*PREVALECE LA AMBICIÓN POR EL PODER: OFICIALISMO Y OPOSICIÓN ENCARNIZADOS EN TRUJILLO
http://www.diarioeltiempo.com.ve/ Valera, Sábado 16 de Agosto de 2008
SEGUNDO MENDOZA - ramsegmen@yahoo.com - La división existente en el Oficialismo y en la Oposición en el estado Trujillo, hacen presagiar un reñido final en la contienda electoral que se dirimirá el próximo 23 de noviembre a nivel de Gobernación, Alcaldías y Consejo Legislativo.
Tal criterio se sustenta en que hasta ahora, de nada han valido los esfuerzos que hacen chavistas y opositores para concretar la unidad. Ni el discurso de Chávez ni el acuerdo del 23 de enero, lograron que en Trujillo, se presentaran candidaturas unitarias a los citados cargos de elección popular.
Renuncia y abstención
A estas alturas de la campaña, creemos que todavía no hay nada en concreto. Muchas situaciones imprevistas se pueden presentar, como por ejemplo, la renuncia de uno de los candidatos, tanto del oficialismo como de la oposición.
Sin embargo, esta posibilidad no implica que el resultado electoral se facilite para la tendencia que pudo unificarse, porque hay que tomar en cuenta un factor que está en juego y que pudiera incidir en que el desenlace sea cabeza a cabeza, y ese elemento no es otro que la abstención, la cual históricamente se ha ubicado por el orden del 50 por ciento en el estado Trujillo.
Especulaciones numéricas
Al hacer un análisis numérico de lo que pudiera suceder en Trujillo, tenemos que señalar que el Oficialismo tiene como base para los eventos electorales regionales una cifra que está por el orden de los 100 mil votos –claro está, unido. Mientras que la oposición cuenta con un piso 80 mil votos, cuando fue unida contra Chávez en el referendo revocatorio y la reforma constitucional.
A esta situación debemos agregar que según fuentes del Consejo Nacional Electoral (CNE), los nuevos votantes de Trujillo, al igual que en el resto del país, están de vacaciones y el porcentaje de inscritos está muy lejos de la meta.
Ahora bien, si los abstencionistas se convierten en votantes, pudieran marcar la gran diferencia en las elecciones del 23 de noviembre. En este sentido bien vale la pena traer a colación lo que dicen los técnicos: “si rompes la estadística sorprendes”. Lo que sí es cierto es que, en materia electoral captar votos del sector abstencionista, es una acción que puede ser decisiva para inclinar la balanza a favor de cualquier aspiración.
La incógnita para el oficialismo, con dos candidatos a la Gobernación: Hugo Cabezas y Octaviano Mejía. Y para la oposición, también con dúo de aspirantes: Enrique Catalán y Franck Viloria, es quien logra apoderarse del 50 por ciento de su electorado antes de iniciar la campaña electoral de manera formal para solicitar la renuncia del otro. Ambos comandos de campaña estudian con el apoyo de asesores publicitarios y líderes nacionales, acciones y estrategias para captar el mayor número de adeptos y hacer declinar a una de las opciones.
Chávez el gran elector
Por parte del oficialismo, el comando de Hugo Cabezas tiene cifradas esperanzas en el poder comunicacional y la presencia del presidente Chávez en tierras trujillanas. Los politólogos y expertos electorales del Psuv estudian día a día el caso de Trujillo para poder concretar la venida del máximo líder del proceso revolucionario. Hay que recordar que la última referencia de Chávez en Trujillo fue en la Avenida Bolívar en Valera, donde la estructura gubernamental en aquel entonces, le brindó un gran soporte logístico. Ahora la situación es diferente.
En los corrillos políticos regionales, los comentarios y lucubraciones proliferan por doquier. Hay quienes consideran que la situación para Chávez ahora es compleja en Trujillo, sobre todo porque no vino a impulsar a su candidato y la incertidumbre se acrecienta: vendrá o no vendrá. Cuándo lo hará. Será que por culpa de su agenda internacional –que ahora es su obsesión- que no ha venido.
Gílmer Viloria
Por su parte Gílmer Viloria, quien es el hombre fuerte tras la candidatura de Octaviano Mejía, también evalúa el panorama político regional, porque sabe que está en juego su obra de gobierno. Ahora bien, es indudable que la estrategia de las alianzas le funcionó, a tal punto que hay quienes aseguran que las tarjetas del PCV y PPT le sumaron complejidad al escenario electoral de Hugo Cabezas, porque aunque ambos partidos no cuentan con una militancia numerosa, sus siglas sí son conocidas.
