domingo, 18 de enero de 2009

*VENEZUELA: EL ABC DE UNA DICTADURA, MARY ANASTASIA O'GRADY, PUBLISHED ON ELCATO.ORG (HTTP://WWW.ELCATO.ORG), 2009-01-14

Los optimistas han teorizado durante mucho tiempo que Hugo Chávez, presidente de Venezuela, sufriría su Waterloo cuando se pinchara la burbuja petrolera. Pero, con la caída de 75% del precio del petróleo respecto a sus picos del año pasado y el país todavía firmemente bajo la mano de hierro del régimen, esa teoría debe ser revisada.

Es cierto que el descontento popular con el chavismo ha ido en aumento mientras caía el precio del petróleo. De hecho, es probable que el desencanto aumente en los próximos meses a medida que la economía tambalea. Pero, habiéndose valido de los años del boom para consolidarse en el poder y destruir todos los controles institucionales al poder, Chávez tiene pocos incentivos para redirigir el país hacia el pluralismo político incluso cuando muchos venezolanos estén hartos de su tiranía. En todo caso, bien podría volverse más agresivo y peligroso a medida que se desvanece el fulgor de su antorcha revolucionaria en 2009 y se siente más amenazado.

Ciertamente, no cabe esperar que las "elecciones" importen demasiado. Chávez ahora controla por completo el proceso, desde las listas de votantes a los recuentos totales tras el cierre de urnas. En medio de una presión política, aceptó la derrota en 2007 de su intento de llevar a cabo una reforma de la Constitución para perpetuarse en la presidencia de forma vitalicia. Pero, ¿y qué? Esa derrota le permitió mantener un semblante democrático y ahora ha decidido que habrá otro referendo sobre la misma cuestión en febrero. Se puede presumir que Venezuela repetirá este ejercicio hasta que se produzca la respuesta buscada.

Todos los estados policiales convocan "elecciones". Pero también se especializan en combinar el uso monopolístico de la fuerza por parte del estado con un monopolio del poder y el control de la información. Tomadas en conjunto, estas tres armas anulan la disensión con facilidad. Venezuela es un ejemplo claro de ello.

El gobierno de Venezuela es ahora un gobierno militar. Chávez purgó el liderazgo de las fuerzas armadas en 2002 y reemplazó los oficiales despedidos con otros leales a su causa socialista. Como sus contrapartes en Cuba, estos comandantes reciben una buena compensación. La falta de transparencia hace imposible saber cuánto reciben por su lealtad, pero se puede asumir que no han quedado fuera de la fiesta petrolera de la que los chavistas obedientes han disfrutado a lo largo de la última década. Incluso si mengua la riqueza disponible este año, lo más probable es que no disminuyan ni su importancia ni su recompensa.

Chávez también ha tomado el control de la Policía Metropolitana en Caracas, ha importado agentes de inteligencia de Cuba y ha armado a sus propias milicias bolivarianas, cuyo trabajo es hacer cumplir la ley en los barrios. Si la población decide estar cansada de ser gobernados por un solo hombre, el chavismo tiene suficientes armas a mano para convencerla de lo contrario.

Sin embargo, el arte de la dictadura ha sido muy refinado desde que Stalin mató a millones de su propia gente. Los tiranos modernos entienden que hay muchas maneras de manipular a sus sujetos y la mayoría no requieren el uso de la fuerza.

Una medida que Chávez utiliza mucho es el control de la narrativa. En las escuelas del gobierno, se adoctrina a los niños en el pensamiento bolivariano. Mientras, el estado ha anulado la independencia de los medios de comunicación y ahora domina toda la televisión gratuita del país. Esto le permite al gobierno sumergir a los pobres en el dogma antimercado de Chávez. Su público cautivo recibe repetidamente el mensaje de que las dificultades — incluyendo una inflación de 31% el año pasado— son el resultado de los capitalistas cuyo único norte son las ganancias, los cargos a intermediarios y el consumismo.

La pantalla Orwelliana también se utiliza para avivar el sentimiento nacionalista contra los demonios extranjeros, como Estados Unidos, Colombia e Israel. El público ha presenciado la violencia en Gaza a través del prisma de Hamás y la semana pasada Chávez armó todo un circo con la expulsión del embajador de Israel de Caracas.

