domingo, 3 de febrero de 2013

CARLOS BLANCO, "LA AUSENCIA DE CHÁVEZ HA HECHO QUE EL PODER SE DERRAME, QUE NO PUEDA EJERCERSE", TIEMPO DE PALABRA

MOTÍN EN LA CAPITANÍA
A trancos se instala la sensación de que todo se desbarata. Una poderosa fragata en medio de mares turbulentos, sin capitán y sin gobierno, sin ancla y sin derrotero, se dirige hacia el lugar donde todas las catástrofes tienen su asiento. Puede que no; tal vez encalle antes de llegar a los farallones que conducen al averno o en un banco de arena; pero, por ahora, el capitán fue sacado en helicóptero, los demás oficiales no han terminado el curso de pilotos por correspondencia, los grumetes arrasaron con las reservas de ron, la sala de máquinas está medio inundada, y los pasajeros, inquietos, discrepan acaloradamente sobre cuándo y cómo ponerse los salvavidas.
El país descuadernado; un Estado controlado por mafias, a la rusa; una ciudadanía que a veces no tiene más remedio que andar en esa ínclita tarea de cazar pollos, descubrir tesoros de azúcar, flechar carne de segunda, desenterrar huevos sin pascua, y ordeñar vacas clandestinas para obtener leche desaparecida. Lo que ocurre en el pueblo llano también acontece en las alturas. Los próceres sobrevenidos andan al garete, como zombies domesticados por el gendarme que una vez desvanecido, no encuentra rápido reemplazo. Esto explica la lamentable peregrinación a La Habana a buscar órdenes que no se dan, firmas que no se estampan, órdenes que no se escuchan. Ni Raúl Castro ni Maduro pueden suplir a Chávez aunque lo intenten. Ninguno de ellos tiene poder para pegar lo disjunto.
EL PODER VACÍO.
Hace un tiempo se dijo en esta esquina que mas que vacío de poder hay un poder vacío. Chávez fue el que estructuró una dinámica de poder que ensambló civiles y militares, derechas e izquierdas, aristócratas y plebeyos. 
Los circuitos de relación, como en toda autocracia, pasaban por Chávez quien usaba a unos para aplacar a los otros. No hay que olvidar que la sargentería actual alguna vez fue defenestrada por turnos: Nicolás Maduro fue candidato provisional a gobernador de Carabobo, Diosdado Cabello de Monagas y Elías Jaua, que llegó a las elecciones, de Miranda. El Caudillo los subía y bajaba, los metía y sacaba del closet a voluntad. El armador de juego ya no está.
La ausencia de Chávez ha hecho que el poder se derrame, que no pueda ejercerse. Obsérvese que sólo quedan dos fuerzas: la inercia y la represión, armada o judicial. El barco se desplaza por la velocidad que traía, por la fuerza de los vientos y por las olas titánicas, pero no hay rumbo. La otra fuerza es la de brigadas antimotines de la otrora democrática GN, la policía política -civil y militar-, los tribunales y los grupos paramilitares -motorizados incluidos- que pueden ejercer el terror. Fuera de la inercia institucional y del terror no existe otro cemento, desaparecido el Gran Componedor.
El poder se enfermó, se fue a La Habana y es como un espíritu que en plena sesión espiritista se niega a manifestarse. La sesión prosigue porque existe la expectativa ectoplasmática pero el poder sigue su derrame porque está fundidoel centro por donde pasan todos los cables. Mantener la idea del regreso es fundamental pero mientras pasan los días aun el poder de Chávez, con todo lo férreo que ha sido, se licúa.
