La
economía venezolana parece estar entrando en un proceso de colapso. Eso indican
la creciente inflación, la progresiva devaluación tanto a nivel de Sicad II como en el paralelo, la escasez progresiva
de alimentos, de materias primas e insumos requeridos para el funcionamiento de
nuestro aparato productivo, las
estimaciones de caída del PIB (7%) por parte del FMI y otras instituciones, el
ascendente déficit fiscal, el inconcebible financiamiento del gasto público por
parte del BCV y la cantidad creciente de dinero que circula sin contar con
respaldo alguno, la situación de nuestra industria petrolera y muchísimos otros
indicadores que son tomados en consideración a los efectos de determinar la
marcha de cualquier economía.
EL
RIESGO SOBERANO
A
todo lo anterior hay que agregar las conclusiones prácticamente unánimes de
todas las calificadores de riesgo (incluso la china Dagong) en relación con la
deuda soberana del país, y las dificultades de obtención y encarecimiento para
los financiamientos que se requieren. Ello ha llevado a plantear la venta o
negociación de parte de las reservas de oro en poder del Banco Central a fin de
poder cubrir el déficit en el gasto público.
LA
PARALIZACIÓN DE INDUSTRIAS POR FALTA DE REPUESTOS
Pero
la situación se torna cada día más grave. En el país se percibe una progresiva
paralización de numerosas industrias –grandes, medianas y pequeñas- no
solamente porque no cuenta con dólares para importar las materias primas sino
también porque sencillamente no consiguen ni pueden importar los repuestos que
requieren sus maquinarias y equipos.
EL
EMPOBRECIMIENTO DE LA POBLACIÓN
Esta
suerte de caos se ha traducido en un crecimiento que luce incontrolable en los
niveles de pobreza (más del 48% de la población según la UCAB y otras
Universidades). Lo mismo ocurre con la pobreza extrema. El empobrecimientos se
tornará mucho más dramático en la medida en que aumente la inflación.
LA
INDIFERENCIA GUBERNAMENTAL
Mientras
todo esto ocurre, nuestras autoridades aparentan una incompresible
indiferencia. Pareciera que lo único que les interesa es el tema político. Su
prioridad parece centrarse en una inmensa campaña publicitaria que desvíe la
atención de los gravísimos problemas que sufren los venezolanos.
EL
AISLAMIENTO INTERNACIONAL
La
acusación por parte de las autoridades locales de que las opiniones emitidas
desde otras latitudes constituyen una injerencia en los asuntos internos del
país, lucen cada día más absurdas. Ven
la paja en el ojo ajeno sin ver la viga en su propio ojo. De hecho, nuestros
últimos mandatarios se han caracterizado no sólo por sus opiniones ofensivas
contra los dirigentes y mandatarios de otras naciones, sino también por el
desparpajo con el cual tratan de extender su ideología hacia otras naciones o
incluso emiten insultos propios de algún matón de barrio.
Por
otra parte, la defensa de los DDHH es un
tema universal que no tiene fronteras ni constituye injerencia alguna y que en
su momento sirvió para tenderle una mano a numerosos dirigentes políticos
perseguidos por dictaduras latinoamericanas (muchos de ellos ostentan hoy
posiciones de gobierno).
El
hecho insólito de que al menos 32 ex presidentes iberoamericanos, todos
caracterizados por la defensa de la democracia en sus respectivos países
-incluyendo entre ellos a un Premio Nobel de la Paz- a dirigentes de las más
diversas tendencias políticas y a políticos que se destacaron por la defensa de
principios y valores, constituye un campanazo que está lanzando un alerta al
mundo entero.
En
la Cumbre de los Pueblos que tuvo lugar recientemente en Panamá, el presidente
Raúl Castro se abstuvo de asistir al acto donde los presidentes de la Alba iban
a manifestar su apoyo a Venezuela. Cuba otea hoy otros rumbos.
Los
parlamentos como el Europeo o de países como España, Canadá, Brasil, Chile,
Perú EEUU, Paraguay y muchos otros, también se han pronunciado en relación con
Venezuela.
LA
GENEROSIDAD PETROLERA MENGUANTE
Frente
a la fuerte caída del precio del petróleo, muchos de los beneficiarios de la
generosidad venezolana, están desviando su mirada hacia otras latitudes. Los
países del Caribe oyen con atención las propuestas que les hace el presidente
Obama. La misma Cuba está más atenta que
nadie. El apoyo político en la región, comprado con petróleo, puede
desvanecerse cuando menos lo esperen.
CARICOM
Y GUYANA
A
pesar de las dádivas financieras que en materia petrolera se usaron para
comprar influencia política en el Caribe -incluyendo Guyana- vemos al CARICOM dándole la espalda a
Venezuela. Ya no se trata ni siquiera de la Zona en Reclamación. Se trata de la
tímida defensa que hacen nuestras autoridades de la soberanía en nuestros mares
venezolanos nunca antes puesta en duda.
VIENTOS
DE CAMBIO
Todo
lo anterior augura vientos de cambio. Ojalá que esos vientos no se transformen
en tempestades. Un país que experimentó una bonanza petrolera sin precedentes y
que la utilizó sólo para desarrollar una política de populismo desbordado capaz
de darle una base política que garantizase su permanencia en el poder, se puede
encontrar ahora frente a una población frustrada. Nadie sabe a que podría
conducir esa situación.
Los
cambios lucen inevitables. Ojalá que la sociedad los sepa manejar con
sabiduría. Ojalá que no tengamos que enfrentarnos a las enfurecidas olas de un
tsunami.
José
Toro Hardy
pepetoroh@gmail.com
@josetorohardy
EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, SIN COMUNISMO UN MUNDO MEJOR ES POSIBLE, ESTO NO PUEDE CONTINUAR, UNIDAD NACIONAL ALTERNATIVA, DESCENTRALIZAR, DESPOLARIZAR, RECONCILIAR, DEMOCRACIA PARLAMENTARIA, LIBERTARIO ACTUALIDAD, VENEZUELA, INTERNACIONAL, NOTICIAS, ENCUESTAS,
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentario: Firmar con su correo electrónico debajo del texto de su comentario para mantener contacto con usted. Los anónimos no serán aceptados. Serán borrados los comentarios que escondan publicidad spam. Los comentarios que no firmen autoría serán borrados.