La pregunta que nos hacemos en el título de este escrito es válida
para toda la región, nosotros en Costa Rica por una cuestión de conocimiento
general podríamos pensar que La Defensoría de los Habitantes sería la institución dedicada a la defensa de los consumidores,
entendemos que la Defensoría entre sus actividades de vez en cuando se da a la
tarea de hacer ciertas investigaciones y denuncias que tienen que ver con
prácticas deshonestas de comerciantes o de industriales, en el sitio de
Internet de la Defensoría se define como
“Un órgano contralor que forma parte del Poder Legislativo”. Nos dice además que; “El fin de esta institución es el de velar
porque la actividad del sector público se ajuste al ordenamiento jurídico y la
moral, de forma tal que los derechos e intereses de los habitantes siempre
estén protegidos”.
http://www.dhr.go.cr/la_defensoria/
Pero como se sabe, esas malas prácticas de comerciantes o industriales son muy pequeñas si las comparamos con lo que nos quita el Estado a diario, por eso nos preguntamos: ¿CÓMO PODRÍAMOS DEFENDERNOS –NOSOTROS- LOS CONSUMIDORES DEL ESTADO? ¿Acaso no atenta el Estado contra los consumidores imponiendo inflación, impuestos y regulaciones? ¿Defiende La Defensoría de los habitantes los derechos e intereses de todos los habitantes a cabalidad? ¿No debería esa institución proponer o buscar la eliminación de leyes y reglamentos para que todos los consumidores -que somos la mayoría de los ciudadanos- se beneficien individualmente?
Pensamos que la principal función del Estado debería ser buscar el
bienestar de las mayorías de los ciudadanos y no la de unos pocos. Los estados
socialistas-comunistas y el estatismo de los progresistas con su cantaleta de
hacer un Estado poderoso han engañado a la gente, porque lo que hacen es todo
lo contrario y los perjudicados siempre
seremos los consumidores, es decir la mayoría de los ciudadanos.
Esto lo hemos visto en el pasado y en el presente en nuestra región
principalmente en Cuba o en la Venezuela chavista, su discurso de la búsqueda
de bienestar social en lugar de bienestar individual es para engañar y
conseguir su único objetivo, el poder donde solo unos pocos son los que se
benefician, como se sabe, en esos países
el resto -la mayoría- lo que
recibe es miseria.
En muchos países de nuestra región donde la democracia se instaló, es común ver partidos ejerciendo el poder con ideologías que tienen tendencias socialistas donde el clientelismo político y las prácticas mercantilistas que incluyen la regulación de los intereses y de los salarios, el otorgamiento de privilegios y concesiones monopólicas a las industrias, el proteccionismo y diversas otras restricciones al libre movimiento de los bienes y de los factores productivos, son el pan de cada día.
En Costa Rica por ejemplo,
la mayoría de los ciudadanos pagamos el arroz más caro precisamente por
la protección que le da el Estado a ese pequeño grupo que produce este
producto. Sin embargo quienes salimos perjudicados somos la gran mayoría de los
consumidores.
En conclusión, pensamos que la única forma de defendernos como ciudadanos y consumidores que somos, es exigir la apertura de los monopolios, y eliminar otros, promover la competencia, buscar más libertad en todo el sentido de la palabra, eliminar impuestos, y hacer un Estado más pequeño y eficiente.
Carlos Vilchez Navamuel
carlosvilcheznavamuel@gmail.com
@carlosvilchezn
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