jueves, 3 de abril de 2014

CARLOS BASANTA, EL DISCURSO OFICIAL COMO FACTOR DE RIESGO PARA LA SALUD MENTAL DEL VENEZOLANO

UNA NOTA SALUDABLE
Venezuela es un país extraordinariamente rico en recursos naturales, el petróleo es nuestra principal fuente de riquezas, la coyuntura energética mundial nos convierte en referencia, tenemos ante el mundo la imagen de la fortuna natural, fortuna que por cierto de nada serviría sin ese valor agregado que le da el ser humano que convierte lo natural en financiero y en bienes materiales individuales y colectivos. 

El desarrollo de los pueblos depende de su gente, sin lugar a dudas su principal recurso, del cual dependerá la viabilidad del resto; de allí la importancia estratégica de preservar la integridad Biológica, Sicológica y Social de la población, objeto, causa y fin de todo proceso que pretenda el desarrollo llámese como se llame. El estado tiene la obligación y el deber de mantener ese recurso saludable, hacia el fin de la salud colectiva deben estar orientados los discursos y acciones oficiales y no percibo que estemos transitando ese camino.

“La persona mentalmente sana es la persona productiva, la que se relaciona amorosamente con el mundo, que emplea la razón para captar la realidad, sintiéndose a si misma individual y al mismo tiempo identificada con su prójimo; que no está sometida a ninguna autoridad irracional y acepta de buena voluntad la autoridad de la conciencia y la razón”, fragmento de Erich Fromm, referencia clásica de la psicología social y de las tendencias de izquierda.  Se refiere a la Salud Mental, lo que la Organización Mundial de la Salud ha definido como: “Un estado de bienestar emocional y psicológico en el cual los individuos son capaces de utilizar sus habilidades cognitivas (pensar, analizar, juzgar, decidir) y emocionales (expresar afectos y sentimientos) funcionar en sociedad, cumplir con las exigencias que le presenta la vida diaria y sobreponerse a las situaciones difíciles”.

Existen diversos grados y deterioro de la salud mental, la Demencia y sus variantes representan solo los casos extremos y  socialmente perceptibles, pero la gran mayoría de los trastornos  no son reconocidos como tales, sin embargo la presencia de ciertas condiciones o indicadores de carácter social nos ponen en evidencia los riesgos y alteraciones de la salud mental tanto individual como colectiva. La violencia familiar, altos índices de inseguridad, neo conductas sociales como la institucionalización del racismo y la lucha de clases entre otras manifestaciones de grupos, e igualmente el aumento de la incidencia de cuadros de Ansiedad, insomnio y depresión. En el caso específico de Venezuela, jamás los índices de inseguridad habían estado tan elevados, los accidentes de transito en relación con el alcohol no caben en las paginas de sucesos, según estudios el 40% de los venezolanos necesita asistencia en salud mental, estudio presentado por los doctores Kort y Perez  señala que uno de cada cuatros caraqueños sufren de Depresión; estamos al borde del precipicio.

Paradójicamente a lo que señala la constitución nacional en su artículo 83 que “La salud es un derecho social fundamental, obligación del estado, que lo garantizará como parte del derecho a la vida”, el discurso y la acción de los conductores del estado marchan en sentido contrario  constituyéndose en el principal factor de riesgo  para la salud mental del venezolano. Fomentar la división entre chavistas y escuálidos, entre pobres y ricos, entre blancos y negros, no encaja, con nuestra idiosincrasia, el grado de fanatismo de lado y lado ha disgregado la sociedad y la familia con repercusiones sicológicas a todo nivel, el llamado irresponsable a que las comunidades de los barrios bajen a enfrentar a estudiantes y a destrozar urbanizaciones no es parte de nuestra conducta. Para una marcha una contra marcha. La confrontación y el enfrentamiento ha sido la orden oficial en vez del dialogo.

 PILDORAS DE TU MEDICO

El discurso oficial genera incertidumbre y temor en todos los sectores. En sus opositores el crecimiento de la exclusión, la amenaza real y potencial a lo que consideran sus derechos. Y en los afectos, la tensión constante de la inminente invasión el alerta constante a defender con la muerte su revolución genera en ambos bandos conflictos internos que al cronificarse redundan negativamente en la salud física de todos.

La violencia del lenguaje de los que deberían ser ejemplo de paz y entendimiento, ha generado violencia verbal y física, escuchar a los jóvenes frases como aplastar al contrario, la barricada para fulminar, batallones, loas a la violencia y a la muerte, es signo de que algo anda mal.

    VACUNA CONTRA EL ESTRÉS

En una conferencia con el Ministro del estado, un periodista le pregunta:
-      Señor Ministro, ¿es verdad que nuestro país sufre una crisis económica? 
-      No, no, por mis investigaciones, tan sólo 6 personas sufren crisis económica"
El periodista pregunta:
- ¿Cuáles?
- Muy sencillo, yo, tú, él, nosotros, vosotros, ellos.

Hasta nuestro próximo contacto.
*Medico. Magíster en Salud Pública.
Twitter: @drcarlosbasanta

 EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, ACTUALIDAD INTERNACIONAL, OPINIÓN, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, REPUBLICANISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA,ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA,CONTENIDO NOTICIOSO,

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentario: Firmar con su correo electrónico debajo del texto de su comentario para mantener contacto con usted. Los anónimos no serán aceptados. Serán borrados los comentarios que escondan publicidad spam. Los comentarios que no firmen autoría serán borrados.