DEBILIDADES. Nunca el régimen ha sido más débil que ahora lo cual no significa que la oposición sea fuerte. Nunca antes el chavismo luce tan desconcertado, aunque haya decidido jugarse la carta de la usurpación con la hoja de parra del Tribunal Supremo. El país en la práctica está bajo la tutela de una Junta de Gobierno integrada por Maduro, Cabello, Rafael Ramírez, tal vez Adán Chávez -de inexplicable discreción en estos días- y el tarambana de Raúl Castro que se goza a América Latina, no tanto por el poder del chavismo, sino por la fragilidad moral de muchos demócratas.
Vienen elecciones. Las harán cuando crean que tienen todo "atado y bien atado". Piensan que es el mecanismo idóneo para subsanar la pillería jurídica que le dio al menguante poder un hálito de "continuidad administrativa". Sin embargo, todo huele atruco, a viveza y a pisoteo. No pueden resolver ninguno de los problemas económicos, financieros, sociales y administrativos sin apelar a medidas que afectarán a quienes han sido favorecidos por su demagogia. Se sobregiraron en términos reales y simbólicos. Chávez no es eterno como no lo fue Perón, ni Getulio Vargas; tampoco Gómez, ni Pérez Jiménez, ni Mussolini, ni Hitler, ni Stalin, ni tampoco, se cree, Fidel Castro. A Chávez lo pueden convertir en santo o en ángel (caído) pero los problemas en la sargentería ya no los puede resolver.
LOS ESLABONES DÉBILES.
El desenvolvimiento de la crisis ha hecho que la fortaleza del régimen -la conexión cubana- se torne en su más tremenda debilidad. Sí; los jefes cubanos tienen destreza, disciplina, organización y ese vellocino de oro que encontraron: el arrobamiento de Chávez ante Fidel. Pero esa fortaleza se convirtió en debilidad; la exhibición obscena de la sumisión a la tribu de los Castro ha provocada un torbellino de protestas de tal naturaleza que ha permitido convertir la lucha por la democracia en una lucha contra el colonialismo cubano.
Las luchas democráticas del país ahora tienen un contenido de sano patriotismo que el despotismo de Venecuba -como lo bautizó Agustín Blanco Muñoz- ha propiciado. Era inimaginable hace un tiempo que el contenido de las luchas venezolanas fuese a adquirir un ribete anticolonial.
Simultáneamente con el enfrentamiento al control de los Castro y ante la inminencia de las presidenciales, la lucha por un cambio en las condiciones electorales se ha puesto a la orden del día. No se sabe cuánto se podrá lograr en este terreno, pero la denuncia, la exigencia y la unidad en torno a la cuestión electoral pueden colocar al movimiento democrático a la ofensiva.
Para fortuna del país se ha comenzado a producir una convergencia política interesante que pudiera permitir salir de la inercia que también arropa a la oposición. Si hay encuentros en la línea política y el candidato que resulte promueve esa línea anticolonial y por condiciones electorales justas, las fuerzas hoy dispersas muy rápidamente pueden unificarse en términos reales, aun cuando existan diversos centros de agrupamiento como la Junta Patriótica, la MUD, partidos y gremios por separado, movimientos emergentes de la sociedad civil, el bloque parlamentario, entre otros de carácter regional o local.
CALMA QUE AMENAZA.
El país se acostumbró y nos trituraron se dice con desesperanza. Nadie lo sabe. Las tensiones que crujen en la quilla el país las siente y es posible que los timoneles hayan perdido el control. La respuesta represiva y brutal de Nicolás Maduro a la hija de 15 años del comisario Simonovis es un síntoma de cómo la pérdida de legitimidad la quieren subsanar con represión.
www.tiempodepalabra.com
Twitter @carlosblancog

