En
enero 2003, cuando se estableció el control de cambio, el Presidente afirmó que
el control de cambio era político. El venezolano que requiere divisas para su
actividad económica, consumidor o emprendedor, tomó tiempo para comprender el
alcance de esas palabras. Esa asimetría de información no le permitió
comprender que el objetivo del Gobierno es el empobrecimiento y la
transferencia al Estado de los activos para su actividad económica. La
propiedad privada "socialista" permitida es realenga, relancina, sin
protección a sus derechos de propiedad, y sobre todo, que dependa del gasto del
Gobierno.
El
control político sobre la liquidez internacional en caja del Tesoro, BCV y
fondos públicos, se estableció, a diferencia de anteriores controles de cambio,
en un sistema de racionamiento sobre privilegios y depredación, en razón de los
mecanismos que definen los precios del dólar. Un control político de las
divisas, bajo monopolio del Gobierno, con criterios restrictivos no económicos,
que administra un régimen de adquisición de divisas operado con mecanismos
expresos depredadores de los flujos de caja de las empresas.
Con
ese objetivo, el Gobierno fundó un mercado para que un swap de valores en Bs.
se canjeara con valores en dólares y así en una operación financiera no
cambiaria- se adquiriera la divisa off shore, pagando una prima en relación al
precio del dólar racionado por Cadivi.
Así, nace el dólar "permuta" cuyo precio variaría en el
mercado al ritmo de la corrupción y la escasez en Cadivi. Ese mercado
"paralelo", no fue y no es un mercado cambiario, allí se ejecuta
canje de valores y la divisa se adquiere off shore.
El
BCV no interviene, sus reservas no se transan allí, sino en Cadivi,
independientemente que ese mercado off shore permuta o Sitme- en ocasiones haya
sido o sea liquidado por Pdvsa o el Tesoro.
El
Gobierno modificó posteriormente el mercado, para que el "permuta"
funcionara con canje de bonos públicos en Bs. y $; ese mecanismo depredador se
enlazó con el endeudamiento público y de Pdvsa. El permuta incorporaba entonces
los costos de las distorsiones del control de cambio depredación en estrictu
sensu -así como el costo por endeudamiento público, llegando el dólar permuta a
triplicar el precio del dólar oficial.
Hay
que aclarar -dadas las confusiones en la opinión pública- la naturaleza del
mercado permuta que funciona como Sitme. Esas transacciones en títulos públicos
no son mercado cambiario con efectos monetarios, esas operaciones off shore no
causan ni esterilización ni expansión del dinero base. La base monetaria se
afecta cuando las divisas en manos del Tesoro, Pdvsa y otros fondos se venden
al BCV para operaciones internas en bolívares. Queda claro que las permutas que
operaron y operan en Sitme no implican ni entrada ni salida de capitales, ¡lo
que no entra, no sale!
Este
tapón para controlar el precio del dólar Sitme creó un mercado adicional, que
la gente menciona "negro", lo cual no es correcto, aunque operaciones
hechas en ese mercado reflejan una prima mayor que en el Sitme, dado que
consume otros riesgos, -legitimación de capitales- a cambio de liquidez
inmediata.
El
régimen cambiario, es un sistema de depredación con una característica común,
todos necesitan las divisas a cualquier precio, todos se depredarán con fuerza
en la medida que el racionamiento Cadivi/Sitme no satisfaga la demanda por
divisas, los agentes económicos se irán por los caminos verdes, aunque no
ilegales, para negociar divisas en un mercado que los depreda, fenómeno que
emerge del monopolio del gobierno sobre la divisa.
El
Gobierno administra un precio por las divisas menor al del "mercado"
-Cadivi- y fija las primas de en el mercado de bonos para adquirir dólares off
shore -Sitme-, empujando a individuos y empresas a transar dólares off shore y
bolívares in shore a precios que incorporan mayor prima de riesgo, incluido el
de legitimación. El mecanismo depredador, opera así bajo monopolio del
Gobierno, con dólar barato, y escaso y racionado con fuerte intervención del
mismo y otros a precios por encima de su valor de mercado. Es un sistema de
precios distorsionados y manipulados; es decir, el monopolio que ejerce el
Gobierno bajo el control político en Cadivi, BCV y Sitme, convertido al mercado
del dólar en un medio de depredación del sector privado, quien inhabilitado de
adquirir libremente dólares, no le queda otra que sobrevivir depredado.
El
fenómeno de depredar lo estudia la
economía como aquella situación en la cual empresas privadas y publicas con diferentes
flujos de caja, e instituciones del Estado/Gobierno inducen a sus competidores
y asociados a operar en un umbral de restricciones (control de cambio, carencia
de reglas de mercado y arbitraje, destrucción del marco jurídico y
debilitamiento de los derechos de propiedad, ) para que sus naturales fuentes
de creación de riqueza se restrinjan o destruyan, y se conduzcan hacia su
desaparición definitiva.
@alexguerreoe
EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA,CONTENIDO NOTICIOSO,
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentario: Firmar con su correo electrónico debajo del texto de su comentario para mantener contacto con usted. Los anónimos no serán aceptados. Serán borrados los comentarios que escondan publicidad spam. Los comentarios que no firmen autoría serán borrados.