Junto a la mentira y la violencia, caracteres inherentes a esta ideología
del mal, su naturaleza contraria a la humanidad tiene en la promoción
primigenia de la ¨Lucha de Clases¨, otro rasgo en extremo peligroso para
quienes padezcan su gobierno: Esa capacidad sinigual para alimentarse de todo
aquello que normalmente denominamos miserias, describiendo flaquezas,
debilidades o defectos, desgracias o infortunios, realidades llamadas a ser
superadas e incluso confrontadas por la sociedad, pero que bajo el socialismo
pasan a constituir verdaderos argumentos e instrumentos de dominación social y
una ulterior esclavitud nacional. Veamos.
Es el caso paradigmático de la pobreza. Entendida como la falta o
escasez, involuntaria e indeseable de bienes materiales e inmateriales
necesarios al bienestar integral del ser humano, y por ende objeto de campañas
mundiales proclives a su erradicación, una auténtica prioridad para el
desarrollo de los pueblos del mundo, la pobreza bajo gobiernos socialistas se
convierte en la condición humana indispensable al sostenimiento del poder
político, y como tal la ensalzan como símbolo de una mejor sociedad, la misma
que enaltece a los desposeídos, cuya sobrevivencia depende en exclusiva del
Estado socialista, mientras los jerarcas del régimen mantienen un nivel de vida
cercano a la opulencia, hecho público notorio y comunicacional en la Venezuela
de hoy.
Así entonces, quienes asumimos con humildad y convicción la obligación patriótica
de contribuir al restablecimiento de la efectiva vigencia constitucional
conforme lo establece el artículo 333 de la propia Carta Magna, debemos tener
muy presente que el vigente caos donde a diario el venezolano muere por hambre,
enfermedad o a manos el hampa, en modo alguno constituye garantía de liberación
frente al socialismo, muy por el contrario, es su sello de autenticidad
politica, pues precisamente es en medio del hambre, la enfermedad y la
criminalidad desbordada, en fin en la miseria, donde el socialismo encuentra el
caldo de cultivo necesario al ejercicio pleno de su poder en la medida que una
sociedad depauperada, endeble y temerosa resulta más fácil de esclavizar tal
como lo enseñan los paradigmas socialistas contemporáneos: Cuba y Corea del
Norte.
Así entonces, la necesidad de restaurar la constitucionalidad perdida
desde el 11 de abril de 2002 adquiere hoy mayor urgencia, entendiendo que cada
día bajo régimen socialista implica un mayor debilitamiento en el tejido
demócrata que hoy se resiste a la total esclavitud de Venezuela. Cualquier vía
de las establecidas al efecto en la Carta Magna es válida en la medida que
resulten útiles a la liberación nacional. Ora y labora.
Ronny Padron
caballeropercivall@gmail.com
@caballeroperci
EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS, TWITTER Y/O PAGINAS WEB QUE SEGUIMOS AUTORIZA PUBLICACIÓN,
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentario: Firmar con su correo electrónico debajo del texto de su comentario para mantener contacto con usted. Los anónimos no serán aceptados. Serán borrados los comentarios que escondan publicidad spam. Los comentarios que no firmen autoría serán borrados.