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ANTONIO JOSÉ MONAGAS, EL ODIO COBRA A SU TIEMPO, PIDO LA PALABRA, VENTANA DE PAPEL,

Debe saberse que no hay verdadera justicia si no existe bondad. No puede presumirse de justo quien no practica la indulgencia.
No hay duda de que el régimen ha entrado en barrena sin darse cuenta de que entró en “caída libre”. Su visión equivocada de las realidades, confunde todo a su paso. La ilegitimidad con la cual actúa, pretende encubrirla con acciones coercitivas generándole el fracaso que lo tiene al borde del colapso. Sus decisiones, no tienen el menor fundamento jurídico puesto que burló el contenido constitucional con la vulgar complicidad de un Tribunal Supremo de Justicia cuyos miembros cayeron por el sumidero de la corrupción. El concepto de “justicia”, lo desfiguraron con la intención de ajustarlo a los intereses que guían al régimen por el embudo del socialismo del siglo XIX .
Si este régimen, con el resentimiento que respira y que inspira sus actuaciones, no ha podido conciliar la justicia y la libertad, es porque ha malogrado las oportunidades de haber construido un país enganchado al desarrollo económico y social por el cual se rige el mundo especializado. El afán de poder, basado en la mediocridad de quien se ufana por creerse el menos malvado entre los perversos, ha hecho de este régimen quizás no el peor. Pero si el más miserable. La administración de justicia ha recaído en manos de jueces cuyo sentido de la moralidad está ausente. Como dice El Tamud: “¡Ay de la generación cuyos jueces merecen ser juzgados” pues ello encarna la deplorable situación en la que las togas ceden su puesto a la iniquidad y por tanto a la violencia.
Posiblemente, esta fue una de las razones que animaron a Epiceto, filósofo griego, a señalar que “antes de presentarte al tribunal de los jueces, preséntate al tribunal de la justicia”. Pero, en Venezuela, cabe preguntarse ¿dónde quedó la justicia?. Sobre todo, luego de observar los criterios empleados por el régimen para conspirar, mancillar y atropellar a quienes se resisten a someterse a las insolencias propagadas desde los predios del basurero revolucionario.
El resentimiento de compinches, sumisos, subalternos y aduladores de oficio, incita un régimen disociado de valores morales por los cuales podría pensarse en la imposibilidad de que sus figurones actúen apegados a la justicia, la hidalguía y la ecuanimidad. Y es que esta gente reprobó en la manera de conducir procesos de gobierno de tanta complejidad como los que se dan en Venezuela. La ignorancia los hizo suyos. Pero también, la ridiculez cuando acuden al concepto de “amor” para justificar las sandeces cometidas y exhortadas.
Pero colmo de la amargura de estos encumbrados ilegítimos, lo que rebasó el odio que los caracteriza, ha sido negarse a la solicitud de libertad para Iván Simonovis toda vez que por simple humanidad, más aún por justicia y por la naturaleza del problema físico que lo aqueja, es justo otorgar el sobreseimiento de una causa incierta. Debe saberse que no hay verdadera justicia si no existe bondad. No puede presumirse de justo quien no practica la indulgencia. Y aunque se nieguen a entender las realidades con justicia, aunque manifiesten ser felices porque dicen “amarse y quedarse abrazados gritando Viva Chávez, viva el amor”, el tiempo de Dios es exacto. O como dice el Eclesiastés, “todo tiene un tiempo bajo el cielo”. Es decir, que también el odio cobra a su tiempo.
                       VENTANA DE PAPEL
SIN SENTIDO NI RAZÓN
Todo lo que la vehemencia inspira, no compromete alguna decisión. No sólo por la inconsistencia del discurso, sino también por la inadvertencia o imprevisión que acompaña cada palabra divulgada. Salvo en aquellos casos en que la fuerza supera la inteligencia y desplaza la ecuanimidad.
Figura sin sentido
© Esteban Ruiz Moral
El discurso de Rafael Ramírez, funcionario apócrifo de un gobierno de facto, como el que ha confiscado la democracia venezolana, en su visita a la ciudad con motivo de firmar el convenio que encadena a Mérida a las condiciones de una PDVSA extenuada y sectariamente politizada, revela el descaro de quien se atreve a hablar sin sentido ni razón de conceptos epistemológica y politológicamente complejos. Conceptos abordados por la teoría económica, la teoría administrativa de gobierno y la teoría política, que escasamente sabe pronunciarlos pero de ahí a manejarlos con propiedad intelectual, la brecha es infinita.
Tampoco el novel gobernador, quien sólo acusa buena capacidad para repetir lo que malamente igual expresan otros funcionarios que hablan con la incongruencia de quien desconoce lo que dice. Pero que matizan el discurso valiéndose no sólo de la fuerza de gañote. Además, de la presencia de los medios de comunicación apostados con el propósito de radiar el mensaje y así seguir vendiendo disfrazadas  esperanzas. De manera que cualquier discurso de oficialista alguno, sólo se fundamenta en meras exuberancias cuyo contenido luce vacío pues se halla sin sentido ni razón.
PENOSA ECONOMÍA
Como dice la jerga popular: “el solo no puede taparse con un dedo”. Indudablemente, el país padece una profunda brecha entre lo que gobierno crea como demanda en la economía y lo que la economía es capaz de producir. Tan acentuada anomalía, genera un notable desequilibrio en la economía venezolana.
Más allá de lo que puede significar el problema macroeconómico, el país se encuentra entrampado en un problema ideológico animado por la virulencia política que el régimen se ha propuesto sembrar cual único oficio que sabe realizar. Cualquier anotación suscrita por el Banco Central de Venezuela, carece de la veracidad por cuanto el instituto emisor se encuentra seriamente sometido a los dictámenes del poder político central.  Según la opinión de Maxim Ross, reconocido economista, “está repitiéndose el mismo esquema que Venezuela ha usado para resolver sus dificultades económicas”.
El problema estriba en que Venezuela se acostumbró a vivir en un 97% de del ingreso petrolero, deviniendo tan descarnado proceso en un grave desequilibrio que coloca al país ante un inminente riesgo de quiebra del sistema económico nacional. Insiste Ross en manifestar que el patrimonio de Venezuela se ha escurrido entre acciones de precario análisis pues lo realizado no ha traído el beneficio interno esperado.
Es decir, “no se ha convertido en producción, ni en agricultura. Mucho menos en empleo para el país” por lo que puede inferirse que este gobierno es extrañamente “apátrida” toda vez que las inversiones se han localizado extramuros. O sea, en Brasil, Argentina, Nicaragua, Bolivia, Ecuador y en Cuba, particularmente. Toda esta situación, deja entrever que lo que se vive en el país es una penosa economía.
antoniomonagas@gmail.com

