IVÁN OLAIZOLA D’ALESSANDRO, RECONTANDO EL 2014

IVÁN OLAIZOLA D’ALESSANDRO

RN. Que el niño Dios se lleve a algunos y nos traiga a otros.

Pienso que para todos, los que creen en esta revolución, los qu no y a los que no les importa, este año agonizante ha sido malo en todos los sentidos. Bueno debemos hacer algunas excepciones, por ejemplo los que se denominan enchufados, los altos dirigentes del PSUV y de su gobierno, los viajeros de PDVSA-AIRLINE, los pranes, los  militares, lo que se denomina alto mando, generalato y almirantazgo y lógicamente los boliburgueses. Para todos estos 2014 ha sido de maravilla. Han aumentado de forma exponencial sus personales fortunas. Para el resto de nosotros, humildes mortales, el año ha sido de escasez, de aumento grosero de precios en los bienes y servicios, de inflación descontrolada, de sueldos pulverizados, devaluación del “bolívar fuerte”, de aumento de la criminalidad, de deterioro de los servicios, de colas y más colas, de presos y exiliados, de represión de las protestas, en fin que 2014 nos deja una secuela negativa de pronósticos reservados. Y para colmo hasta los más optimistas predicen un 2015 peor, con el perdón de don Andrés Bello, “más peor”.

Con todo este negro panorama no se vislumbra solución alguna. El gobierno, responsable de esto, que debería tomar medidas correctivas no se le ocurre más que culpar a otros, la política del avestruz, invocar al comandante supremo y eterno, mentir con el mayor caradurismo, comprar medios y amenazar a los no vendibles. Y promesas, y cadenas. Y mesas técnicas, mesas de diálogo, gobierno de calle, estrategias montadas con gente llevada “voluntariamente”, en autobuses, con un kit de almuerzo y hasta con unas cervecitas para apaciguar el calor. Pero al final la conclusión, la gran conclusión, es que la culpa es de la guerra económica, del Imperio y de Uribe. Pero ni una medida que pretenda corregir los entuertos. El bombillo al final del túnel lo quemó Jessy. Seguimos sin acetaminofén, sin aceite, sin leche, sin repuestos, sin pasajes, con colas, con chicungunya, con policías asesinados, con presos muertos o escapados, con pranes mandando, con colectivos pidiendo renuncias. Con aumento del éxodo de talentos, de maestros, profesores y profesionales en general. Y empresas cerrando o a media máquina o en vacaciones colectivas. Y en los centros comerciales locales cerrados. Solo chinos comprando. Y la navidad, bien gracias. Hallacas, yo te aviso. Pan de jamón a precio de pate de foie gras. Licores, guarapita de casualidad. Y para el año nuevo, aumento de la gasolina, aumento del aseo urbano, de la electricidad, escasez casi absoluta de todo y el verde rumbo a 200. Pero con patria, una hermosa patria. Viva Chávez.

En cuanto a la oposición a este régimen paradisíaco, muy bien, muy activa. Cada partido jalando la cabuya para su sardina. Peleando en la MUD por la botella vacía. Primarias o consenso. Constituyente o salida. Calle o diálogo. Elecciones o golpe. Tribunales internacionales, OEA y NNUU. Se fue Ramón Guillermo y llegó Chúo. PJ en una esquina, VP en la otra. AD y Copei creyendo en pajaritos preñados. López preso y María Corina prevenida al bate. Magallanes palo a bajo.

 

Ante tan buenos augurios, me despido de mis apreciados lectores hasta el próximo año. Pasaremos navidad y año nuevo con nuestros hijos, en un país del ALBA, donde Correa ladra pero no muerde. Y hay dólares como sorgo. “Feliz Navidad y Prospero año nuevo”. Que riñones.      

Iván Olaizola D’Alessandro

Iolaizola@hotmail.com

@iolaizola1

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