El 23 de noviembre si todo se mantiene igual, sabremos a quién le dio resultado la frase de Nicolás Maquiavelo: “Divide y Vencerás”.
http://www.diarioeltiempo.com.ve/ Valera, Sábado 16 de Agosto de 2008
SEGUNDO MENDOZA - ramsegmen@yahoo.com - La división existente en el Oficialismo y en la Oposición en el estado Trujillo, hacen presagiar un reñido final en la contienda electoral que se dirimirá el próximo 23 de noviembre a nivel de Gobernación, Alcaldías y Consejo Legislativo.
Tal criterio se sustenta en que hasta ahora, de nada han valido los esfuerzos que hacen chavistas y opositores para concretar la unidad. Ni el discurso de Chávez ni el acuerdo del 23 de enero, lograron que en Trujillo, se presentaran candidaturas unitarias a los citados cargos de elección popular.
Renuncia y abstención
A estas alturas de la campaña, creemos que todavía no hay nada en concreto. Muchas situaciones imprevistas se pueden presentar, como por ejemplo, la renuncia de uno de los candidatos, tanto del oficialismo como de la oposición.
Sin embargo, esta posibilidad no implica que el resultado electoral se facilite para la tendencia que pudo unificarse, porque hay que tomar en cuenta un factor que está en juego y que pudiera incidir en que el desenlace sea cabeza a cabeza, y ese elemento no es otro que la abstención, la cual históricamente se ha ubicado por el orden del 50 por ciento en el estado Trujillo.
Especulaciones numéricas
Al hacer un análisis numérico de lo que pudiera suceder en Trujillo, tenemos que señalar que el Oficialismo tiene como base para los eventos electorales regionales una cifra que está por el orden de los 100 mil votos –claro está, unido. Mientras que la oposición cuenta con un piso 80 mil votos, cuando fue unida contra Chávez en el referendo revocatorio y la reforma constitucional.
A esta situación debemos agregar que según fuentes del Consejo Nacional Electoral (CNE), los nuevos votantes de Trujillo, al igual que en el resto del país, están de vacaciones y el porcentaje de inscritos está muy lejos de la meta.
Ahora bien, si los abstencionistas se convierten en votantes, pudieran marcar la gran diferencia en las elecciones del 23 de noviembre. En este sentido bien vale la pena traer a colación lo que dicen los técnicos: “si rompes la estadística sorprendes”. Lo que sí es cierto es que, en materia electoral captar votos del sector abstencionista, es una acción que puede ser decisiva para inclinar la balanza a favor de cualquier aspiración.
La incógnita para el oficialismo, con dos candidatos a la Gobernación: Hugo Cabezas y Octaviano Mejía. Y para la oposición, también con dúo de aspirantes: Enrique Catalán y Franck Viloria, es quien logra apoderarse del 50 por ciento de su electorado antes de iniciar la campaña electoral de manera formal para solicitar la renuncia del otro. Ambos comandos de campaña estudian con el apoyo de asesores publicitarios y líderes nacionales, acciones y estrategias para captar el mayor número de adeptos y hacer declinar a una de las opciones.
Chávez el gran elector
Por parte del oficialismo, el comando de Hugo Cabezas tiene cifradas esperanzas en el poder comunicacional y la presencia del presidente Chávez en tierras trujillanas. Los politólogos y expertos electorales del Psuv estudian día a día el caso de Trujillo para poder concretar la venida del máximo líder del proceso revolucionario. Hay que recordar que la última referencia de Chávez en Trujillo fue en la Avenida Bolívar en Valera, donde la estructura gubernamental en aquel entonces, le brindó un gran soporte logístico. Ahora la situación es diferente.
En los corrillos políticos regionales, los comentarios y lucubraciones proliferan por doquier. Hay quienes consideran que la situación para Chávez ahora es compleja en Trujillo, sobre todo porque no vino a impulsar a su candidato y la incertidumbre se acrecienta: vendrá o no vendrá. Cuándo lo hará. Será que por culpa de su agenda internacional –que ahora es su obsesión- que no ha venido.
Gílmer Viloria
Por su parte Gílmer Viloria, quien es el hombre fuerte tras la candidatura de Octaviano Mejía, también evalúa el panorama político regional, porque sabe que está en juego su obra de gobierno. Ahora bien, es indudable que la estrategia de las alianzas le funcionó, a tal punto que hay quienes aseguran que las tarjetas del PCV y PPT le sumaron complejidad al escenario electoral de Hugo Cabezas, porque aunque ambos partidos no cuentan con una militancia numerosa, sus siglas sí son conocidas.
El 23 de noviembre si todo se mantiene igual, sabremos a quién le dio resultado la frase de Nicolás Maquiavelo: “Divide y Vencerás”.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentario: Firmar con su correo electrónico debajo del texto de su comentario para mantener contacto con usted. Los anónimos no serán aceptados. Serán borrados los comentarios que escondan publicidad spam. Los comentarios que no firmen autoría serán borrados.