CHARITO ROJAS, ¿QUIÉN PAGA LA CAMPAÑA DEL PSUV?

Los cálculos estiman que esta campaña está costando alrededor de 2.500 millones de dólares. Y vienen del tesoro nacional. ¿Qué dice el CNE de esto? Estamos a la espera de respuestas.

“Aun con la peor de las dificultades, yo haré todo el esfuerzo que tenga que hacer para conducirlos a ustedes (pueblo) a una nueva y gran victoria el próximo 7 de octubre”. Comandante Presidente Hugo Chávez.

Con esta frase del candidato a la reelección comienza un documento que me hacen llegar, titulado “Plan de acciones Batalla de Carabobo. (2012-2013)”. En él se establecen las etapas a cumplir en la campaña electoral presidencial.

Aunque no certifico la autenticidad del documento, sus detalles hablan de una autoría oficial y lo hacen altamente creíble. El uso de fondos públicos de PDVSA, de las misiones, la banca pública, ministerios y otras dependencias, ya reconocido en este documento, será material de apoyo para los juicios que por corrupción y malversación deberá asumir la justicia.

Los fondos públicos serán manejados a través de consejos comunales, gobernaciones y alcaldías, que los traspasarán a los Comandos Carabobo nacional, regionales y municipales. Parte activa en este manejo de fondos tendrían, según este documento, el Frente Francisco de Miranda, el PSUV y algunos comandos militares.

Se estima que el costo de la campaña del Comandante estaría en el orden de 2.500 millones de dólares. Lo de la donación de un día de salario y las rifas locales serían solo el parapeto para esconder el manejo del volumen de fondos públicos.

El documento comienza con una introducción donde se plantea la pugna entre “la ideología burguesa de la clase históricamente dominante, respaldada por el imperialismo norteamericano” y “la continuidad de las ideas bolivarianas, de construir una sociedad justa, igualitaria, democrática y participativa que responda a los intereses de las grandes mayorías que vivieron durante décadas privadas de sus derechos”.

Una vez culminado el bla bla ideológico, en el cual por supuesto no falta Fidel, el Comando Carabobo pasa a detallar las estrategias electorales del PSUV.

La campaña electoral presidencial se desplegara en cinco fases. El informe señala objetivos claros: a. recuperar la disminución de votos que se evidencia entre el 2006 y el 2009 (996.312), para volver a los 7.309.080 alcanzados en el 2006. b. reducir la abstención en un 10 % en los centros donde ganaron con más del 60 %, lo que significarían 849.981 votos nuevos. c. obtener el apoyo electoral de los nuevos inscritos en el REP, calculados en 1.200.000.

Cumpliendo estas metas, según el PSUV, sus votos estarían en el orden de los 9.359.061, representando el 49.50 % del total de electores del registro electoral permanente para el año 2012, que se calcula en unos 18.5 millones.

Esa es la meta y para lograrla necesitan acciones y recursos. Según el documento del Comando Carabobo, la líneas a seguir en el discurso de campaña son:

Potenciar el discurso de amor de Chávez con el pueblo; fortalecer el centralismo; vincularse estrechamente con las comunidades para el “establecimiento ideológico” y la “táctica en batalla”; irreverencia en la discusión y unidad en la acción, unido a la disciplina en el cumplimiento; propaganda política, agitación y movilización para “desenmascarar la burguesía” y potenciar al Comandante como “garantía de paz y esperanza”.

En el informe se “priorizan” 182 parroquias, consideradas vitales para la ganancia final. En ellas se acentuarán las misiones, especialmente la de vivienda. Pero todos estos planes, estrategias, tácticas y logísticas necesitan un elemento fundamental: dinero, mucho dinero. ¿Cuánto dinero necesita y cuales son las acciones? ¿De dónde sacará el Comando Carabobo tanta plata? Veamos.

LA CAMPAÑA DEL COMANDO CARABOBO

La campaña presidencial está organizada en 5 etapas.

