El día 2 de diciembre fue uno de los días mas importantes para la historia de nuestro país, el pueblo de Venezuela le dijo no al proyecto del presidente Hugo Chávez, le dijo no a la ineficacia y a la ineficiencia del gobierno venezolano,
le dijo no a las injusticias y la barbarie del sistema judicial venezolano, le dijo no a la corrupción, le dijo no a los 400 muertos mensuales que ocurren en nuestro país por hechos violentos, le dijo no a la indolencia de los operadores de justicia y a todos aquello encargados de la seguridad personal en nuestro país, le dijo no al odio infundado por los que acompañan al mal llamado “proceso”, le dijo no a la “guerra civil fría” que promueve el gobierno con el discurso de secesión entre los venezolanos, le dijo no a las malas políticas económicas del presidente de la republica y sus acompañantes, le dijo no a la falta de vivienda, a la falta de alimentos; le dijo no a la mentira y al engaño de un gobierno sin rumbo con espíritu dictatorial y cuerpo “democrático”. Le dijo no a usted señor presidente, le dijo no a ustedes sus ministros, le dijo no a ustedes sus jueces que coreaban en el Tribunal Supremo de Justicia, “ ¡Uh, ah,
Chávez no se va!; en fin, el pueblo venezolano habló y como se ha repetido hasta el cansancio, la voz del pueblo es la voz de Dios, entonces Dios le dijo no al Sr.Presidente.
Yo llevo 220 días de encarcelamiento gracias al fraude operacionalizado por el Ministerio Publico y convalidado, por al menos 1 juez de control, 6 jueces de las cortes de apelaciones y una juez de juicio premiada por el régimen con un mejor cargo. Soy acusado de traidor a la patria, por no ser parte adulante del proceso revolucionario y tener convicciones diferentes a las de aquellos que gritaban patria, socialismo o muerte. Lo que quiere decir, que nuestro país se ha convertido en un país que tiene un poco mas de siete millones de traidores a la patria porque le dijeron no al presidente y a su proceso “revolucionario”.
Siete millones de personas, porque aquellos que se abstuvieron, al menos el 50% de ellos lo hicieron por desconfiar en el arbitro electoral y no por otra razón, un país de traidores para el presidente Chávez.
220 días de encarcelamiento, sin ver la luz del sol, sin respirar aire puro y natural, sin posibilidad de comunicación con el mundo exterior, sometido a los caprichos y estados de animo de un carcelero que desconoce su trabajo, porque no ha sido preparado para ello; 220 días de injusticias y mentiras, de violaciones a mis derechos humanos, estando en peligro en varias oportunidades, hasta el derecho fundamental y humano a la vida y la integridad física. De esos 220 días, tuve que arriesgar mi vida y exponer mi organismo durante 16 días a un ayuno permanente para poder ser oído por una corte de apelaciones bufa y que le vendió sus servicios a la mentira y al engaño, dejando a un lado cualquier principio ético y jurídico existente.
Llevo 220 días de encarcelamiento injusto y sometido a las violaciones constantes de mis derechos humanos, pero hay quienes sobrepasan los 1000 días encarcelados, hay otros que pasarán mas de 18.000 días encarcelados; pero todos
somos presos políticos del gobierno venezolano sometidos a la injusticia de nuestra justicia, somos 7 millones de perseguidos políticos mas 40 prisioneros políticos.
Por esta simple razón elevo mi grito de auxilio a Venezuela y al mundo por el “genocidio” que se esta cometiendo día a día con los presos políticos en Venezuela y sus familiares; nuestra existencia es la mayor prueba de que en nuestro país no existe un gobierno democrático y menos estado de derecho.
Luis Alberto Rodríguez
Prisionero político acusado de traición a la patria y
terrorismo, recluído en los calabozos de la Disip en el Helicoide.
Publicado el 10-12-2007
le dijo no a las injusticias y la barbarie del sistema judicial venezolano, le dijo no a la corrupción, le dijo no a los 400 muertos mensuales que ocurren en nuestro país por hechos violentos, le dijo no a la indolencia de los operadores de justicia y a todos aquello encargados de la seguridad personal en nuestro país, le dijo no al odio infundado por los que acompañan al mal llamado “proceso”, le dijo no a la “guerra civil fría” que promueve el gobierno con el discurso de secesión entre los venezolanos, le dijo no a las malas políticas económicas del presidente de la republica y sus acompañantes, le dijo no a la falta de vivienda, a la falta de alimentos; le dijo no a la mentira y al engaño de un gobierno sin rumbo con espíritu dictatorial y cuerpo “democrático”. Le dijo no a usted señor presidente, le dijo no a ustedes sus ministros, le dijo no a ustedes sus jueces que coreaban en el Tribunal Supremo de Justicia, “ ¡Uh, ah,
Chávez no se va!; en fin, el pueblo venezolano habló y como se ha repetido hasta el cansancio, la voz del pueblo es la voz de Dios, entonces Dios le dijo no al Sr.Presidente.
Yo llevo 220 días de encarcelamiento gracias al fraude operacionalizado por el Ministerio Publico y convalidado, por al menos 1 juez de control, 6 jueces de las cortes de apelaciones y una juez de juicio premiada por el régimen con un mejor cargo. Soy acusado de traidor a la patria, por no ser parte adulante del proceso revolucionario y tener convicciones diferentes a las de aquellos que gritaban patria, socialismo o muerte. Lo que quiere decir, que nuestro país se ha convertido en un país que tiene un poco mas de siete millones de traidores a la patria porque le dijeron no al presidente y a su proceso “revolucionario”.
Siete millones de personas, porque aquellos que se abstuvieron, al menos el 50% de ellos lo hicieron por desconfiar en el arbitro electoral y no por otra razón, un país de traidores para el presidente Chávez.
220 días de encarcelamiento, sin ver la luz del sol, sin respirar aire puro y natural, sin posibilidad de comunicación con el mundo exterior, sometido a los caprichos y estados de animo de un carcelero que desconoce su trabajo, porque no ha sido preparado para ello; 220 días de injusticias y mentiras, de violaciones a mis derechos humanos, estando en peligro en varias oportunidades, hasta el derecho fundamental y humano a la vida y la integridad física. De esos 220 días, tuve que arriesgar mi vida y exponer mi organismo durante 16 días a un ayuno permanente para poder ser oído por una corte de apelaciones bufa y que le vendió sus servicios a la mentira y al engaño, dejando a un lado cualquier principio ético y jurídico existente.
Llevo 220 días de encarcelamiento injusto y sometido a las violaciones constantes de mis derechos humanos, pero hay quienes sobrepasan los 1000 días encarcelados, hay otros que pasarán mas de 18.000 días encarcelados; pero todos
somos presos políticos del gobierno venezolano sometidos a la injusticia de nuestra justicia, somos 7 millones de perseguidos políticos mas 40 prisioneros políticos.
Por esta simple razón elevo mi grito de auxilio a Venezuela y al mundo por el “genocidio” que se esta cometiendo día a día con los presos políticos en Venezuela y sus familiares; nuestra existencia es la mayor prueba de que en nuestro país no existe un gobierno democrático y menos estado de derecho.
Luis Alberto Rodríguez
Prisionero político acusado de traición a la patria y
terrorismo, recluído en los calabozos de la Disip en el Helicoide.
Publicado el 10-12-2007
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