Las inversiones en revoluciones en América Latina pueden haber disminuido debido a la caída de ingresos. Pero los acercamientos a Irán y Siria probablemente continuarán ya que esas relaciones podrían servir como fuente de financiación al proyecto militar de Chávez. En diciembre, el diario italiano La Stampa reportó haber visto pruebas de un pacto entre Caracas y Teherán en el que Irán usaría aviones venezolanos para traficar armas y Venezuela recibiría ayuda militar a cambio. Este mes, funcionarios turcos interceptaron un cargamento iraní con destino a Venezuela cuyo contenido serían materiales para fabricar explosivos.

A pesar de todo esto, el arma más efectiva del estado policial sigue siendo el control de Chávez sobre la economía. El estado expropia libremente lo que quiere —un centro comercial en Caracas es la última apropiación anunciada por Chávez— y la libertad económica ha dejado de existir. Es más, el estado ha impuesto estrictos controles de capital, imposibilitando el ahorro y el comercio en moneda dura. Los analistas prevén otra gran devaluación del bolívar en un futuro no muy distante. El sector privado ha sido destruido, excepto para aquellos que han se han rendido al tirano.

La caída en ingresos del petróleo podrá empobrecer al estado, pero la oposición es todavía más pobre. Organizar una rebelión en contra de un Chávez menos acaudalado continúa siendo un reto difícil.

Mary Anastasia O’Grady es editora de la columna de las Américas del Wall Street Journal.

Este artículo ha sido reproducido con el permiso del Wall Street Journal [1] © 2009
Dow Jones & Company, Inc.
Todos los derechos reservados.

*LA REVOLUCIÓN CHAVISTA SE HA DEGENERADO EN UNA CARICATURA, TAL CUAL, JOSÉ GUERRA, 13/01/2009

José Guerra analiza en su columna publicada hoy en Tal Cual analiza la actual crisis que atraviesa el proyecto socialista encabezado por el presidente Chávez y las razones de su fracaso en lo político, social y económico.

Esta es su columna completa:

Ciertamente ya el proceso que ahora encabeza Hugo Chávez no es el mismo que lo inspiró hace años cuando la fuerza de la espontaneidad, la ilusión y la esperanza eran su razón de ser. La idea de un país distinto y mejor manejado, con probidad, ha dado paso a una gestión gansteril, orientada por los desembolsos económicos para ganar adeptos y retener mediante la coacción a aquello que tienen dudas o que han marcado distancia. Así no se sostiene el paradigma de un cambio.
La revolución chavista es un proyecto decadente, envejecido prematuramente, corrompido hasta los tuétanos, administrado en sus estructuras fundamentales por una especie de pandilla militar-cívica que ha hecho del peculado, el tráfico de influencias y el nepotismo su propósito.
Hoy se registran más millonarios en las filas chavistas que en los hombres de empresas tradicionales de Venezuela, mediante una acumulación originaria de capital violenta, relampagueante, signada por la corrupción, los contratos con entes públicos en condiciones ventajosas sin que medie ningún esfuerzo productivo o destreza personal salvo aquella que deviene de la relación con la gente del poder.

Los nuevos ricos, disfrazados de empresarios constituyen una categoría social cuya única motivación no es producir sino lucrarse a la sombra del tesoro público y para ello adoptan nombres de asociaciones empresariales que no son tales sino focos para la tramitación y cobro de comisiones por los créditos recibidos o los contratos obtenidos.

No ha podido el gobierno conformar un sector de gente de empresas con vocación productiva ni se registra grupo que haya arriesgado su capital para impulsar industrias porque esos falsos capitalistas lo que hacen es trabajar con los dineros del gobierno y eso lo sabe Hugo Chávez, quien tolera y permite ese enriquecimiento fraudulento. O es que alguien se atreve a pensar que Chávez no sabe de las andanzas de la nueva oligarquía del dinero en Venezuela.
Sin embargo, lo que ocurrió en las recientes elecciones de gobernadores y alcaldes es la prueba más palpable de la degeneración del proyecto chavista.

Que un gobierno haya tenido que apelar al reparto descarado de dinero para asegurarse los votos, sugiere que algo anda muy mal en las filas gobierneras.

