GUSTAVO PARDO |
Hace
apenas unos días que desde La Habana y Washington se anunciaba simultáneamente
el descongelamiento de las relaciones diplomáticas entre ambas naciones. Dicho
anuncio produjo diversas reacciones, tanto dentro como fuera de la Isla. Por mi
parte, creo que resulta innegable el hecho que apunta hacia la efectividad del
movimiento de piezas efectuado desde Washington, dado que el mismo cambia las
reglas del juego; a partir de ahora, el ¨Goliat” imperialista ha dejado de ser
el abusador constante del ¨derecho soberano” del infeliz ¨David”. Este acuerdo
ha colocado al régimen castrista ante un verdadero dilema: ¿A quién culpar ahora?
Por
otra parte, se puede constatar un cambio positivo en la visión internacional
prevaleciente sobre la política norteamericana hacia Cuba, dejando al régimen
castrista ante la disyuntiva de mejorar su nefasto historial de irrespeto a los
Derechos Humanos, y las libertades civiles, económicas y políticas de los
cubanos o descubrir su verdadero rostro criminal ante la comunidad
internacional, y en particular, ante la izquierda. ¿Qué puede ocurrir ahora que
la mirada internacional está enfocada sobre La Habana? No tendremos que
aguardar mucho tiempo, en apenas dos horas comenzaremos a obtener respuestas
muy convincentes de parte del castrismo.
A
las 3:00 pm de hoy, martes 30 de diciembre, está previsto efectuarse una
performance[i] artística en la Plaza de la Revolución; actividad convocada por
Tania Bruguera. La obra en cuestión es “El Susurro de Tatlin #6”. En dicha
escenificación, los asistentes podrán hacer uso de un micrófono abierto por
espacio de un minuto, para ¨expresarse libremente (…), pero deben aceptar las
reglas del juego de lo que Bruguera presenta como “un ejercicio de
autocontrol”[ii].
Por
su parte, el articulista de Cubanet, Yusnaby Pérez[iii] manifiesta “La obra
abogará por el derecho de los ciudadanos a expresarse libremente, respetar la
diversidad política e ideológica existente dentro de la sociedad cubana y
sentirse dueños de su propio destino como nación”.
Aunque
Rubén del Valle, presidente del Consejo Nacional de Artes Plásticas (CANP), le
comunicó que “no apoyará la organización, divulgación ni los trámites legales
para la realización de la obra, advirtiéndole que podría enfrentar
“consecuencias legales y personales”, la autora de la iniciativa
¨#YoTambienExijo” anunció que “la obra se realizará” porque “es un aporte del
arte al necesario debate de ideas en la sociedad cubana”.
Es
muy interesante señalar que el funcionario justifico su negativa en que la
representación de la obra “impactaría negativamente en la opinión pública, en
un momento inicial de negociaciones entre los gobiernos de Cuba y los Estados
Unidos para restablecer plenamente sus relaciones diplomáticas y comerciales”.
En
muy poco tiempo, podremos comprobar si la dinastía tiránica cubana, admitirá
conceder un espacio a la diversidad; o, por el contrario, con relaciones
diplomáticas o sin ellas, con embargo o sin embargo; el régimen de los Castros
continuará su política represiva de las libertades socio-político-económica de
los cubanos.
Esta
vez, la pelota está en la Isla.
Gustavo
Pardo
masonhabana78@yahoo.es
@GustavoPardo18
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