ISAAC VILLAMIZAR, ¿CUÁL DEMOCRACIA IMPERFECTA?

Venezuela no es una democracia imperfecta; menos aún una democracia perfecta. Una democracia es una filosofía de organización política y social que da a los individuos un máximo de libertad y a los gobernantes un máximo de responsabilidad. 

En Venezuela los individuos y el colectivo no tienen ese máximo de libertad. Aquí no hay libertad de la integridad física, psíquica y moral, derecho consagrado en la Constitución. Todos los días somos agredidos por la delincuencia, y los muertos en las calles y morgues son cifras estadísticas que ya no tienen dolientes. Todos los días vivimos con terror, con miedo, con incertidumbre, con ansiedad, que nos causa toda esta crisis que nos carcome la mente. Todos los días vemos cómo la mentira, la corrupción, el ultraje, el peculado, la malversación, el robo descarado de dineros públicos es el modelo que inyectan los gobernantes a su colectivo envenenado con una ideología fracasada.

En Venezuela no existe libertad de credo político, porque cualquier líder opositor, cualquier dirigente estudiantil que pretenda poner en evidencia el descalabro en que han convertido el país estos pseudo gobernantes, le es inventado un expediente, es detenido sin garantías procesales algunas, es enterrado en una mazmorra y es torturado, produciendo en sus familias las peores de las pesadillas. En Venezuela no existe libertad e independencia de actuación de los órganos de los poderes públicos, porque el principio de separación de los poderes desapareció desde que nació la Constitución de 1999, convirtiendo en amo y señor del país a quién detenta la función ejecutiva, apoyado por una fuerza militar que ya sepultó en su memoria aquello de ser “una institución esencialmente profesional, sin militancia política, organizada para garantizar la independencia y soberanía de la Nación  y asegurar la integridad del espacio físico, que está al servicio exclusivo de la Nación,  y en ningún caso al de persona  o parcialidad política alguna.”

En Venezuela la libertad de información se ha deteriorado a tal punto que es notorio, público y comunicacional la hegemonía del manejo del mensaje oficial, con escasas oportunidades para que la oposición exprese en la televisión, radio o impresos ampliamente sus posiciones y críticas, sin que Conatel o la restricción de importación de papel hagan su trabajo censor.

En Venezuela, un país que llegó a tener un inimaginable ingreso petrolero, que llenó la Tesorería Nacional y PDVSA de los dólares de la bonanza que nunca antes había disfrutado la Nación, se dilapidaron todos estos recursos, se malbarataron, se regalaron a los vecinos para comprar sus votos en instancias internacionales y se desviaron hacia cuentas corruptas en bancos extranjeros, sin que ninguno de los órganos de control, de determinación de responsabilidades y el poder judicial actuaran para condenar tanto latrocinio.

Una democracia es aquel sistema de gobierno que brinda a todo el pueblo, sin distinción, prosperidad y bienestar, vida, garantía del ejercicio de todas las libertades constitucionales, justicia autónoma, independiente y expedita, construcción de una sociedad de armonía, orden y paz. Una democracia, primordialmente, es un modo de ser colectivo en donde tienen preeminencia la defensa y el desarrollo de cualquier persona, sin discriminación alguna, y el respeto a su dignidad. En Venezuela nada de esto existe. De tal manera, lo que sí existe en Venezuela es una dictadura comunista perfecta, todo lo contrario a una democracia con todas sus verdaderas cualidades.

Isaac Villamizar

isaacvil@yahoo.com

@isaacabogado

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