Cuando un partido invoca el intercambio mercantil de un voto por una suma de dinero, su tiempo está contado porque la política y la ideología no son artículos a los que se le puede imputar un precio. Fue descarado las transacciones de votos por dinero o productos de línea blanca, tales como licuadoras, televisores, lavadoras, financiados todos ellos por fondos, no del PSUV sino de Pdvsa que ha servido, bajo la administración de Rafael Ramírez y sus socios directivos, como caja chica para el apoyo de actividades partidistas sin ningún recato o cuidado de las formas.
Hoy puede establecerse que las arcas de Pdvsa cumplen una doble función: la primera, servir como entidad empresarial del Estado y la segunda como órgano financiero del partido de gobierno.

Aquí reside otra de las taras de la revolución chavista, el haber hecho del Estado, el gobierno y su partido uno solo y mismo sujeto. Ya en Venezuela se perdió la línea que dividía lo que son asuntos del Estado de los del gobierno o del partido.

Los colores y símbolos son los mismos, las consignas son idénticas e iguales quienes se transmutan, una vez como vocero del gobierno y otra como jefe de un partido, usando para ello los dineros públicos sin ningún pudor.

Las revoluciones son obras colectivas cuando un sentimiento, una idea, no el dinero, se apoderan de una población. Chávez tuvo ese impulso pero lo perdió y por eso recurre al intercambio de lealtad política por plata constante y sonante que es lo que muchos de sus partidarios le exigen. Chávez es el candidato a las juntas parroquiales, alcaldías, gobernaciones y hasta los sindicatos. Sin él nada existe y por eso estimula el culto a su personalidad.

La pérdida de la fuerza vital que requiere una revolución hace que muy pocos vayan a sus actos si no son transportados y sin el pago del correspondiente viático, nadie se moviliza sin que se le asegure la cancelación de un estipendio. La carencia de aliento se demostró palmariamente durante la recolección de firmas para apoyar la enmienda para la reelección indefinida. Poco entusiasmo y espontaneidad.

Lo que si abundó fue la intimidación a los empleados públicos mediante los recorridos por las oficinas públicas de los agentes del partido o la instalación de kioscos en los ministerios y demás entes del Estado para velada o descaradamente obligar a firmar a los trabajadores de esas dependencias.

Ello denota una debilidad extraordinaria pero más que todo que la fuerza motivante ya no existe o está sustancialmente mermada y que la cacareada revolución se desnaturalizó y pareciera tener sus días contados aunque todavía conserve una fuerza popular respetable, que nada tiene que ver con aquella que llevó a Hugo Chávez al poder. Está herida la revolución chavista, por su individualismo, sectarismo, corrupción y porque Chávez piensa que si no es él nadie puede ser líder. La revolución chavista se ha degenerado en una caricatura.

*LA PREGUNTA DE LA ENMIENDA ELABORADA POR LA PRESIDENCIA DE LA REPÚBLICA, MANDADA A LA ASAMBLEA NACIONAL, QUIEN SE LA ENTREGO AL CONCEJO NACIONAL ....

"¿Aprueba usted la ampliación de los derechos políticos de las venezolanas y venezolanos en los términos contemplados en la enmienda de los artículos 230, 160, 162, 174 y 192 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, tramitada por iniciativa de la AN, al permitirse la postulación de todos los cargos de elección popular de modo que su elección sea expresión exclusiva del voto del pueblo?"


Artículo 230: "El período presidencial es de seis años. El Presidente o Presidenta de la Republica puede ser reelegido o reelegida de inmediato para un nuevo período."

Artículo 160: "El gobierno y administración de cada Estado corresponde a un Gobernador o Gobernadora. Para ser Gobernador o Gobernadora se requiere ser venezolano o venezolana, mayor de veinticinco años y de estado seglar. El Gobernador o Gobernadora será elegido o elegida por un período de cuatro años por mayoría de las personas que voten. El Gobernador o Gobernadora podrá ser reelegido o reelegida, de inmediato y por una sola vez, para un nuevo período."

Artículo 162: "El Poder Legislativo se ejercerá en cada Estado por un Consejo Legislativo conformado por un número no mayor de quince ni menor de siete integrantes, quienes proporcionalmente representarán a la población del Estado y a los Municipios. El Consejo Legislativo tendrá las atribuciones siguientes:
Legislar sobre las materias de la competencia estadal.
Sancionar la Ley de Presupuesto del Estado.
Las demás que establezcan esta Constitución y la ley.
Los requisitos para ser integrante del Consejo Legislativo, la obligación de rendición anual de cuentas y la inmunidad en su jurisdicción territorial, se regirán por las normas que esta Constitución establece para los diputados y diputadas a la Asamblea Nacional, en cuanto les sean aplicables. Los legisladores o legisladoras estadales serán elegidos o elegidas por un período de cuatro años pudiendo ser reelegidos o reelegidas por dos períodos consecutivos como máximo. La ley nacional regulará el régimen de la organización y el funcionamiento del Consejo Legislativo."

