Existe un reclamo generalizado en cuanto a
que los problemas sociales se deben a un "excesivo" egoísmo de la
gente y a una escasez de solidaridad, insistiéndose sobre la necesidad de
incrementar esta última sobre el primero.
Pero ¿qué tenemos que entender realmente por
solidaridad?
Según el diccionario nos da la siguiente
definición:
solidaridad.[1]
(De solidario).
1. f. Adhesión circunstancial a la causa o a
la empresa de otros.
2. f. Der. Modo de derecho u obligación in sólidum.
Si analizamos el significado de la palabra
advertiremos que la acepción que nos interesa es la primera, y -en esta
inteligencia- no puede en modo alguno decirse que vivimos en una sociedad poco
o nulamente solidaria, sino todo lo contrario, atento que prácticamente por
todas partes y en todos los sentidos vemos esa "Adhesión circunstancial a
la causa o a la empresa de otros". Esto se refuerza mas si tenemos en
cuenta que esa adhesión que caracteriza la solidaridad es circunstancial, es decir,
es meramente temporal, no permanente. Y esa adhesión temporal o provisoria no
es hacia una persona (como ordinariamente se cree) sino que es "a la causa
o a la empresa de otros".
Por ejemplo, cuando una persona apoya a un
partido político dicho acto es un típico acto de solidaridad, ya que cumple con
todas las condiciones de la definición usual del término (circunstancialidad y
causa, en el ejemplo).
Nótese que esto no supone ninguna clase de
"entrega" o "dación" a la causa o empresa a la que se
adhiere, y menos aun a las demás personas que también adhieran a la misma causa
o empresa. Para lo cual, será útil examinar ahora el significado de
"adherir", del cual el diccionario nos informa:
adherir.[2]
(Del lat. adhaerēre).
1. tr. Pegar algo a otra cosa. Adhiero el
sello al sobre. Adhirió el cartel a la pared.
2. intr. Dicho de una cosa: Pegarse con otra.
U. m. c. prnl.
3. intr. Convenir en un dictamen o partido y
abrazarlo. U. m. c. prnl.
4. prnl. Der. Dicho de quien no lo había
interpuesto: Sumarse al recurso formulado por otra parte.
Por supuesto que, en lo que en este tema nos
interesa no es a la adhesión física o literalmente pegamento (que es al que aluden
las acepciones 1 y 2 del diccionario) tampoco -en el caso- nos interesa el
significado legal (que viene dado por la cuarta significación), sino que el
sentido relevante para nuestro estudio es el del la tercera designación, de
donde se deduce que la solidaridad consiste -en definitiva- en estar de acuerdo
con un dictamen o partido (lo que resulta de las palabras "convenir"
y "abrazarlo").
Nuevamente observamos que esto no implica
ningún tipo de dación, entrega, pago, etc. por parte del sujeto que adhiere a
la causa o empresa objeto de la misma. Por supuesto, esto no quita que el que
adhiere también pudiera hacerlo –eventualmente- aportando bienes, servicios, o
ambos a la causa o empresa. Pero este no es el rasgo característico de la
solidaridad, porque dicha adhesión puede ser meramente verbal, retórica o
mental. Quien simplemente simpatiza con una causa o empresa pero no realiza
ningún acto de desembolso a estas también es solidario, tan solidario como el
que contribuye con dinero o en especie a aquellas. La solidaridad puede, de tal
suerte, ser tácita o expresa, sin que implique necesariamente ninguna entrega a
la causa o empresa con la cual el sujeto se solidariza.
Quien sencillamente no hace algo que podría
haber hecho para cambiar un determinado estado de cosas, se está solidarizando
con dicho estado de cosas o situación. O, en otros términos, el que pudiendo
rebelarse a una determinada realidad creada por una causa o empresa que es
perjudicial a uno o muchos, simplemente se queda de brazos cruzados mirando o
esperando que los acontecimientos sigan su curso, es perfectamente solidario
con los causantes de dicho contexto perjudicial. Es decir, se puede ser
solidario tanto por acción como por omisión.
En esta orientación, insistimos, resulta
absurdo afirmar que no vivimos en una sociedad solidaria, ya que podemos
observar, por todas partes y en diversos lugares del planeta, situaciones de
solidaridad, tanto individual como colectiva, en el sentido apuntado antes.
Pero hay una forma más general y más particular
de entender la "solidaridad", y es cuando se espera que otro u otros
hagan algo por nosotros sin necesidad de que nosotros demos nada a cambio de
ello. Digamos que esta es la noción más extendida, difundida y aceptada del
vocablo solidaridad. A nivel político, es la situación más frecuente, dado que
ese "otro" u "otros" de los que se espera que resuelvan
todos nuestros problemas (es decir, que sean solidarios con nosotros) son el
gobernante o los gobiernos en general (cualquiera sea el partido que este en el
poder).
Pero no sólo se manifiesta en el plano
político, sino -y principalmente- en el social en general. Es mayoría la gente
que vive esperando que sea "el otro" (el vecino, el amigo, el esposo,
la esposa, el jefe, el empleado, etc.) quien de o haga algo para cada uno de
los que forman parte de esa mayoría. Es decir, la solidaridad -que de ordinario
se declama- es la demanda para que los demás sean solidarios, en el sentido de
que sean los demás los que nos solucionen todas nuestras dificultades (grandes
o pequeñas).
Esto contrasta violentamente con todos
aquellos que quieren convencernos que la sociedad es
"individualista". Nada más lejos de la realidad. Un individualista no
espera que nadie le remedie sus contrariedades. Las resuelve por sí mismo o
-llegado el caso- contratando a otras personas a cambio de una retribución para
que lo ayuden a resolverlas. Pero un individualista no vive esperando -y menos
aun exigiendo- que los demás sean "solidarios" con él, sino que se
las arregla por las suyas del modo indicado. Lo que en manera alguna implica
que el individualista sea un "antisocial" (otro mito falso, harto
difundido). Por el contrario, resulta ser -que como venimos explicando- el que
deviene ser un auténtico antisocial es aquel que posa de solidario, en tanto
que el comportamiento verdaderamente social cae en cabeza del tildado como
individualista.
Gabriel Boragina
gabriel.boragina@gmail.com
@GBoragina
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