¿Conoces,
alguna vez tus maestros izquierdistas y revolucionarios en la universidad o del
liceo bolivariano te recomendaron averiguar en El libro negro del comunismo:
crímenes, terror y represión, original investigación universitaria francesa,
traducido y reeditado en España, 2010, por Ediciones B?
¿Sabes
que el Ejército Rojo de Mao y su Partido Comunista Chino comandaron algo
llamado la Gran Marcha que dejó 65 millones de víctimas entre obreros,
campesinos, y rebeldes asesinados, presos sin juicio, hambrunas y
desplazamientos a campos de trabajo forzado?
¿Y
que China junto con la Rusia postestalinista están hoy a la cabeza de los
capitalismos salvajes comprando a futuro la riqueza mineral de tu país mientras
continúan en las mismas prácticas represivas que son su genética marca de
fábrica?
¿Te
contaron tus instructores de la ley marcial aplicada por la dirigencia china
contra los manifestantes pro demócratas que luego del asedio dejó centenares de
jóvenes muertos en la plaza de la Paz de Tiananmen,1989, y que en la actual
Rusia de Putin los artistas, periodistas y todo disidente están sometidos a la
vigilancia de la nueva KGB?
¿Registraste
alguna vez los saldos de masacres para implantar el comunismo en Camboya con 2
millones y en sus regímenes de la Europa Oriental con 1 millón?
¿Y
cuántos lleva el modelo que te pretenden imponer para tu país, desde la Cuba
castro-madurista, isla de tu tesoro venezolano, donde han sacrificado a
millares durante medio siglo entre fusilados, presos, torturados, espiados,
humillados y empobrecidos?
¿Te
gusta ser colonia de semejantes imperios?
¿En
tus programas de estudio figura la asignatura básica Historia Universal para
que te provoque buscar sus diversos enfoques por Internet y plantear foros,
tesis y discusiones sobre la materia?
¿Has
oído sobre las hazañas del mariscal Winston Churchill durante la Segunda Guerra
Mundial y quien escribió que la democracia es el peor de lo gobiernos mientas
no se invente otro mejor?
¿Tienes
idea de la riqueza acumulada por dirigentes civiles y militares del PSUV,
escondidos en paraísos fiscales porque ser rico es malo aquí por ahora, pero
muy bueno, después y por allá?
¿Has
captado lo difícil que es sobrevivir en el mundo actual sin preparación
tecnológica, humanística de excelencia y al día en todos los oficios y
profesiones debido a la alta competividad mundial?
¿Que
tu diploma o título valdrá cero, pues te formas en cuarteles ideológicos?
¿Con
sinceridad, supones que repitiendo frases hechas desgastadas y desmentidas por
la realidad, ya catecismo revolucionario caribeño, puedes alcanzar un nivel así
sea promedio que te garantice independencia económica y mental para no someterte
como funcionario esclavizado del régimen?
¿Ignoras
que el asesino Che Guevara es la foto-mito-producto que más fortunas genera en
los capitalismos de Estado y de mercado?
¿Coincides
con la declaración de tu ministro de Educación y prefieres permanecer en la
pobreza para evitar que te conviertas en clase media con tendencia a mejorar tu
estatus de vida actual?
¿Respetas
a la llamada defensora del pueblo para quien torturar a una persona tan joven
como tú se justifica porque es una condición necesaria que facilita la
investigación del grupo al que pertenece y lo delate?
¿Estás
convencido de que el actual dirigente castrista que preside en el Palacio de
Miraflores, robot obediente de las directrices de La Habana, es persona que
declara verdades y representa tus ideales, tus sueños, tus aspiraciones?
¿Apoyas
los métodos cruelmente represivos de las hordas compuestas por mercenarios,
paramilitares, guardias llamados del pueblo, pranes y milicias entrenados por
el G2 cubano de tradición soviética que maltratan y asesinan a quienes
protestan por la ruina de tu nación?
¿Quieres
comprobar con los antecedentes mundiales que ese mecanismo es hamponato
político aplicado desde un Estado policial, delictivo y malandro?
¿Eres
consciente de que si cambias tu parecer todavía te esperan los estudiantes
libres y puedes ingresar sin miedo a la República democrática constitucional,
sin que nadie te señale con resentimiento ni busque castigarte mediante
represalias injustas?
¿Quieres
ser un Gustavo Dudamel de talento reconocido pero insensiblemente sordo al
rugido de balas, bombas y al dolor de su generación, de su gente, a su legado
cultural iniciado hace 30 años en democracia plena?
¿Has
considerado la posibilidad de reflexionar en soledad primero y luego en grupo
sobre estos y otros datos para decidir opciones de conducta a seguir luego de
la experiencia de estas horas de la vergüenza?
Dios
y la patria te agradecerán, si todavía estás lúcido y conservas un mínimo de
individualismo crítico. De lo contrario, te condenas desde ya a la servidumbre
política, esa que por tradición totalitaria luego de seducirte y usarte como
ficha de sacrificio, te anula, te desconoce en su momento final y quedarás herido
con una huella muy difícil de borrar al paso del tiempo libertario.
Alicia Freilich
alifrei@hotmail.com
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