"Si usted quiere saber lo que una mujer dice realmente, mírela, no la escuche". Oscar Wilde
ENRIQUE G. AVOGADRO |
Más
allá del obvio notición de la semana, es decir, el principio del
descongelamiento de las relaciones entre Estados Unidos y Cuba, negociada en
secreto por mediación de SS Francisco (¡qué mala noticia para Cristina sería
que este argentino, tan vilipendiado cuando era Jorge Bergoglio por los
Kirchner y su pléyade de obsecuentes, recibiera además el Nobel de la Paz!),
nuestro país continuó viviendo tiempos de zozobra por obra y gracia de este
Gobierno que tanto se nos parece como sociedad. Resultó llamativa, por
calificarla de algún modo, la reacción de la Presidente, festejando que Obama
reconociera, después de más de medio siglo, haber entendido a Fidel.
Las
tormentas judiciales que siguen arrastrando a los estrados a los funcionarios
más conspicuos -ahora se sumaron el Ministro de Justicia, el Secretario de
Seguridad, un reciente Senador y dos fiscales- recrudecerán en los próximos
días por los ataques sin sentido ni destino que el Poder Ejecutivo, a través
del Congreso y del Consejo de la Magistratura, sigue organizando contra la
Justicia. La Presidente parece ignorar que desde Comodoro Py se están acercando
metro a metro a su propia persona y a las de sus hijos y, en lugar de intentar
contemporizar, sigue agraviando a quienes, aquí y en el exterior, decidirán su
futuro.
Con
la misma inocencia que llevó a la designación casi por unanimidad de la Dra.
¡Giles! Carbó como Procuradora General, que tanto daño está causando a la
República, nuevamente se cayó en la estupidez de creer en los dichos de la Dra.
Gabriela Vázquez al asumir como Presidente del Consejo de la Magistratura: juró
que no era kirchnerista y que siempre votaría en forma independiente de
banderías políticas. Bastaron escasos días para que la superchería quedara a la
vista, y el Administrador General del Poder Judicial, que maneja el presupuesto
del Poder Judicial, fue reemplazado por un joven de La Cámpora, Dr. Cholakian,
con su decisivo voto "independiente".
Mucho
más grave ha sido una resolución del Consejo, manifiestamente inconstitucional
y reñida con la jurisprudencia de la Corte, adoptada también con el voto de la
Dra. Vázquez, que permitió que se reemplazara al fallecido Juez Federal de la
Plata, Dr. Blanco, por un secretario recién designado y catapultado a esa función
por lo más granado del Frente para la Victoria bonaerense; la prisa y el
mamarracho son comprensibles: tiene jurisdicción electoral sobre toda la
Provincia de Buenos Aires (40% del padrón nacional) y, como tal, será quien
resuelva sobre listas, boletas, impugnaciones, etc., en las próximas
elecciones. Si recordamos cuántas historias de fraude se han dado en el
Conurbano, comenzará a entenderse este paso del Gobierno.
Sin
embargo, el Dr. Durán, que asumió en un procedimiento express el mismo viernes,
carece del esencial acuerdo del Senado federal y, por ello, su designación
será, con certeza, revocada más temprano que tarde por la misma Corte Suprema.
Entonces me pregunto, ¿qué sentido tuvo este nuevo atropello a la Constitución,
si tendrá tan pocos efectos prácticos?; la conclusión no puede ser más
concluyente: Cristina lo hizo con el único fin de ocupar el centro de la escena
y demostrar, de cara exclusivamente a sus incondicionales, que sigue siendo la
reina y señora de la Argentina. El Gobierno, consiguió algo inesperado: la
reacción unánime y uniforme de toda la oposición, que salió en masa a repudiar
este irracional comportamiento del oficialismo. Una vez más, la inexistencia de
una política madura y democrática lleva a la judicialización permanente de los
actos gubernamentales.