“ORGANIZACIÓN PARA LA BATALLA”

La primera es “Organización para la batalla” y va del 23 de febrero al 15 de abril. Es la parte de diseño y estudio para que el Frente Francisco de Miranda actúe conformando los comandos de campaña e incorporando nuevos electores al REP. Esta parte incluye “encuentro con los servidores públicos de los ministerios y entes dirigidos por cuadros del Frente Francisco de Miranda” y “activación de los movimientos integrantes de grupos de poder popular atendidos por el ministerio de las comunas”. También el “inicio de las fiestas de la vida en revolución parroquial (3 lugares por cada parroquia priorizada = 3×182= 546), donde se impulsara la “cedulación en los nuevos urbanismos, parques nacionales, salas de batalla social y en los territorios en donde se estará realizando el casa por casa”.

Aquí ya se habla de transferencia de recursos a los consejos comunales vinculados a la meta de construcción de 43.000 viviendas (1era fase)” y de “asignaciones económicas a 10.000 familias por la misión Hijos de Venezuela y 11.000 por la misión Madres del Barrio”.

“AVANCE HACIA EL ATAQUE”

La segunda fase de la campaña del PSUV es “Avance hacia el ataque”, del 15 de abril al 1º de julio consistirá en el patrullaje casa por casa para la búsqueda de votantes y el inicio de la agenda de movilizaciones. En esta etapa se tomará la celebración del 9º aniversario del Frente Francisco de Miranda como un ensayo de organización de movilizaciones. Continuará la formación básica de voceros del poder popular y el inicio de brigadas socialistas de trabajo cuya meta es 53.565 brigadistas en 3.571 brigadas. Estos brigadistas recibirán salario mínimo por parte del Ministerio de las Comunas. También prevén “transferencia de recursos a las salas de batalla social para la ejecución de proyectos de bajo costo y alto impacto”.

En esta segunda etapa se otorgarán asignaciones económicas a 250.000 familias por la misión Hijos de Venezuela y 150.000 por Madres del Barrio, serían unos dos salarios mínimos por persona. Se transferirán recursos para el arranque de los 300 proyectos productivos en el marco de la gran misión saber y trabajo, unos 50 salarios mínimos por proyecto. También se financiarán 130 camiones “utilitarios”, que son en realidad camiones multifuncionales, tipo 750, con sonido, pantallas, planta eléctrica, plataforma para concentraciones, a un costo de 1.300.000 Bs. Esta previsto igualmente regalar 200.000 electrodomésticos a través del plan Mi casa bien equipada.

“ATAQUE GENERAL”

La fase 3 del plan se llama “Ataque general” y va del 1º de julio al 6 de octubre, el lapso oficial de la campaña electoral. Allí arrecian las ayudas y los financiamientos. Establece el “casamiento de funcionarios públicos y miembros del poder popular en los centros de votación “priorizados”; transferencia de recursos al poder popular para la ejecución de proyectos ordinarios infraestructura social y servicios; continuación de las fiestas de la vida en revolución y la programación recreativa y formativa en 27 parques nacionales; la realización del “plan vacacional comunitario” para un millón 200 mil personas y el “reto juvenil” para 800 mil jóvenes; asignaciones económicas a 350.000 familias; transferencia de recursos para 300 proyectos productivos más de la misión Saber y Trabajo; atención a casos sociales resultantes del trabajo y recorridos en las parroquias priorizadas; donación de 400.000 electrodomésticos del plan Mi casa bien equipada. Y por supuesto, para la campaña, la compra de 170 camiones utilitarios más.

DESPLIEGUE DE FUERZAS Y DEFENSA DE LA VICTORIA EN LA CALLE

La cuarta etapa habla de despliegue de fuerzas para movilizar el día de la votación. Extraoficialmente hemos recibido testimonios de que va a haber pagos por cada votante que lleven hasta el centro electoral. La quinta y última parte del plan es la “defensa de la victoria en la calle”. Y cosa curiosa el candidato no aparece en ninguna parte de este plan.

Como ven, el plan Batalla de Carabobo mezcla en un solo pote a funcionarios con militantes del PSUV, utiliza el presupuesto nacional para financiar una campaña que está basada en la acción del gobierno. En este pasticho hay una gran realidad: el PSUV, el candidato Chávez y todos los funcionarios públicos están incursos en delitos electorales al utilizar la cosa pública para sus fines electorales.

Los cálculos estiman que esta campaña está costando alrededor de 2.500 millones de dólares. Y vienen del tesoro nacional. ¿Qué dice el CNE de esto? Estamos a la espera de respuestas.

Charitorojas2010@hotmail.com

@charitorojas

EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA