domingo, 2 de mayo de 2010

¿FUERA DE LA CONSTITUCIÓN, TODO? ANTONIO JOSÉ MONAGAS, 02 DE MAYO 2010

Las realidades políticas del subdesarrollo, generalmente están enmarcadas por eventos que reflejan gruesas contrariedades y contradicciones propias de gobiernos dirigidos por quienes desconocen la complejidad característica de procesos sociales democráticos. Pero además creativos, como en efecto son todos aquellos que exhortan las libertades como derechos fundamentales. El populismo, por ejemplo, sirve de escenario para incitar actitudes políticas, lejos de acatar compromisos electorales o lineamientos de gobierno. Por esta razón se generan abusivas diferencias entre la prédica proselitista y el hecho político concreto. Es efectivamente el terreno en el cual se abonan graves divergencias para luego convertirse en causales de nuevas crisis o recrudecimiento de conflictos anteriores.

En Venezuela, esta situación es sencillamente desgarradora. El apetito de los actuales gobernantes por conservar el poder político sin plazo ni parangón alguno, ha devenido en garrafales decisiones que, en ningún momento, se han compadecido de los señalamientos que pauta el texto constitucional. Sobre todo, cuando refiere que “Venezuela se constituye en un Estado democrático y social de Derecho y de Justicia” (Artículo 2º, Constitución de la República, 1999) lo cual como principio jurídico-político, arraiga fundamentos que igualmente exaltan consideraciones que buscan ordenar el sistema político venezolano en aras de garantizar el pluralismo político, el carácter participativo de la sociedad en asuntos públicos, el sentido descentralizado de la administración de gobierno y la condición alternativa de la conducción de la nación.

Sin embargo, las realidades son demostrativas de todo lo contrario. Fundamentalmente, al observar y escuchar las arengas de quien funge como presidente de la República cada vez que el fanatismo constriñe su ya obcecada visión del mundo político nacional. En contrapartida, puede recordarse que muchas de sus peroratas estuvieron presididas por rimbombantes exclamaciones en torno a la reivindicación de ideales democráticos que canalizarían el devenir responsable de la gestión de gobierno. El personaje de marras aludía al aforismo: “dentro de la Constitución, todo; fuera de ella, nada”. Mas todo quedó distante, pues las realidades corrieron por cauces diferentes. La praxis política del presidente, reveló no sólo una intención de rebatir lo suyo expuesto. También dejó ver que su autoridad le habría concedido facultades para declararse contra lo argumentado constitucionalmente ya que sería el objetivo revolucionario. Actitudes éstas que bien han sido acompasadas y acompañadas por decisiones tomadas desde los restantes poderes nacionales a saber: el legislativo, el judicial, el electoral y el ciudadano. Todo ello soportado por la fuerza militar ordenada por un Alto Mando al margen de su condición institucional y equilibrada. Se tiene entonces que expropiaciones, acusaciones, detenciones, confiscaciones y donaciones se hacen a desdén del debido proceso jurídico-legal por lo que puede concluirse que el despelote está potenciado. Se está haciendo lo contrario. O sea, fuera de la Constitución, todo.

EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, MOVIMIENTO REPUBLICANO MR, REPUBLICANO, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES ASAMBLEA NACIONAL, UNIDAD ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentario: Firmar con su correo electrónico debajo del texto de su comentario para mantener contacto con usted. Los anónimos no serán aceptados. Serán borrados los comentarios que escondan publicidad spam. Los comentarios que no firmen autoría serán borrados.