sábado, 27 de octubre de 2012

ADOLFO R. TAYLHARDAD, RUPTURA EN CAMARA LENTA

La semana pasada, casi cuatro meses después de haber interrumpido las relaciones con Paraguay el gobierno venezolano decidió expulsar al Encargado de Negocios de ese país y a los demás funcionarios que integraban la misión diplomática en Caracas, con lo cual quedó completado un proceso que comenzó en junio a raíz de la destitución del presidente Lugo.

Como se recordará, el 22 de junio Fernando Lugo fue destituido luego de un juicio político en el Senado paraguayo.  Venezuela consideró que eso había sido un golpe de Estado y declaró persona non grata al Embajador paraguayo en Caracas. El gobierno paraguayo hizo lo propio con el Embajador venezolano y el gobierno de este país retiró su personal diplomático en Paraguay.

El martes pasado,16 octubre, el Encargado de Negocios paraguayo recibió una llamada en la cual le fue comunicada la medida de expulsión y la orden de abandonar el país dentro de las 72 horas siguientes. Además le notificaron que las credenciales como funcionarios diplomáticos y las visas de los miembros de la misión diplomática paraguaya habían sido revocadas.

El funcionario paraguayo se trasladó personalmente a la cancillería y allí fue objeto de un nuevo desaire. En lugar de recibirlo la viceministro competente como correspondía en este caso, fue atendido por la coordinadora para asuntos de América Latina y el Caribe, quien le comunicó que Venezuela, esperaba que tal como lo había hecho en su oportunidad el gobierno venezolano, Paraguay retirara el  personal diplomático de su embajada en Caracas. Y que, como no lo había hecho, “tuvo que apelar a esto”. Le dijeron que la revocación de las credenciales es un “mero trámite” que supuestamente se aplica después de haber otorgado a Paraguay un “tiempo prudencial” para que el personal paraguayo abandonara el país, luego que en julio pasado Venezuela había retirado el suyo de Asunción.

El procedimiento empleado por la cancillería venezolana evidencia una vez más la incompetencia y la ignorancia del Derecho Diplomático por parte de quienes tienen a su cargo el manejo de las relaciones internacionales de este país.

Todo esto ha llevado al Canciller paraguayo a decir: “Estamos frente a un gobierno imprevisible”, en lo cual tiene plena razón. Pero se quedó corto. Además de imprevisibilidad, en el manejo de las relaciones internacionales venezolanas, prevalece la improvisación, el capricho y la arbitrariedad.

Como testimonio del conocimiento que tiene de la realidad venezolana, el canciller paraguayo dijo también “ustedes saben que después de la razón está Hugo Chávez”.

Pero al mismo tiempo le ofrece  una rama de olivo al régimen venezolano al manifestar que su país “espera que el presidente relecto cambie de postura respecto a Paraguay para reanudar las relaciones bilaterales”. "Nosotros creemos que tal vez ahora, con más serenidad, el Gobierno de Hugo Chávez también evalúe que se está equivocando con Paraguay" "Los diplomáticos (paraguayos) estamos preparados para dialogar aún en las condiciones más adversas". "Países que han estado en guerra encuentran la forma de solucionar sus problemas. Esa no es la situación de Paraguay, así que tenemos que buscar los caminos".


Mas conciliador no podía ser el Canciller paraguayo.EL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA,CONTENIDO NOTICIOSO,

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comentario: Firmar con su correo electrónico debajo del texto de su comentario para mantener contacto con usted. Los anónimos no serán aceptados. Serán borrados los comentarios que escondan publicidad spam. Los comentarios que no firmen autoría serán borrados.