ALFREDO MICHELENA, ¡MUERA EL FMI! ¡VIVAN LOS CHINOS!

China nos ha prestado unos US$55 millardos según el Banco de Desarrollo Chino (BDC). Somos el principal país latinoamericano receptor de sus préstamos. Venezuela solía acudir al Fondo Monetario Internacional (FMI)  y al Banco Mundial (BM)  para solicitar préstamos, así como a la banca privada internacional. En 2007 “el finado”  Chávez decidió salirse del FMI y pagar una deuda que a su llegada alcanzaba a unos US$ 3.3 millardos. Ese mismo año se crea el Fondo Chino y el BDC entrega “el crédito de mayor volumen que China ha ofrecido a un solo país”.

Según Maduro la relación con “China es de respeto e igualdad, con financiamientos en las mejores condiciones, ya que no está condicionado a paquetes económicos que conculquen nuestra soberanía”. Veamos, las diferencias entre los créditos que otorgan el FMI y el BM, con los del BDC, pero centrémonos las condiciones.

Entre las varias condiciones de los organismos multilaterales (FMI, BM) está primero arreglar la casa, es decir las cuentas nacionales, la macroeconomía. Para esto esta el FMI. Luego los bancos (BM, BID, CAF) abren líneas de crédito y se presentan proyectos técnicamente elaborados.  Los aprobados se licitan internacionalmente y se asignan transparentemente. Su ejecución y pago se hace contra avances y supervisión de las obras.

Por esto,  el régimen no quiere acudir a estas fuentes de financiamiento. Primero tendrían que modificar el modelo económico, lo que está fuera de discusión- aunque se esperan algunos cambios. Además tendrían que presentar proyectos técnicamente elaborados. No es aquello de: pasé por aquí y esto estaba vació: construyamos ciudad Caribia’. Como hizo Chávez. Y venga a invertir dinero.

No podrían asignar proyectos a dedo como lo han hecho con cubanos, chinos, rusos… o boliburgueses. Es el caso de Derwick Associates, que sin saber nada de proyectos de electricidad se le asignaron US$3.000 millones, con las consecuencias que ahora vemos… si hay luz. Ni habría un cementerio de obras inconclusas chupando dólares. Aquello de que estos préstamos “protegen a nuestra nación, mantienen nuestra soberanía y defiende los intereses de nuestro pueblo" que dijo el ministro Ramírez, se traduce en que los chinos permiten que el régimen haga lo quiera con esos reales siempre que se le pague con petróleo. También, para la banca privada, con la que Ramírez ha hablado en Londres y ahora en Nueva York, lo importante es asegurarse el pago, aunque el país eventualmente reviente. Venezuela es una cleptocracia.

Alfredo Michelena

alfredomichelena@gmail.com

@Amichelena

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