martes, 18 de agosto de 2015

ERNESTO GARCÍA MAC GREGOR, LA PENA DE MUERTE

Cada vez que los malandros asesinan a un personaje importante, renace en el país, la ya traqueada discusión sobre la bendita pena de muerte. Tal cual loros reverberantes, los defensores profesionales de estos transgresores, repiten sus argumentos en contra, una y otra vez: que si las raíces son profundas; que si es culpa de la sociedad trabajadora y honrada, que si son recuperables. Siempre se recurre a los derechos humanos de las bestias pero nunca se hace mención de los de las víctimas quienes, por su condición de finados llevan todas las de perder.

Por otra parte, Pinochet, Fujimori y los generales argentinos matan a unos cuantos guerrilleros asesinos, y les cae todo el peso de los susodichos derechos, pero Fidel, masacra a miles de compatriotas en el paredón en un país donde aún se aplica legalmente la pena de muerte, y hasta lo visita el Papa, y para colmo, en dos ocasiones. ¡Bendito sea Dios¡
Se alega hasta la saciedad que en los países donde se aplica la pena máxima, la tasa de criminalidad se mantiene alta, y en realidad, eso ocurre porque no se eliminan suficientes escorias. La pena de muerte, más que un efecto disuasivo lo que busca es extirpar el miembro gangrenado para que no siga haciendo daño. Después de todo, lo dice la Biblia, todos tenemos que morir, sólo es cuestión de tiempo. Sería como adelantar una muerte diferida. Digo yo.
Pero en Venezuela, la pena de muerte, aunque abolida en 1864, se sigue aplicando mediante el sicariato, el linchamiento y el ajusticiamiento. La semana pasada el Gobierno reportó la baja de 52 personas abatidas en la operación OLP en un mes, mientras que tres reclusos murieron en la cárcel de Cabimas (en 2014 un total de 309 reclusos fueron asesinados), todo lo cual coloca a Venezuela en el segundo país con más muertes violentas en el mundo.
Relata el maracaibero y criminalista Elio Gómez Grillo, que estando en Andalucía, España, preguntó por el promedio de homicidios entre los reclusos de la prisión local, pero nadie le entendía la pregunta porque en 38 años había habido tan solo dos muertes naturales.¡Qué rayón!  Que oiga quien tiene oídos…
Ernesto Garcia Macgregor
garciamacgregor@gmail.com
@garciamacgregor

EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, SIN COMUNISMO UN MUNDO MEJOR ES POSIBLE, ESTO NO PUEDE CONTINUAR, TERCERA VIA, DESCENTRALIZAR, DESPOLARIZAR, RECONCILIAR, DEMOCRACIA PARLAMENTARIA, LIBERTARIO ACTUALIDAD NACIONAL, VENEZUELA, NOTICIAS, ENCUESTAS, ACTUALIDAD INTERNACIONAL,

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentario: Firmar con su correo electrónico debajo del texto de su comentario para mantener contacto con usted. Los anónimos no serán aceptados. Serán borrados los comentarios que escondan publicidad spam. Los comentarios que no firmen autoría serán borrados.