no puede quedar “a
la buena de Dios”. No basta con identificarse con los hombres que pudieran
representarnos en estas próximas elecciones parlamentarias. Es imperativo poder
formar parte de ese quehacer colectivo.
En fin, de lo que se trata no es “solo vivir
en democracia, sino vivir la democracia”.
Sin dudas, la política ahora es así.
Nelson Acosta
Espinoza
acostnelson@gmail.com
@nelsonacosta64
EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, DIARIO DE OPINIÓN, SIN SOCIALISMO, OTRA VENEZUELA ES POSIBLE, ACTUALIDAD, VENEZUELA, ACTUALIDAD INTERNACIONAL, OPINIÓN, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, REPUBLICANISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, ELECCIONES, UNIDAD, ALTERNATIVA, DEMOCRÁTICA, CONTENIDO NOTICIOSO,
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentario: Firmar con su correo electrónico debajo del texto de su comentario para mantener contacto con usted. Los anónimos no serán aceptados. Serán borrados los comentarios que escondan publicidad spam. Los comentarios que no firmen autoría serán borrados.