Los venezolanos no podemos aceptar leyes injustas, merecemos vivir en un clima de democracia -libertad, justicia, igualdad y paz-, respeto, honestidad y solidaridad.
La Ley en el cumplimiento de su fin, garantizar la dignidad de la persona humana, consagra equilibradamente los deberes y derechos que regulan la libertad y preservan la igualdad y la paz. La Ley es injusta y dañina para todos cuando se rompe este equilibrio, se beneficia a un sector en perjuicio de otro, pues se destruye la paz. Este es el caso, entre muchos, del Decreto Ley Contra el Desalojo o Desocupación Arbitraria de Viviendas, dictado por quien otra vez usa la Ley arbitraria para: 1) “Lograr la mayor eficacia política y calidad revolucionaria en la construcción del socialismo bolivariano…” y darle carácter obligatorio a su basura comunista mentirosa, al culpar al capitalismo de la escasez de viviendas en el texto del Decreto; 2) Crear caos cuando impone la injusticia como política de Estado; 3) Justificar lo injustificable, la violación del derecho a la propiedad privada y a la libertad económica de todos para satisfacer, aparentemente, el derecho a la vivienda de algunos y 4) Corromper y sembrar odio, división y enfrentamiento cuando diabólicamente califica al propietario como explotador y autoriza al inquilino, ocupante, comodatario o usufructuario de una vivienda principal a explotar al propietario al permanecer en ella a pesar de haber violado el contrato.
Los arts. 1 y 13 que prevén, respectivamente, que dicho Decreto procede “contra las medidas administrativas o judiciales mediante las cuales se pretenda interrumpir o cesar la posesión legítima”, y “que no se procederá a la ejecución forzosa sin que se garantice el destino habitacional” del afectado, así como el largo, tortuoso e injusto proceso que imposibilita la reivindicación de la propiedad, evidencian que la jefatura miente, el fin no es impedir los desalojos arbitrarios, sino institucionalizar el robo y el arrebato del pan a quienes han ahorrado con sacrificio e invertido el producto de su trabajo en una vivienda para procurarse una renta que permita en la vejez y a la familia vivir con dignidad. Además se subordina el Poder Judicial al Ejecutivo y se reitera la extinción de la seguridad jurídica, la estabilidad y la certeza de protección de los derechos humanos.
Lo más grave es que en su afán de someter, depauperar y truncar toda posibilidad de progreso, el régimen derrama la injusticia desde el Estado, lo cual pudiera terminar en el asesinato de quien abusa amparado en la Ley injusta y en la prisión de quien impotente, hizo justicia por su propia mano.
Esto es inaceptable por inmoral y perverso.
El Colegio de Abogados de Caracas invita a discutir el tema el miércoles 20, 4 pm, en su sede, Av. Páez, el Paraíso.
elmon35@gmail.comEL ENVÍO A NUESTROS CORREOS AUTORIZA PUBLICACIÓN, ACTUALIDAD, VENEZUELA, OPINIÓN, NOTICIA, REPUBLICANO LIBERAL, DEMOCRACIA, LIBERAL, LIBERALISMO, LIBERTARIO, POLÍTICA, INTERNACIONAL, ELECCIONES,UNIDAD, ALTERNATIVA DEMOCRÁTICA
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Comentario: Firmar con su correo electrónico debajo del texto de su comentario para mantener contacto con usted. Los anónimos no serán aceptados. Serán borrados los comentarios que escondan publicidad spam. Los comentarios que no firmen autoría serán borrados.