Artículo 174: El gobierno y la administración del Municipio corresponderán al Alcalde o Alcaldesa, quien será también la primera autoridad civil. Para ser Alcalde o Alcaldesa se requiere ser venezolano o venezolana, mayor de veinticinco años y de estado seglar. El Alcalde o Alcaldesa será elegido o elegida por un período de cuatro años por mayoría de las personas que votan, y podrá ser reelegido o reelegida, de inmediato y por una sola vez, para un nuevo período.

Artículo 192: "Los diputados o diputadas a la Asamblea Nacional durarán cinco años en el ejercicio de sus funciones, pudiendo ser reelegidos o reelegidas por dos periodos consecutivos como máximo."

*LA ENMIENDA CONSTITUCIONAL TRAERÍA EL FIN DE NUESTRA DEMOCRACIA, WILFREDO FEO KRISCHKE, DIRIGENTE DE POR UN MEJOR VIVIR, CARACAS 16/01/09. (PS).-

El Secretario de Planificación de la organización política Por Un Mejor Vivir señaló que la propuesta de reelección indefinida para todos los cargos de elección popular significaría el fin de nuestra democracia.
“En Venezuela – explicó Krischke- existe un sistema político netamente presidencialista, en el cual el Presidente es el Jefe de Estado y Jefe de Gobierno, lo que se diferencia enormemente a los sistemas que existen en los países europeos en los que hay reelección, por cuanto en ellos hay gobiernos parlamentarios en los que las funciones de Jefe de Gobierno le son conferidas a un Primer Ministro designado por el Parlamento. Este Primer Ministro designa el Gabinete; mientras que el Jefe de Estado puede ser un funcionario electo por voluntad popular o en algunos casos un monarca”

Por otra parte, Feo Krischke destacó que “este gobierno ha logrado corromper el sistema de una manera tal que el resto de las ramas del poder público están arrodillados ante el Presidente de la República, lo que hace que a la hora de una contienda electoral tenga a su disposición todo el aparato del Estado para hacer campaña electoral .En este sentido, podemos citar como ejemplo lo ocurrido en las pasadas elecciones regionales, en las que el presidente, los ministros, los diputados a la Asamblea Nacional y hasta el Contralor General de la República se sumaron para propiciar la victoria de los candidatos de una tolda política. Es más, los funcionarios públicos saben muy bien lo que ocurre, pues fueron obligados a firmar para la enmienda, además de tantas cosas que han hecho obligados”.

El dirigente de Por un Mejor Vivir, dijo que de aprobarse la reelección para el Presidente y los demás cargos de elección popular, habría candidatos eternos. “Sin duda- expresó- dedicarían su gestión a la campaña para permanecer en el poder y no para solucionar los problemas de la ciudadanía. Prueba de esto es lo ocurrido con el actual Gobierno Nacional que lleva diez años en el poder y no ha logrado abordar seriamente problemas como el desempleo, la inseguridad, la inflación, entre tantos otros.”

El mencionado dirigente político agregó que “la enmienda propuesta no debe ser vista como un traje a la medida de una persona, sino como un cambio en la forma de ver nuestro sistema democrático. Queda entonces en manos de la ciudadanía no permitir que en la Constitución exista un mecanismo que ponga en peligro la alternabilidad democrática.”

Finalmente, Wilfredo Feo Krischke calificó de valiente la posición asumida por varios lideres opositores que aunque ganaron gobernaciones y alcaldías rechazan la propuesta de extender la enmienda a los diferentes cargos de elección popular, por cuanto considera que “gran parte de los diputados a la Asamblea Nacional, los gobernadores, alcaldes, diputados a los Consejos Legislativos y los Concejales del PSUV que apoyan la propuesta ,lo hacen porque ganaron gracias a que se montaron en el autobús de Chávez, es evidente que la mayoría carece de liderazgo político”.