En
el mismo sentido fue la pretendida adecuación forzosa del grupo Clarín a la
voluntad de la Presidente, escenificada con gran pompa por el bufón Sanatella,
que ya ha sido abortada por la Justicia. Para completar el ridículo del
personaje, esta misma semana aprobó la continuidad de Telefónica como dueña de
Telefé, algo tan contrario a la Ley de Medios, sancionada bajo el rimbombante
propósito de democratizar las voces, como el permiso otorgado a las telefónicas
para ofrecer el triple play. Pero el kirchnerismo nunca se ha caracterizado por
su coherencia.
Otra
imbecilidad de la oposición la llevó a creerle al Gobierno cuando aprobó el
nuevo Código Civil y Comercial de la Nación diciendo que sólo entraría a regir
el 1° de enero de 2016; rápidamente, los inefables senadores Picheto y Anímal
Fernández presentaron un proyecto, ya convertido en ley, que adelanta la fecha
de vigencia al 1° de agosto de 2015, por lo cual -salvo que la Corte decidiera
otra cosa- los funcionarios actuales tendrán garantizada la indemnidad de sus
patrimonios personales frente a los actos que cometan en ejercicio de la
función.
El
Poder Ejecutivo, que desde la muerte del Nestornauta se transformó en un
aparato centrífugo para viejos incondicionales, descabezó a la Secretaría de
Inteligencia (SI), expulsando a los santacruceños Icazuriaga y Larcher de su
jefatura. La designación del incombustible Oscar Parrilli -fue el miembro
informante de la ley de privatización de YPF en los execrados 90´s- prueba que
ya el kirchnerismo se ha quedado sin semillero de funcionarios para los puestos
clave, como lo ratifica el regreso de Anímal a la Casa Rosada, ahora en la
Secretaría General de la Presidencia; cuánto durará Koki Capitanich como
cretino oficial y Jefe de Gabinete se ha transformado en uno de los ítems
centrales de las agencias de apuestas. A los chicos de La Cámpora les da el
"piné" (Pignet) para ladrones y obsecuentes, pero han demostrado que no sirven para administrar nada; sin
embargo, allí apareció Mena, integrante de esa agrupación privilegiada, para
asumir como segundo de la "SI, Señora" y encargarse de la
domesticación de los jueces, que no tendrá éxito alguno.
La
remodelación política del tradicional edificio de la calle 25 de Mayo traerá
dos consecuencias, a cual más grave. La primera es que concentrará más poder de
extorsión política en el Gral. Milani, sin dudas un futuro Almte. Massera, y la
otra, la apertura de una caja de Pandora muy complicada. El famoso y ahora
despedido Jaime Stiusso, gran espía oficial de la Nación desde hace más de 40
años y bancado por todas las grandes agencias del mundo, es dueño de demasiados
secretos sobre todos y cada uno de los hombres del poder en la Argentina, y no
dudo que los utilizará para conseguir sus propios fines, cualesquiera que ellos
sean. Debe haber ya muchísimos preocupados, en especial en Balcarce 50, ante la
eventual difusión del contenido de sus extravagantes "carpetas", tan
utilizadas por todos los presidentes que supimos conseguir para frenar a enemigos.
Pero
más allá de esos fuegos de artificio, la realidad muestra que la Argentina real
se sigue despedazando, de la mano de la inseguridad producida por el
narcotráfico, de la retracción brutal de la actividad económica, del
crecimiento de la pobreza y de la indigencia, de la caída de nuestro comercio
exterior, del deterioro de las economías regionales y, ahora, de la
incertidumbre respecto al futuro de Vaca Muerta, por la dramática reducción de
los precios del petróleo.
Sólo
me queda desearle una muy feliz Navidad, para usted, los suyos y la castigada
Argentina. Que el niño Jesús, al nacer, nos traiga a todos -en especial, a los
presos políticos- la esperanza de un mañana mejor.
Enrique
Guillermo Avogadro
ega1@avogadro.com.ar
@egavogadro
EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, DIARIO DE OPINIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, ACTUALIDAD INTERNACIONAL, OPINIÓN, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, REPUBLICANISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA,ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA,CONTENIDO NOTICIOSO,
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentario: Firmar con su correo electrónico debajo del texto de su comentario para mantener contacto con usted. Los anónimos no serán aceptados. Serán borrados los comentarios que escondan publicidad spam. Los comentarios que no firmen autoría serán borrados.