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OSWALDO ÁLVAREZ PAZ, TRAGEDIA Y FATALISMO, DESDE EL PUENTE

El título de estas reflexiones fue utilizado por mí hace algunos años. Quizás con algún sentido profético. Hoy tiene más vigencia que entonces. Para este momento no hay instrumentos institucionales que puedan detener la destrucción de la democracia. Queda muy poco de ella. 
Vivimos al filo del abismo. Quizás ya estamos rodando cuesta abajo, si por abismo entendemos consolidar a este régimen castro-comunista o como quiera llamarse. 
Lo cierto el infierno está cada día más cercano. Los insultos, agresiones obscenas y violencia física e institucional de los últimos días, hablan por sí solos. 
Maduro, Cabello, Jagua y ese almirante “en jefe” Molero, actual ministro de la defensa, parecen una junta de gobierno de tercera categoría que sólo pueden apelar a la represión para mantener al gobierno de facto que teóricamente encabeza el impedido Hugo Chávez Frías desde La Habana. 
Carecen de toda legitimidad ética y legal, pero están allí, instrumentos conscientes de quienes dirigen todo desde el exterior.
Las fuerzas armadas perdieron el monopolio de las armas. Hoy las comparten con paramilitares, uniformados o no, con bandas del crimen organizado y con unas neopolicías tan ineficientes como corrompidas. Se libra una verdadera guerra que sale de las sombras a la luz pública. No olvidemos que cuando las balas dan en el blanco preciso… comienza la guerra. 
Quien promueve una confrontación innecesaria puede ser irresponsable y hasta criminal. Pero quien la evita cuando es indispensable librarla por razones de principio y de interés nacional, puede calificarse igual y hasta de cobarde.
Nadie sabe como salir definitivamente de esta crisis. Los cauces normales están agotados y las gestiones políticas, hechas de la mejor buena fe, han fracasado. La dirigencia opositora tiene que entender que en sus manos está permitir la destrucción de la República o impedirlo, luchando por su reconstitución, aunque tenga que ofrendar la vida en el intento. Todos sabemos que enfrentaremos un temporal de resultados inciertos, pero precisamente por eso, los dirigentes tienen que asumir graves responsabilidades. 
Hasta los más idiotas entienden que el país está dividido. Civiles para todos los gustos y militares silenciosamente al borde de la confrontación interna, son signos inequívocos de lo que está por llegar.
A 21 años del 4F-92

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ALBERTO JIMÉNEZ URE, MI MOCIÓN DE PROMOVER EL «SECESIONISMO» Y RETOMAR NUESTRA «SOBERANÍA»

«Repetirás como desquiciado que el Capitalismo es nefasto, empero tu avidez por el Billetardo Imperial te delatará. Igual semejante a un trastornado, disertarás sobre una presunta y socialista doctrina que la ignorancia del Vulgo sacralizará sin conocerla. Y, lo más grave, creerás que el territorio donde naciste fue tu parto y egoísta harás lo posible para exterminar a sus demás pobladores cuando sospeches que escindirás»
Es obvio que quienes trágicamente conducen los asuntos «jurídicos-financieros» de la Nación Venezolana han socavado nuestra «soberanía», al extremo de haberle transferido sus atribuciones y decisiones (en representación del Estado) a un gobierno extranjero: al de Cuba, una isla que, durante más de medio siglo,  ha estado sometida al régimen genocida de los CASTRO RUZ.
Primero a hurtadillas, desde hace ya poco más de una década, el Funcionariado Mayor de Comandancia de Venezuela nada realiza sin previamente notificar a su insólito y  fortuito superior forastero. Sin consultar a los ciudadanos, a los nacionales de la que fue patria bolivariana, subordinaron a Venezuela al gobierno de Cuba (convirtiéndola en un «de Hecho», que no «de Derecho», Estado asociado) Ahora, sin ningún pudor, viajan constantemente a recibir instrucciones.
Por lo expuesto, pienso que ahora debemos promover el «secesionismo» y restablecer la soberanía de la república. Ninguna «írrita» y «situacional sala» para la presunta interpretación del contenido de la Carta Magna, interna o externa, podrá jamás torcer el texto de nuestra Constitución. En el Art. 01 de los Principios Fundamentales, está clarísima nuestra emancipación: 
«La República Bolivariana de Venezuela es irrevocablemente libre e independiente y fundamenta su patrimonio moral y sus valores de libertad, igualdad, justicia y paz internacional, en la doctrina de Simón Bolívar». 
Estoy persuadido que los «entreguistas» sabrán quién fue el Libertador y qué escribió, y, en algún momento, tendrán que asumir su responsabilidad ante los nacionales que aguardan para juzgarlos.
Mediante excesiva y ofuscadora propaganda, el «Priorato Comunista» infiltrado en el país inocula en la psiquis de los venezolanos sentimientos de inferioridad frente a un monstruoso gobierno extranjero cuyos actos son abiertamente premeditados y lesivos a la autonomía de la república.
Cuando recibieron a Fidel CASTRO RUZ y auxiliaron económicamente a su despótico gobierno, otros equivocados presidentes de Venezuela igual fortalecieron y legitimaron las conductas anti-democráticas en Ultimomundano. Pero, nunca se subordinaron a las decisiones del ya jurásico tirano.
(jimenezure@hotmail.com
urescritor@hotmail.com
@jurescritor

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